Luchando contra la corriente [Draco Malfoy]

Veintitrés

Pasé dos días en la enfermería por rutina y precaución. Remus me mandó un vociferador y luego de eso me fue a visitar.

Mis amigos estuvieron conmigo en todo momento, aunque de vez en cuando Harry se escabullía con Ginny, y Ron con Hermione.

A Draco no lo volví a ver por la enfermería, y por alguna extraña razón, me sentía mal.

Algo adentro de mi sí quería verlo.
Pero era como si se lo hubiera tragado la tierra...

—Te está evitado —aseguró mi amiga mientras caminábamos hacía el gran comedor. Yo la miré muy confundida, ella continúo hablando y rodó los ojos—. Hablo de Malfoy... Mientras estuviste en la enfermería y no fuiste a pociones, te buscaba en clases todo el tiempo con la mirada. No sabe disimular.

—¿Y eso qué? —fingí desinterés.

—No te hagas, Isa.

Hermione y yo nos sentamos cerca de Neville para cenar. La mayoría de los de Gryffindor y algunos de Ravenclaw y Hufflepuff, se acercando a mí para preguntarme cómo estaba.

—Entonces, cuéntanos Isabella —comenzó hablar Fred—, ¿Qué se siente morir?

—Fred no seas idiota, ella no murió —dijo George uniéndose a la conversación—. Isa resucitó del más allá...

—Tú no seas idiota, para eso tienes que morir primero —comentó Fred no muy seguro.

Definitivamente eran unos tarados. Pero su conversación me parecía divertida así que me mantuve en silencio aguantando la risa.

—Tienes razón —asintió con la cabeza George—. Isa, ¿qué se siente morir?

—No morí idiotas —Rodé los ojos y me burlé de ellos.

—¿A quién llamas idiota? —me reprocharon a coro y lentamente comenzaron a levantarse de la mesa.

La última vez que los llamé así, ambos me salieron persiguiendo por toda la madriguera.
Así qué, previniendo lo que podía pasar, comencé a levantarme de la mesa y salí corriendo del gran comedor antes de que pudieran atraparme.

En una fracción de segundo me giré y pude notar que Fred y George venían detrás de mí.

Solté una carcajada pero rápidamente la detuve al darme cuenta con quién había chocado.

—Draco —susurré algo cansada por la agitación.

Él sólo me miró detenidamente por unos segundos.

Hace varios días no lo había visto, ni había cruzado algún tipo de palabra con él.

¿Será que Hermione tenía razón? Aunque siempre la tiene pero, ¿será qué Draco sí me estaba evitando?

—Bueno —intervino George alargando ligeramente la "o"—. Nosotros nos iremos a... a cualquier otro lado. Aunque no creas que te libraste de ésta, Isa-chica-inmortal.

Rodé los ojos y solté una pequeña carcajada.

George le hizo una ligera seña a Fred con el brazo y antes de irse me dijo de una manera divertida y desafiante: