MAD WORLD. (Chris Evans y tu)

Tuya.

¿Podrán pasar los años sin que puedas olvidar al gran amor de tu vida?

Los labios de Chris se aferraron a los labios de Ellen. Las manos de Ellen se aferraron a la espalda de Chris. 

El mundo no existía para ellos dos, en la boca de Ellen, sentía la vida, Evans.

Los recuerdos empezaron a presentarse ante los ojos cerrados de ella, y con resentimientos Ellen, quería alejarse de los labios de Evans, más él insistían en besarla.

-No Chris. _Suscitaba, tratando de apartar su boca de la boca de Evans, pero él no decía. _-Espera Chris. _Suplicaba, empujando con sus menos débiles, pero era inútil. _-CHRIS NO!_Gritó, él se alejó de inmediato. Chris estaba muy agitado.
-Lo siento!_Susurró él, queriendo acercarse nuevamente a Ellen, pero ella retrocedió dos pasos. Y con la mirada desviada le preguntó.
-Qué haces aquí?
-Querían verte. _Respondió enseguida, su mirada arrepentida estaba impregnada en ella.
-Si más me recuerdo la última vez que nos vimos dijiste que nunca querías volver a ver mi horrorosa cara._Musitó cabizbaja.
-Ellen yo..._Intentó acercarse de nuevo a ella, pero Ellen retrocedió de nuevo diciendo.
-No te acerques. _De sus ojos empezaron a emerger lágrimas tras lágrimas.
-Necesito explicarte. _Suplica acongojado. _-Podrás perdonarme?
-Tu tienes que perdonarme. _Responde Ellen. _-Yo te robé tu vida, yo te aparté de tu familia. Haces bien en odiarme.
-Mírame, Ellen. Mirame! _Ella alzó la mirada con los ojos llenos de lágrimas. _-Crees que yo te odio?
-No lo sé. _Suspiró Ellen, desviado la mirada enseguida. _-He estado encerrada por mas de un año en una prisión de máxima seguridad. _Añadió.
-Yo no fui. Yo ni siquiera sabía que estabas encerrada. _Trata de explicar Chris.
-Yo sólo quiero olvidar todo y regresar a casa. _Le dijo ella.
-Y lo nuestro? _Preguntó preocupado.
-Chris... No hay un lo nuestro. Entiende. Tu ya tienes una vida aquí, y yo tengo que hacer una vida en el lugar al cual pertenezco, que es el campo.
-¿Me amas? Me amaste alguna vez? _Dudó Evans.
-No entiendo para que preguntas eso. _Rio ella.
-Solo responde.
-Aun recuerdo la primera vez que nos tomomamos de las manos. Yo temblaba del miedo, pero al sentir tus dedos enredados con los míos, de ellas no me quería solar. _Dijo cabizbaja.
-Me dijiste que todo lo que hacías conmigo, lo hacías por primera vez._Recordó él.
-Quisiera volver el tiempo atrás, quisiera que todo fuera como antes. Creer con ingenuidad sobre una vida feliz. _Dijo ella, sus lágrimas seguían cayendo sin parar. Los ojos de Chris la veían con ternura, con tristeza.

-Te juro Chris. Yo no quería hacerte daño, ni a ti, ni a tu familia. _-Sollozaba ella. Chris se acercaba con confianza. _-En éste mundo yo sólo era una persona más, pero anhelaba ser el mundo para ti.

Chris la terminó estrechándola entre sus brazos.
-Cuanto lo siento! Mi amor. _Besó su cabeza.

Era confuso para Ellen estar de nuevo entre los brazos de Evans.
Sentía de nuevo el calor de sus brazos, el latir de su pecho, escuchar de nuevo el timbre de su voz, sentir esa fuerza que la presionaba en su pecho. Pero sentía que ya nada sería igual.
Ellen lo alejo de ella, y lo esquivo caminando lejos de él.

Ella se recostó sobre la pared, cruzándose de brazos, con la mirada gacha.
Chris se sentó en la sala, un tanto pensativo, mientras observaba a Ellen. Se formó un inmenso momento de silencio. Ella no dejaba de verlo de reojo y alcanzaba a percatarse de su cálida mirada a ella.
-No sé lo que mira en mi, pero que no deje de mirarme. _Decía en silencio Ellen. Sintiendo un sin fin de cosquillas en su vientre.
Y es que a ella le parecía mas hermosa la vida cuando él la miraba. Lo miró por unos momentos más.
-Sus ojos son tan hermosos, su boca, esos brazos, su espalda, su voz, su sonrisa. Ese hombre me atrae más que cualquier cosa en éste mundo.

-Me estás matando Ellen. _Susurra Evans, con la mirada inmóvil en el suelo. Ella no dijo nada.

Ellen después de unos momentos de tanto pensar finalmente ella llegó a la conclusión.
-Yo lo estoy matando a Él, y el a Mi. Que bonito será matarnos los dos juntos. _en silencio empezó a caminar a él, y se sentó a su lado, tomó una mano de Evans y la empezó a acariciar. La mirada de Evans fijó la mirada en ella.
Ellen empezó a besar su mano, por el cuerpo de Chris se empezaban a manifestar pequeños toques eléctricos. Con esa mano él empezó a acariciar su suave y lisa mejilla sintiendo el deseo de besarla. Chris se acomodó en el sofá, la tomó de la mano y la jaló para sentarla en sus rodillas.
-Mi Chris. _Suspiraba ella, acariciando su rostro. -Mi hermoso Chris. Mi amor, él único en mi corazón. Soy tuya en todos los lugares del mundo y del cielo. _Ellen toca su boca, esos rojos labios, secos y ansiosos por ser besados, con un dedo toca el borde de sus labios, va dibujándola como si saliera de su mano. Esa boca se abre apenas, los ojos de Chris están fijos en los labios de Ellen mientras ella sigue acariciando los suyos. Sus rostros se acercan, empiezan a sentir la respiración uno de el otro, sus bocas se unen, dando un tope con presión, ella se concentra en el labio superior de Chris, y él en el inferida, cada segundo el beso se agranda, el beso se profundiza a medida que aumenta el deseo ambos. Ella se abre sobre sus piernas y el presiona con fuerza sus manos en loa glúteos de Ellen.
-Tan parecido a nuestra primera vez. _Sonríe Chris.
-Quisieras recordarme que sigue después. _Le susurró ella.
Chris sonríe y la toma en brazos.
-Hay alguien?
-No!_Responde ella moviendo la cabeza de izquierda a derecha sin hablar.
-Okay. _Camina unos pasos y ve el pequeño pasillo y se queda dudoso.
-Cual es tu habitación? _Pregunta.
-Esta tontito._Señala la puerta que esta a la par de ellos al lado izquierdo. Con esfuerzo Evans abre la puerta, y se quedan viendo la inmensa cama.
-Bajame. _Le dice ella muy inquieta y corre a la cama.
-Puedes creer Chris? Una cama más grande que la de los Mendoza._Dice ella muy emocionada lanzándose de espaldas sobre la cama.
-Tengo en casa una más grande para ti. _Masculle él.
-Qué?
-Qu é?
-Dijiste algo?
-No, es solo que hoy estas más hermosa que nunca. _Dice él acercándose.
-Seguramente es el lápiz que me puso Angie._Dice muy ingenua.
-Nunca había visto una casa dentro de otra casa. _Comenta ella.
-Aun te falta mucho por conocer. _Le dice él tomando asiento en la cama.
Ella se levanta y se para frente a él, adentrándose en sus piernas, besándolo de nuevo. Sus besos fueron aumentado con rapidez.
Él intentó meter sus manos debajo de su blusa, pero Ellen enseguida se recordó de las cicatrices en su estómago y se alejó de él muy desconcertada.
-No, mejor no. _Le dice muy nerviosa. _-Es mejor que te vayas. Se puso las manos cruzadas en su estómago.
-Qué pasa? _Fruncio el ceño.
_-Son las heridas que te causaron?_Supuso. Alcanzó jalarla a él.
-Eres mi mujer perfecta.
-Se ven horribles. _Susurra muy triste.
-Tu eres hermosa. _Suspira.

Los incontrolables besos siguieron, y sin mas ni menos, la excitación creció en ellos, Chris arrebató de su cuerpo la chaqueta azul que llevaba puesta seguido de la playera, dejando al descubierto su hermoso y velludo pecho, Ellen hizo lo mismo, con la ayuda de Chris se quitó la blusa negra que tenia puesta, quedándose en bragas,
«lo malo de la distancia es la unión de cuerpos, pero lo que l es que se acumulan esas ganas de amar, y cuando te encuentras con esa persona quieres que te arranque hasta el alma.

Las prendas iban huyendo de cada uno de sus cuerpos hasta finalmente terminar adueñándose de la cama.
Ella se enamoraba cada segundo más de él, se enamoró de esos pequeños detalles, de su sonrisa sobre sus labios, su forma de reír, sus manos sobre su piel, el calor de su cuerpo, las carcajadas de sus chistes, sus suspiros al hacerle el amor, se enamoró hasta los huesos.

Eran las 7am de la mañana, un leve golpe despertó a Ellen. Se posa sobre sus hombros, ve a su derecha, ve muy profundamente dormido a Evans, lo mira con ternura y suspira. Ella se pone de pie y se enrolla una sabana en su cuerpo desnudo. Se dirige a la puerta y la entreabre, justamente Angie iba a tocar.
-Ellen?_se asombra ella al verla. -Shhhh!_Le musita Ellen con el dedo sobre sus labios.
-No me digas que Jamie está aquí._Se sorprende ella.
-Algo así._Dice en voz baja.
-Okey! Después me cuentas. Yo iré a darme una ducha y regresaré al hospital, tengo que cubrir a una compañera. _Dice Angie, con algo de emoción.
-Okay! _Dice Ellen, cerrando la puerta con seguro.
Cuando regresó a la cama, ya Chris la esperaba despierto.
-Qué pasa? _Curiosea él.
-Nada! Mi amiga. _Dijo Ellen, recostándose sobre él.
-Como te sientes?_Sonríe Evans.
-Mejor que nunca. _Responde ella, acercando su boca a la de Chris, él despeja el rostro de Ellen, quitándole los mechones de cabello que caían a causa de estar boca a bajo y la besa con suavidad y termita.
-Quisiera quedarme todo el día, así contigo. _Comenta Evans.
-No hay manera. Dentro de una hora tenemos que estar en la corte. _Le recuerda él.
-Y si no vamos? _Sugiere Evans.
-Me arrestaran de nuevo.
-Yo no dejaría. _Cruzan miradas.
-Tienes media hora para hacer conmigo lo que quieras. _Plantea ella.
-Media hora?
-Qué esperas?

Ambos se cubrieron con la sabana.

******

Angie llegó al hospital, muy apurada, un tanto inquieta por lo que supuestamente estaba pasando con Ellen y Jamie.
Cuando de pronto al empezar su rutina de revisión, se encuentra a Jamie, limpiando los pisos muy desanimado.

-Jamie?_Llamó la atención.
-Ya llegaste?
-Hace dos horas.
-No estabas con Ellen?_Preguntó confusa.
-No. Ella me rechazó ayer. -Dijo muy desanimado.

Angie se lleno de duda, si Ellen no estaba con Jamie. ¿Con quien estaba?

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Hola! Nos leemos de nuevo.
Gracias por leer, espero que les guste el nuevo capítulo.

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