POV Hangeng
De repente sentí que el cielo estallaba junto con mi corazón, haciéndome despertar con las pulsaciones aceleradas. Busqué al mayor con la vista y al no encontrarlo me dispuse a bajar las escaleras, deseando que aún siguiese allí con todas mis fuerzas, o las pocas que me quedaban.
— Zhou... —comencé a decir al ver que había alguien parado en la puerta, me desilusioné al saber que no era la persona que buscaba y necesitaba en esos momentos más que a nadie— ¿Qué haces aquí? —le pregunté secamente
— Yo —terminé de bajar las escaleras para acercármele— Hangeng...
— No te quiero ver. Vete —le dije sin mirarlo, y es que siquiera tenerlo cerca me producía un vacío enorme al recordar. Aun así, el vacío que sentía no cambió mi forma de pensar: cuando él estaba, el lugar se llenaba.
— No digas eso, por favor —lo tomé lentamente del cuello del pijama, listo para lanzarlo a quien sabe que distancia, solo para sacármelo de encima— ¿Me odias? ¿Tú me odias?
— Si. Te odio, te detesto. Me estas arruinando mi vida —No es que realmente lo sintiese, pero necesitaba perderlo de vista. Entonces, vi como sus ojos comenzaban a llenarse de agua, no quería, no quería, me negaba a verlo llorar, aun sintiendo el vacío que sentía— ¿Por qué lloras? ¡Deja de llorar!
— No pue-edo —comencé a sacudirlo lentamente. Si el lloraba entonces yo también me pondría a llorar.
— ¡Que dejes de llorar ya! —era más un ruego que una orden pero claro, nuevamente, no pude decir lo que quería expresar ni con la intención que deseaba hacerlo— ¿¡Porque lloras niño!?
— ¡Porque... porque te quiero! —me quedé helado. Todos mis movimientos se detuvieron y mis ojos se abrieron para observar al pequeño niño de diecisiete años, bastante flaco, que estallaba en inocencia y sinceridad frente a mis ojos— Te quiero tanto que me duele hacerlo. Me duele saber que tú me odias cuando yo... cuando yo...
— ¿Cuando tú que imbécil? —necesitaba que él me odiase para ser feliz, pero todo parecía ir marcha atrás.
— ¡¡Cuando tú me gustas mucho!! —Sentí mi corazón detenerse, dejé que cayera al piso mientras lo miraba con asombro.
— ¿Qué...? —le pregunté al aire mientras las partes de mi corazón se reagrupaban para latir fuertemente dentro de mi pecho. Nuevamente pensé que mi tórax iba a romperse— ¡¿Qué demonios te gusta de mí?! —le grité algo triste— Lo único que he hecho bien desde que llegaste fue curarte, eso fue lo único que hice bien.... ¡Luego de tratarte mal, tú lo único que haces es quererme! —estaba fuera de mis casillas otra vez, pero no sentía ni ira ni miedo, simplemente tristeza— Déjame en paz, deja de gustar de mí.
Me di vuelta, comenzando a caminar hacia las escaleras.
— No te odio... —le dije mientras corría hacia mi habitación y cerraba la puerta con llave, para luego dejarme caer al suelo con el gato a mi lado.
Nada tenía sentido en esos momentos, y de lo único que estaba seguro, es que estaba realmente confundido.
POV Ryeowook
Caí al suelo de golpe, no estaba preparado para que me soltara. No me atrevería a mirarle, a cruzar mirada con sus ojos. ¡Le había dicho que me gustaba!
— ¿Qué..? —le escuché decir, parecía como si no pudiese continuar— ¡¿Qué demonios te gusta de mí ?!
No lo sabía, quizás todo. No sé. Quizás lo especial que eres, lo interesante de su personalidad que me atrae. Cuando sonríe, aunque solo lo haya visto algunas veces... aquellos hermosos ojos que vi cuando caíamos al suelo... quería decirle todo sin saber explicarme bien.
ESTÁS LEYENDO
Gaze of Love
Short Story"Tal vez mañana decida desaparecer de este mundo para no alterar tu vida." Ryeowook es un pequeño y tímido joven que quedó huérfano a temprana edad siendo cuidado en un orfanato. El amigo de su padre, un importamente empresario chino, es quien decid...