Capítulo 19: ¿Fútbol?

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Aaron:

La cena estaba realmente muy aburrida. Como siempre mis tias trataban de molestar a mi madre indirectamente.

-¿Cómo ha estado tu trabajo querida?

-Bien, hay muchos casos últimamente.

-Si me imagino- dijo mi tia sarcasticamente.

Mi madre entrecerro los ojos cortamente y luego sonrió como si nada hubiera pasado.

-Ah por cierto, muy linda la niña que nos abrio. Se nota que es de tu clase.

Mi madre confundida miró hacia abajo y al acordarse levanto la mirada.

Yo estaba expectante a lo que dijera. Queria saber que piensa de Holly.

-Es una chica muy talentosa y muy callada, por lo que nunca causa problemas. Es muy competente en lo que hace.

-¿Si?- respondió otra de mis tias - Pues ya lo veremos.

En ese momento entro Holly haciendo que todas las miradas se dirigieran a ella esperando por su error.

A ella le temblaban las manos mientras servia pero logró hacerlo todo perfectamente. Aunque se le notaba que estaba algo nerviosa y Noah no apartaba sus ojos de ella.

Yo solo queria pararme y gritarle a todos que dejaran de mirarla tan despectivamente y llevarmela.

Pero sabia de antemano que mi madre se pondria histerica por hacerla quedar mal y despediria a Holly.

Y eso es lo que menos quiero.

Luego de ese momento tan incómodo para todos, la cena transcurrio entre discusiones de mi madre contra su familia, mi padre y los cuñados de mi madre hablando de yo no sé que y yo mirando a Noah quien también me miraba con una sonrisa malevola.

Ya habiamos terminado gran parte de la cena que, por cierto, estaba deliciosa.

Holly traia postres de chocolate y entonces recordé cuando ella estaba revolviendo el chocolate y no le gustó.

Ella al parecer habia hecho el postre. Y yo rezaba porque no estuviera amargo. Aunque si fuera asi me lo comeria solo por el hecho de que ella lo hizo.

Sirvio la mayoria de platos y solo faltaban dos.

Yo aún no bajaba la guardia. Conocia perfectamente a mis tias y ellas podian llegar a ser unas arpias.

Cuando entraba con los dos platos faltantes, mi tia que estaba sentada cerca de la puerta se movio un poco y Holly tropezo, enviando un pastel a la cara de mi abuela y el otro al suelo. Para reducir el impacto agarro el mantel, llevandose todos los platos consigo y manchandose de vino, ensalada, salsas y chocolate.

Mis primos rieron, mi madre enrojeció y mis tias se miraron entre si satisfechas. Yo mire a Matt y él me devolvio la mirada compartiendo mis pensamientos.

Todos conmocionados.

Holly se puso en pie de un salto y se disculpo con cara de que iba a llorar. Me hizo sentir tan mal por no poder hacer nada.

Me levante rápidamente y fui tras ella. Queria hacerla sentir mejor y aunque fuera una vez más sonriera como lo hizo más temprano.

Fui hacia la cocina y allí estaba ella sentada con la mano en la frente. Lo primero que noté al verla fue que su mano y frente estaban sangrando.

Me acerqué y tome su mano para verla mejor. El corte era profundo y sangraba bastante, también vi su frente y esta solo estaba manchada.

Entonces mi madre entro por la puerta y casi pude jurar que iba a ponerse histerica o loca pero solo se empezó a reir.

Mi Timida ChicaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora