Entre dos mundos [Resubiendo]

Capítulo 57: "El final del comienzo"

Pov Akihiro:

Sachiko y yo no podíamos creer que Yuuki había muerto. Teníamos su cuerpo frente a nosotros, y yo no sabía que decir a ello. Todas las veces que Yuuki me ayudaba se me vinieron a la cabeza, incluso el día que nos conocimos.

Golpeé el suelo con impotencia, al mismo tiempo que mis ojos se llenaron de lágrimas. No podía creerlo. Yuuki, quien estuvo con nosotros en las buenas y en las malas, había desaparecido de este mundo tan fácilmente. Me enfadé mucho conmigo mismo. Ya que en esos breves segundos que Yuuki seguía con vida, no pude agradecerle por todo lo que hizo por nosotros, y más que nada por el gran favor que me hizo, y del cual el resto no tiene idea. Por todas las veces que se le ocurrían nuevas ideas, y por las otras en las que evitaba conflictos y sugería nuevos proyectos. Él se llevó el peso de la muerte de Kazuya en uno de esos proyectos, y aún así tuvo la fuerza de voluntad de volver a crear una armadura, corrigiendo su error. Yuuki era increíblemente inteligente, y sin él, probablemente no estaríamos donde nos encontramos ahora, peleando con Sora, con una comunicación de unos auriculares que él mismo modificó para varios reclutas.

Lo que más me dolía pensar, era que Yuuki siempre confío en mí, y hasta sus últimos segundos en vida; él me admiro completamente. A pesar de todos mis errores, todas las veces que fui duro con él, todas las ocasiones en las que le hice sentir ignorado por Kazuya, todas esas cosas... Me dolian fuertemente en el pecho.

Y por primera vez, sentí que la visera fue lo suficientemente útil. Ya que mientras las lágrimas caían por mis mejillas, nadie podía verlas, solamente escuchar mis bajos sollozos. Me dolía literalmente todo en ese instante, y nada podía detenerme ya.

-Gran trabajo, Yuuki... -le felicité, mientras le miraba. Sus ojos estaban abiertos a tope, mientras que desde su boca salía un poco de espuma. Me dieron unos leves escalofríos, ya que Yuuki al ser tan pálido, se le empezaron a notar las venas en todos lados. Y la sangre se empezó a notar en su rostro, como si fuera un papel en blanco manchado con tinta. Al instante, opté por pasar mi mano suavemente por su cara, logrando dejarle los ojos cerrados. Acto que provocó de alguna forma que mis ojos se llenaran totalmente de lágrimas.

-Akihiro... -me nombró Sachiko caminando hacia mí, lentamente rodeandome con sus brazos en un cálido abrazo. Pensé que me sentiría mejor con ello, pero lo único que provocó fue que, mi llanto aumentara. Sachiko parecía estar muy mal, pero aún así se mantenía digna. O al menos más de lo que yo estaba. Mi cuerpo me seguía doliendo, pero no se comparaba al dolor que estaba sintiendo en este preciso instante...

¡Clap! ¡Clap! Sentí desde muy cerca. Se trataba de Sora, quien mientras observaba la situación, no dejaba de sonreír y aplaudir. Como si se tratara de un espectáculo. Sachiko y yo le miramos indignados casi al mismo tiempo.

-¿Eso fue todo? -preguntó Sora.

-"¿Eso fue todo?" -repitió Sachiko, en tono molesto, a medida que sus ojos se llenaban de lágrimas- ¡Yuuki era alguien especial! ¿Cómo mierd* puedes decir eso, cerdo asqueroso?

-Saquen a esta estúpida mujer de mi vista... -ordenó Sora, señalando a un ángel que se encontraba atrás de ella. El cual no tardó ni un segundo en afirmarla de ambos brazos.

-¡Suélteme! -gritó Sachiko, intentando zafarse desesperada- Porfavor... ¡Déjenme ir!

En el momento en el que alejaron a Sachiko, Sora miró como se la llevaban y sonrió con maldad. Me di cuenta de que Sachiko había quedado cerca de Asuka, la cual estaba mirando la situación realmente asombrada. Sabía que estaba por explicarle la desgracia que había pasado...

-Llorando de esa forma por una nenaza... -se burló Sora- No valía la pena.

-Hijo de... -iba a decirle, pero de pura furia no pude hacerlo. Corriendo de inmediato hacia él, para atacarle con mi espada, pero moviendo sus alas de un lado a otro, él empezó a volar, dejándome abajo.