✓ | 𝐅𝐈𝐆𝐇𝐓𝐈𝐍𝐆 𝐅𝐀𝐑𝐄𝐖𝐄𝐋𝐋, teen wolf¹

23| Learning the plan

23| Aprendiendo el plan

La semana había pasado completamente rápido, hoy era domingo y me encontraba en la casa de Scott junto con mi hermano. Eran más o menos las nueve de la mañana y me estaba aquí porque a mi mejor amigo y a mi hermano se les había ocurrido un plan sumamente estúpido. Scott iba a morir para acaparar la atención del Benefactor, claro, sólo hipotéticamente dado que su corazón seguiría latiendo pero en una frecuencia baja, casi al borde de la muerte.

Los amaba a los dos pero si fuera necesario, los esposaría a ambos en la estación de policía sólo para que dejaran de hacer todas estas estupideces, quiero decir, era completamente comprensible que quisieran frenar todas estas muertes de seres sobrenaturales que eran sumamente inocentes pero ellos no se ponían a pensar en la consecuencias. Si algo le llegara a pasar a Scott, malas consecuencias se nos avecinarían. No sólo a Stiles y a mí, que para nosotros significaría que otro ser querido nos abandonaba, sino también a toda la manada. 

No sabía lo que le pasaba a una manada cuando su Alfa moría, tal vez el grupo se disolvía y no se volvían a encontrar, tal vez viajarían por todo el mundo tratando de encontrar a otro Alfa que los pudiera cuidar como a su familia o tal vez algún integrante tomaba el lugar que había quedado vacío. No lo sabía, pero de algo estaba segura, nada bueno vendría con la muerte de Scott. 

El idiota de mi hermano y yo estábamos en el cuarto de Scott junto a él, repasando el plan. Aún faltaban Kira y Liam, y dado que ellos dos también formaban parte del grupo, debíamos esperar por ellos para comenzar con la gran farsa que teníamos entre manos.

El timbre de la casa sonó.

—Maya... ¿podrías fijarte quien es? —preguntó Stiles mientras sacaba su laptop de la mochila y la colocaba en la cama de Scott.

—No. —contesté con el ceño fruncido. 

¿Acaso pensaba que haría lo que el me dijera? Eso no sucedería ni en un millón de años.

—Por favor, Maya. —insistió Scott sentado en su cama con carita de bebé. No me pude resistir así que tuve que rendirme.

—De acuerdo.

—¿Por qué le haces caso a Scott y a mí no? —habló Stiles un tanto enojado, sonreí mientras abría la puerta del cuarto dispuesta a irme escaleras abajo.

—Porque eres mi hermano mayor y se supone, que como hermana menor, te desobedezco para hacerte la vida imposible. —Stiles me miró serio y con ganas de matarme mientras que Scott me observaba negando divertido. —Además, Scott me cae mejor. —sonreí y bajé las escaleras apresurada, troté hacia la puerta de entrada para llegar más rápido. 

Una vez allí, abrí la puerta para encontrarme a una sonriente Kira con una mochila colgada al hombro y dos colitas que la hacían parecer una pequeña niña tierna.

—Hola. —sonrió y me besó la mejilla en forma de saludo.

—Hola. —respondí de la misma forma. —Pasa, los chicos están escaleras arriba, ¿los esperas en la sala o subes al cuarto de Scott? —pregunté cerrando la puerta detrás de mí.

—Iré a la habitación de Scott.

—¿Sabes dónde está o quieres que te indique?

—Tranquila, se dónde está. —respondió confianzuda. Con que sabía la exacta posición de la habitación de Scott, me preguntaba que pudieron haber hecho estos dos encerrados en el cuarto sin la supervisión de un adulto.

La mirada pervertida que le lancé a la muchacha la hizo sonrojar.

Amaba ser la mala de la historia.