Capítulo 17: "Desde donde todo comenzó"

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Pov Akihiro:
.....
No sabía que hacer. ¿Qué había pasado? Juré haber muerto hace menos de un minuto... y ahora me encontraba en un pueblo. Sentado en el suelo, mientras me miraba las manos sorprendido.

"¿Qué pasó?" me preguntaba a mi mismo.

》-¿No lo recuerdas? -escuché una voz en mi cabeza- Akihiro Sasaki. Hoy te suicidaste a las 18:37pm.《

-Soy Hazuki... ¿Qué hago aquí entonces? -pregunté en voz alta, notando que la gente que pasaba me miraba extraño-.

-¿No lo sabes, cariño? -escuché la voz, pero ahora más de cerca. Al voltearme ví que se trataba de una chica hermosa, tenía el cabello rubio y los ojos verdes, sus labios eran de un rosado muy suave y sus manos parecían tan delicadas como una copa de cristal-.

-¡¿Q-Quién eres tú?! -pregunté asustado, mientras retrocedía un par de pasos-.

-Soy tu ángel guardián, soy Yuri -me contestó ella, acercándose y acariciando mi mejilla- No tienes nada que temer.

-¿Ángel guardián? ¿Qué demonios hago aquí? ¿Dónde estoy?

-Estás en un pueblo de la zona central, tu vivías cerca de aquí, ¿recuerdas? -me preguntó y yo asentí- Dejame explicarte, cariño, cuando las personas mueren de forma natural como con una enfermedad, llegan a Regnápolis. Un lugar donde todo es como tu quieres que sea.

-¿Un lugar como yo me lo imagine?

-Si -asintió ella, mientras me miraba fijamente- Cierra los ojos y trata de verlo.

"Qué bobada" pensé en ese momento, pero de todas formas cerré los ojos e intenté ver aquel lugar.

Nada pasó al principio.

Ya cuando me estaba rindiendo comencé a sentir un delicioso aroma como a las galletas que me hacía mi madre de niño. Qué aroma tan placentero era ese. El olor de mi viejo hogar, cuando todo era lindo.

-Puedes abrir los ojos -me dijo aquella chica de hace un rato con una voz suave y tranquila-.

Al abrirlos mi sorpresa fue grande. Un montón de árboles hermosos estaban por todos lados. Los colores y todo era tan claro que estaba por quedarme ciego, eso no me importo realmente. Ya que el aroma a las galletas seguía ahí, no pensaba irme. Todo era tranquilo, por alguna razón no sentía frío ni tampoco calor. Las preocupaciones se esfumaron de forma abrupta y todo lo negro se tornó a un blanco muy hermoso. Era sin duda algo perfecto.

-Suficiente -dijo la rubia chasqueando los dedos, haciendo que todo desapareciera. Lamentablemente habíamos vuelto al mismo lugar de hace un rato- ¿Qué opinas de eso?

-H-Hermoso... -contesté con los ojos abiertos a tope-.

-¿Verdad? -me sonrió-.

-¿Por qué no puedo estar ahí? yo ya he muerto. ¿Porque volví a estar en este lugar?

-La respuesta es simple, Akihiro -me dijo- tú te suicidaste... en otras palabras, adelantaste tu muerte. Cuando las personas se suicidan, son castigadas a volver a la vida en un cuerpo totalmente diferente. Igual que tú.

-¿Eh? -pregunté mientras me examinaba el cuerpo y me tocaba la cara. Estaba más desarrollado que antes y podía ver perfectamente sin necesidad de usar anteojos-.

-Me gusta como te quedó el cabello -dijo ella entre una risita- Diría que el azul te queda mejor que el rubio.

-¿A-Azul? -pregunté tocándome el cabello, sin duda se sentía diferente-.

La chica se acercó a mi, probablemente para que pudiera ver mi reflejo en sus ojos, y de verdad quedé sorprendido. Me veía totalmente cambiado y mi pelo era... era azul. Tenía una extraña boina en mi cabeza y un traje completamente azul.

Entre dos mundos [Resubiendo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora