13| La chica nueva
Desperté completamente exaltada en una mesa de metal.
Mi respiración era agitada, la espalda me dolía por la superficie extremadamente dura en la cual me habían acostado y sentía como mi cabeza se partía en dos. Sin contar, que aún sentía el contacto del cuchillo con mi pierna como si de un disco rayado se tratase.
Acaricié mi frente tratando de que el dolor en la cabeza se disipara, sin embargo, no funcionó.
—Tranquila... aquí estarás bien —habló Stiles, recostándome otra vez en la mesa de metal con extremada delicadeza.
Aún me encontraba un poco mareada por el repentino despertar, así que decidí quedarme recostada unos minutos más para poder recobrarme del todo.
El lugar en el que me encontraba era un poco siniestro puesto que no estaba completamente iluminado. Supuse que me encontraba en una veterinaria por los medicamentos de animales, los diplomas de Medicina Veterinaria y los posters sobre el cuerpo de distintos animales domésticos.
Stiles me observaba como si de un diamante se tratase; no despegaba su vista de mí. Una vez que me sentí lo suficientemente bien como para levantarme por mi misma, me senté en la mesa de metal.
Un hombre de piel morena apareció por la puerta y lo primero que hizo fue sonreírme mientras se acercaba a mí.
—Veo que ya has mejorado —dijo sentándose en un banquillo a un lado mío.
—¿Quién es usted?
—Maya, él es Deaton —habló Scott entrando en la habitación—. Es un amigo nuestro, nos ayuda con los problemas sobrenaturales.
No me gustaba relacionarme con gente mayor que apenas conocía, ni mucho menos confiar en ellos, pero si Stiles y Scott conocían y confiaban en este hombre, él era un amigo nuevo para mí. Por algo mi hermano y mi mejor amigo mantenían una amistad con Deaton, sabía que podía seguir los instintos de dos de las personas más importantes de mi vida.
—De acuerdo —respondí. De repente, algunos flashes de la noche anterior llegaron a mi cabeza, aunque no me acordaba del todo—. ¿Qué me pasó?
—Bueno... —comenzó Stiles—. Después de que Haigh casi te matara, corriste por el bosque y te encontraste con Liam en su forma de lobo. Como él no se podía controlar, te arañó un buen rato y luego te desmayaste en el medio del bosque. Hace dos días que te encuentras en un tipo de coma temporal.
Luego de haberme dicho todo eso, él me sonrió inocentemente como si estar inconsciente por dos días fuera del todo normal.
—Vaya noche —ironicé—. ¿Dónde está Lydia?
—Lydia vino a visitarte en esos días de inconsciencia para hablarte sobre unos sueños extraños que la habían estado acechando desde que discutieron en el colegio —Scott me explicaba mientras me observaba a los ojos, esperando mi reacción—. ¿Sabes algo de lo que Lydia hablaba?
—Es algo nuevo para mí también, pero creo que es por la conexión que ambas compartimos —respondí—. Por eso estaba atrapada entre las garras de Liam. Pensé que era Lydia, pero mi subconsciente me había jugado una mala pasada.
Todos asintieron ante mis palabras. No parecían sorprendidos, lo que me dió a entender que tal vez mi hermano y Scott lidiaban con este tipo de cosas todo el tiempo.
—Mientras manifestabas tu estado de síncope —habló Deaton captando mi atención—, eras capaz de escuchar de lo que te hablábamos, por lo que puede que dentro de un periodo de dos o tres semanas, comiences a recordar lo sucedido mientras dormías —explicó.
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✓ | 𝐅𝐈𝐆𝐇𝐓𝐈𝐍𝐆 𝐅𝐀𝐑𝐄𝐖𝐄𝐋𝐋, teen wolf¹
Fanfiction𝐅. 𝐅 | ❝Tras la muerte de su tía, Maya se ve obligada a volver a su antigua ciudad en donde había dejado a las personas que más amaba: a su padre, a Scott y a su hermano mayor... Stiles Stilinski. Lo que ellos no saben es que Maya no solo ha vuel...