The Way I Love You | myg.kth

XIII

TAEHYUNG

Compartir, en el idioma o lenguaje que fuese, tenían el mismo significado, había sinónimos. Diccionarios me lo decían, el internet me lo confirmaba, y mi sentido común me lo gritaba; pero ninguno parecía ser aplicable para Yoongi hyung, al menos no en cuanto a su cama se refería.

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Verbo transitivo
Dar [una persona] parte de lo que tiene para que otra lo pueda disfrutar conjuntamente con ella.

Aunque llevaba por lo menos una semana durmiendo en la habitación de Yoongi hyung; por dormir hago referencia a que compartíamos su espacio de tranquilidad inconsciente. Técnicamente tomábamos turnos para dormir en la cama, un colchón en el suelo o su armario. Pero en ningún momento permitiéndome tocar la superficie que el tenía determinada como su zona segura, por más que lo intentara. Nunca me dejaba dormir en su cama, nunca me dejaba tomar una de sus almohadas, cuando se daba cuenta que dejaba de hacer tanto ruido me despertaba y me pedía me pasara al colchón, o se quedaba revisando cosas sentado en su cama. Era como, tener su permiso solo para sentarme ahí, pero no para descansar como el hacía. Y había intentado dormir a su lado, me golpeo tan fuerte que terminé de cara al suelo, por eso acudimos a un colchón delgado junto a la cama, nos evitamos desgracias. No es que quisiera siempre terminar durmiendo en un lugar ajeno a mi cama, pero en las situaciones en las que nos encontrábamos siempre, concluían con ambos durmiendo en su habitación.

Y me gustaba. Estaba llegando al punto de considerar hacer una petición para cambiar de habitaciones, resaltando mi comodidad por dormir con Yoongi hyung a Jin hyung. Pero eso era algo casi imposible de realizarse y más aún de cumplirse mi capricho, por dos cosas. La primera, Jin hyung es receloso cuando se trata de Yoongi hyung y de mi en una habitación, no se me explicaron razones porque no las he necesitado, pero me resulta innecesario y quizá inadecuado como compañeros de grupo.  Y la segunda tal vez la más relevante por el momento, hyung me esta por odiar <que sería lo más normal y alivianado de la situación, yo como mínimo me hacía la ley del hielo por el resto de la vida> , que el poder dormir con él será sólo un sueño.

- No sé como lo consigues pero los segundos que pasan no aminoran mi odio por tu sola persona, Kim. Si sabes qué te conviene, lárgate - no tuvo que repetirlo, ni mucho menos alzar la voz, me había adelantado y antes de escuchar su última palabra  ya estaba dentro del armario de mi habitación fuera de su alcance. Lejos del rencor que su alma desprendía asfixiándome en el espacio en que estábamos.

Un accidente, eso había sido, eso había yo tratado de explicar.

<Pero no es tan sencillo justificar mi estupidez innata>.

Haber revuelto las letras de sus canciones no fue jamás mi intención, sólo quería que entrara un poco de aire nuevo a su dormitorio, pero al abrir la ventana algo en mi contra sucedió. No pude evitar sentirme mal <y temer por mi vida misma>, por lo que trate de regresar las hojas a su lugar en el mismo orden en el que creí que estaban, pero no sabía como iban ni siquiera sabía si eran letras de canciones. Al menos mi nombre no debería de estar en ninguna de ellas.

Con el desastre por todos lados, la ventana aún abierta y algunas hojas entre mis manos fue que Yoongi hyung entró a su habitación por la que parecía haber pasado un huracán <y se llama Taehyung>. Me disculpe mil veces, sabiendo que eso no arreglaría la gran metida de pata que hice, trate de explicarme pero el miedo y la vergüenza cerraban mi garganta como quien quiere asesinar a alguien simplemente cortándole la respiración.

Quería llorar, los ojos me picaban y era casi insoportable el hecho de mantenerlos abiertos, necesitaba llorar y no podía conseguirlo lo cual solo lograba hacerme sentir peor <hasta siendo miserable soy un asco>. Me mantenía algo suspendido en incertidumbre el hecho de que no hubiese estallado en gritos nada amistosos en mi contra, como debería de haber sucedido realmente. Pero supongo que ver mi cara de vergüenza total lo detuvo. Bueno, en realidad no creo eso. Parece más probable que esté tan cansado como para querer gritarme un poco.