Entre dos mundos [Resubiendo]

Capítulo 28: "Refugio"

Pov Asuka:

De momento no pude corresponder ni negarme, solo me quedé ahí con los ojos abiertos a tope en medio del beso, notando de inmediato que Akihiro retrocedió, dandole fin.

-Diría que ganaste la apuesta, pero... creo que me he sentido así desde fines del año pasado -me explicó en voz baja, haciendo su comentario casi inaudible-.

Por más que intenté responder a sus palabras no pude, ni siquiera fui capaz de hacerle una mueca o algo. A pesar de que me hubiera gustado responderle.

Lentamente alcé la vista para verle, estaba algo sonrojado, pero de momento noté que su rubor aumentó considerablemente al pegar su vista a la ventana.

Y con justa razón.

Ya que Kazuya estaba ahí, mirando por la ventana con una sonrisa, mientras levantaba sus pulgares y le hacía un guiño a su amigo. No pude evitar soltar un fuerte grito al verlo ahí.

-¡K-Kazuya! -gritamos los dos al mismo tiempo, viendo de inmediato que él nos miró picaramente, para luego desaparecer lentamente entre las cortinas-.

De inmediato sentí un fuerte calor en mis mejillas y opté inconscientemente por bajar la mirada. Más vergüenza que eso no podía haber...

No sabía si debía golpearlo, decirle algo o simplemente correr hacia otro lado. Así que elegí la última opción.

Me levanté con rápidez de la banca para correr dentro de la casa, pero Akihiro me detuvo afirmandome de la muñeca antes de que lograra mi objetivo.

-Si te ha molestado, lo siento -me dijo con la vista baja- No volveré a hacerlo... sin tu consentimiento.

¿Sin mi consentimiento? osea que... ¿Él quisiera hacerlo otra vez?

-¿Por qué yo? -me atreví a preguntar- Tú dijiste que no te gustaban las chicas débiles y yo no tengo nada de especial...

-Me equivoqué... -me dijo sin mirarme a la cara, ni tener la mínima intención de soltarme- Incluso si fueras débil, mi opinión de ti no cambiaría.

-Y-Ya veo...

-Si...

Apenas dijo eso, lentamente acerqué mi mano a la suya (con la que me tenía afirmada) y logré zafarme de su agarre con lentitud.

-Opino que eres muy fuerte, Akihiro -le dije mirando hacia otro lado- Me gusta como eres y como te haces cargo de Rumi, diría que también me gustas, pero... necesito pensar todo esto un poco. Me cuesta asociar todo lo que estás diciendo, ¿comprendes?

-Si, entiendo -me dijo mientras se levantaba de la banca y pasaba a mi lado- Te esperaré lo necesario.

-¿Hablas en serio?

-Nunca había hablado tan en serio, Asuka -me dijo Akihiro, dandome una palmadita en la cabeza- Por cierto, gracias por decir que soy fuerte, me gustaría mucho creerlo. Tan solo soy un chico que se quitó la vida por miedo, y aquí me tienes.

-No es así... -le dije- Hablo en serio. Yo creo que eres muy fuerte, hablando en todos los ámbitos posibles.

-Gracias... también gracias por gustar de mí -me agradeció nuevamente, para de inmediato entrar a la casa en silencio-.

[...]

Al día siguiente de eso, exactamente un 22 de abril, me dió algo de nervios salir de mi cuarto, pero tenía mucha hambre así que salí. Encontrandome con Haruna, Rumi, Kazuya y Shun sentados en la mesa.

-Buenos días -les saludé con una sonrisa pequeña, notando de inmediato una gran sonrisa en el rostro de Kazuya-.

-Hola -me saludaron-.