27. Una salida

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«No respires el gas» me decía a mi mismo mientras Robert me colocaba la máscara para que me durmiese con la anestesia general

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«No respires el gas» me decía a mi mismo mientras Robert me colocaba la máscara para que me durmiese con la anestesia general. «Sólo tengo que relajarme y aguantar la respiración»

Aunque mi plan fuese ridículo tenía que llevarlo a cabo con sumo cuidado.

Mi prioridad era que sacasen a Paula de ese laboratorio y la llevasen a un lugar a salvo.

La segunda parte del plan era escaparme yo sin que nadie me viese y encontrar a Paula.

Estaba seguro de que ya no quedaba en la isla ningún lugar donde esconderla otra vez.

El problema era que me superaban en número. Así que tenía que engañarlos para escaparme y rescatar a Paula.

«Concéntrate en los latidos del corazón» seguía diciendo mientras escuchaba la voz de Robert que me daba unas últimas indicaciones las cuales preferí ignorar, pues no tenía pensado que me durmiesen como a Paula y experimentasen conmigo.

Tomé lentamente una bocanada de aire antes de que le diera a la válvula y dejara paso al gas tranquilizante. Decidí aguantar la respiración como si me llevara la vida en el intento.

Conseguí tranquilizarme escuchando los latidos de mi corazón que fueron disminuyendo considerablemente. Me limité en pensar en Paula y que pronto estaría con ella.

«Espera sólo un poco más, mi amor»

Era consiente que en la habitación sólo estábamos Robert y Yo. Cuando encontrara una vía de escape me arrancaría la máscara y saldría de allí.

Estaba seguro que Elsa era la enfermera encargada de ayudar a Robert en sus experimentos. Qué tonto al pensar que entre ellos había algo. Aunque aun no he de descartar esa idea.

Si Elsa no estaba en ese momento, nadie controlaría los monitores, ni mi pulsación, ni la respiración.

Si mi plan no fallaba, Robert tendría que avisar a Elsa para que viniese hasta aquí. Seguro que a través de ese teléfono rojo que conecta las casas.

Por fin le encontraba un significado.

Seguro que tienen algún inhibidor de frecuencias para bloquear los teléfonos móviles. De esta manera nadie podría comunicarse con el exterior.

Todo lo que tengan aquí montado seguro que lo llevan haciendo desde hace mucho tiempo.

El tiempo pasaba lentamente. Me sentía relajado. Tenía que mantener el equilibrio entre la calma y el control de mi cuerpo, pues no quería quedarme dormido y exponerme a respirar el gas.

Dudo del tiempo que estuve allí mientras Robert hacía sus preparativos. John se había llevado a Paula a otra sala. Si la tormenta pasaba, por suerte se la llevaría a casa cuando despertase.  Elsa estaría al llegar. Me quedaban Sofía y Paul. Pero dudo de que ellos tuviesen el acceso a esos laboratorios. Seguro que su tarea es la de captar a gente y traerla a la isla para que lleven a cabo sus experimentos.

De vuelta [Terminada]✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora