Ella será mi pelirroja.

Capitulo 10

Cierto rubio observaba desde la mesa de Ravenclaw a Celeste quién lo había estado ignorando desde hace dos días y eso comenzaba a crisparle los nervios, la pelirroja sintió una mirada provocando que levantara la cabeza y buscará la fuente de esta y al toparse con los ojos azules de Louis sintió tanta vergüenza e tristeza que inmediatamente volvió a agachar su cabeza.

James miro asesinamente a Louis al darse cuenta de a dónde iba dirigida la mirada de su primo, observó a Celeste esperando qué ella levantara la mirada hacia el hasta que finalmente la pelirroja lo hizo, el castaño le hizo una seña hacia la salida y ella después de unos segundos interminables asintió, le dijo algo a su hermano en el oído el cual asintió mirándola levantarse y dirigirse a la salida, James se apresuró con rapidez a alcanzarla.

—¿Vamos a la casa de Hagrid?— le pregunto el castaño de manera animada, Celeste lo miro un instante antes de asentir con timidez.

—¡Celeste, espera...¿James?— preguntó Louis con confusión, la pelirroja al verlo rápidamente se oculto detrás de James mientras se sonrojaba con violencia.

—¿Qué quieres?— inquirió el castaño cruzándose de brazos de manera altanera.

—Tengo qué hablar con Celeste, así que apártate.— dijo en tono amenazante, la pelirroja se aferró a la túnica de James mientras recargaba su cabeza contra la espalda del castaño sintiendo las lagrimas inundarla, era una estúpida y sabia que actuaba de manera infantil con su amigo, pero todavía no estaba lista para hablar con él.

—Celeste no quiere hablar contigo Louis.— sentenció James apretando los puños.

—Eso qué me lo diga ella...Celeste, ¿podemos hablar?— pregunto con ansiedad, le molestaba ver que ella se aferrara a su primo y más cuando ellos se llevaban tan mal ¿tan molesta estaba que prefería al chico que odiaba que a él?

—Hoy no Louis aun no puedo, te prometo qué todo volverá a ser como antes sólo dame tiempo.— pidió Celeste en tono suplicante alzando un poco la cabeza por sobre el hombro de James, sus ojos verdes se miraban tan entristecidos que el rubio no tuvo otra más qué aceptar.

—Está bien, pero ¿Cel?— inquirió, la pelirroja asintió para que continuará —te quiero.

—Yo también, eres un gran amigo Louis.— el rostro del rubio se distorsiono de dolor al escucharla llamarlo "amigo" cosa que no pasó desapercibida por James quien le lanzó una mirada asesina a su primo mientras esté desaparecía dentro del gran comedor.

—Maldito idiota.— murmuro el castaño con coraje.

—¿Ya se fue?— preguntó la pelirroja en un susurro ganándose una sonrisa de parte del chico, se sentía bien que ella confiara en él a pesar de sus peleas.

—Si.— la pelirroja salió con rapidez de detrás del castaño otorgándole una sonrisa aunque un poco triste qué James no se resistió a devolver aunque él le sonrió con cariño.

—¡Pues vamos con Hagrid!— chillo en un grito Celeste tomándolo de la mano y jalándolo hacia la casa de Hagrid, James no pudo evitar soltar una risa pues se miraba muy animada aunque al pensar que estaba fingiendo lo hizo sentirse triste y borrar su sonrisa ¿qué habría pasado entre ella y Louis para terminar con el rubio besándola y ella llorando e ignorándolo? Trataría de preguntárselo esta tarde.

La pelirroja iba entre saltos mientras cruzaban el puente, James soltó una carcajada cuando la vio tambalearse por culpa de una hoja que piso antes de terminar agarrada a uno de los postes del puente, ella lo miró sonrojada antes de mostrar una amplia sonrisa y volver a correr emocionada.

—¿Soy yo o te cae bien Hagrid?— le pregunto el castaño con curiosidad.

—¡Si! Aveces vengo a ayudarle a alimentar a los Hipogrifos.— alegó la pelirroja con felicidad antes de mirarlo con una sonrisa.

—Oye hoy estoy sumiso así que si quieres que haga algo tú sólo dilo y lo haré.— la pelirroja sonrió con maldad y James sintió arrepentirse de hablar de más, sólo quería hacerla sonreír no morir joven.

—¡Llévame a caballito hasta la casa de Hagrid! Yuju— exclamo con alegría antes de posicionarse detrás del castaño, James se agacho y unos instantes después sintió el peso de Celeste y sus brazos rodear su cuello e las piernas su cintura. —Dale— se movió animándolo a correr, James soltó una carcajada antes de echarse a correr con una pelirroja en su espalda que gritaba y lanzaba manotazos al aire como si fuera una vaquera y él un caballo.

—¡James, Celeste...Hola!— exclamo Hagrid en cuanto los vio aparecer por la bajada, la pelirroja agito la mano saludándolo con emoción mientras James le chillaba que dejara de moverse porque se caería.

—Hola Hagrid ¿como esta? ¿ya se recupero de su gripe? ¿y los Hipogrifos?— pregunto la pelirroja a toda velocidad ganándose unas miradas divertidas de parte de Hagrid y James.

—De hecho, Marlene acaba de dar a luz y su hijo está detrás de la casa con ella, deberías verlos son...— pero antes de terminar la oración Celeste ya arrastraba al castaño hacia detrás de la casa mientras Hagrid negaba con la cabeza y soltaba una risa.

—¡Mira James!— exclamo la pelirroja mientras juntaba sus manos y miraba con ilusión a él pequeño Hipogrifo quién con pasos atolondrados se acercó a ellos ganándose un "aw" un poco fuerte de parte de Celeste.

—¿Ya le pusiste nombre?— preguntó James mientras observaba con los brazos cruzados a la pelirroja jugar con el pequeño Hipogrifo, sonrió cuando vio al animalito acariciar la mejilla de Celeste con el pico.

—Si, se llamara Jeleste.— comento burlonamente causando en James un respingo.

—¡¿Qué?!— exclamo en un grito causando qué Celeste saltara del susto.

—¡No grites que asustas al bebé!— chillo la chica mirando de nuevo con atención al animalito, tarde descubrió que era niña lo cual hizo que Celeste se sonrojara al considerarlo un niño.

—¿Porqué no llamarlo así? Digo, ustedes dos son los primeros en verlo además de mi y su madre.— sugirió Hagrid encogiéndose de hombros.

—¿Y porqué no le pones Hagrid?— inquirió el castaño arrugando ligeramente la nariz.

—¿Quieres que el animalito me odie? No, no, el merece un nombre lindo.— él grandulón se encogió de hombros antes de llamar la atención de Celeste quien lo miro expectante —¿qué te parece que se llame Jeleste por ti y James?— inquirió Hagrid con una pequeña sonrisa, el castaño se sonrojó con violencia pensando que la pelirroja diría que no.

—¡Claro qué si! Es un lindo nombre.— chillo Celeste alzando los brazos emocionada.

—Bien, entonces así se llamará.— confirmó Hagrid con una gran sonrisa que se ensanchó al ver la mirada atolondrada que James le dirigió a Celeste —tú secreto esta a salvo conmigo.

James se sonrojó al darse cuenta que Hagrid lo había descubierto, murmuro una palabrota antes de fingir demencia.