Ella será mi pelirroja.

Capitulo 49

Catalina grito antes de correr despavorida hacia la sala de Menesteres. Estaba a punto de llegar cuando un zarpazo la hizo salir volando para después desplomarse dolorosamente contra el suelo. Greyback se alzo con una sonrisa demoníaca surcando su rostro mientras miraba el hombro de la pelirroja sangrar a borbotones...Eso no había sido  un simple rasguño, a no carajo, había perforado más de lo que había planeado, se encogió de hombros mentalmente ya que dudaba mucho que su señora se molestara por un detallito así.

La pelirroja intento arrastrarse lejos del hombre lobo sin embargo, este avanzaba hacia ella riendo mientras sus hombros se sacudían con gracia, estaba disfrutando de la situación.

—Por favor, por favor detente.— suplico apegándose a la pared de a un lado.

 —¿Porque habría de hacerlo?—  inquirió tratando de parecer confundido.

Avanzo con ella a pasos lentos hasta que acabo corriendo y alzando su mano con las garras extendidas, Catalina grito preparada para recibir el zarpazo pero este nunca llego. Abrió los ojos con confusión y se topo con algo que no esperaba, un chico que jamas había visto sostenía el brazo de Greyback con fuerza, traía una túnica de Slytherin anticuada y lucia una mirada asesina en su rostro, le dio un fuerte empujón a Greyback y este acabo por irse de trasero contra el suelo debido a la conmoción.

  —¡Te atreviste a tocarla!— grito a todo pulmón con su rostro desencajado de la ira.  

Greyback se encogió mientras que Catalina miraba la escena con asombro, el chico se le hacia conocido solo que no sabía de donde.

— Señor...Lord Voldemort. — Catalina abrió la boca con asombro al escuchar el nombre por el que llamo a joven, la pelirroja volteo a ver al muchacho y observo que este no había cambiado su expresión pese al reconocimiento de Greyback.

—Es un asco volver a verte sarnoso.—  ese fue el saludo del muchacho, Greyback  parpadeo sorprendido antes de palidecer aun más con miedo.

—Pe-pero...¡¿Como es que usted esta aquí?!—   grito retrocediendo una y otra vez, Catalina vio como una serpiente aparecía tras Greyback y antes de que pudiera siquiera reaccionar atacaba al hombre lobo envolviendo su cuello, el tipo se quejo tratando de liberarse del ataque mortal de la serpiente.

—Esa sangre sucia no es la única que puede traer personas de la muerte...Aunque tú eres de todo menos una persona sarnoso, Nagini liberalo.— Catalina casi sintió que la serpiente quería replicar sin embargo lo hizo y se arrastro hasta acabar a un lado de la pelirroja.

—Mi señor, ella me obligo usted sabe que...—  pero fue interrumpido con un grito estridente cuando el muchacho le lanzo la maldición torturadora, Catalina vio con sorpresa como el hombre lobo se retorcía en el suelo mientras gritaba una y otra y otra vez.  

  —Ella podrá habértelo mandado pero vi tu expresión imbécil, ¡lo estabas disfrutando!—  grito al final antes de detener la maldición, Greyback suspiro ligeramente mientras aun seguía quejándose en el suelo —Ve con ella, y avísale quien esta de vuelta...Nadie jode con mi familia.

Greyback asintió temeroso antes de salir corriendo a como podía. 

Catalina observo con la boca abierta como huía despavorido antes de ver como el que se suponía era Tom Riddle se daba la vuelta y la miraba con expectación antes de que al ver toda la sangre su rostro se transformara en preocupación, rápidamente la tomo en brazos y avanzo con velocidad hacia la enfermería.

—¿Como...— intento preguntar sin embargo el muchacho la hizo callar cuando la miro.

—Sigo sin tener idea pero es mejor que esa sangre sucia piense que los mellizos me recibieron y crea que son más fuertes de lo que afirma.—  explico caminando con rapidez por los pasillos de Hogwarts.  

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Nadie sabe que es lo que depara el destino...Hace unos meses se encontraban jugando en el patio de la escuela divirtiéndose, besándose con sus respectivas parejas y ahora Andromeda estaba muerta...¿Como era eso posible? Ella siempre fue tan linda, tan llena de vida y ahora ya no estaba más con ellos. ¿Seria cierto? al final debía de haber sido tan difícil para Andromeda de llevar todo ese dolor que finalmente decidió rendirse y irse del mundo de los vivos.

Con tristeza coloco un ramo de rosas blancas en la tumba de su mejor amiga. Su compañera el crimen, el ton de su son. Celeste suspiro limpiando las lagrimas que caían por sus mejillas. Ella jamás había estado en un cementerio de magos, siempre creyó que serian algunos llenos de vida con fantasmas como Nick casi Decapitado volando de aquí para allá haciendo sus propias festividades. Todo estaba tan herrado ya que realmente era tan parecido a un cementerio Muggle como podía ser. 

James abrazo a Celeste observando hacia la tumba de la mayor de los hermanos Malfoy, aunque al principio había tenido demasiados prejuicios reconoció que siempre le había caído bien, ella junto a los mellizos siempre daban una buena batalla, sonrió con tristeza recordando las bromas que siempre se habían hecho de manera mutua, no podía ni imaginarse como estaría Fred en este momento...Miro a Celeste, bueno si que se imaginaba como debía estar, devastado. Él mismo se convertiría en un monstruo si su pelirroja se fuera de su lado.

Colton soltó un ligero sollozo sorprendiendo a las dos pelirrojas y al castaño, de los cuatro era el que había actuado con más calma. Parecía que esa calma se había roto al leer el nombre de Andromeda en esa tumba.

Y pensar que ellos no sabían que Andromeda había decidido morir por el bien de todos, de su familia y de traer a la vida alguien que pudiera ayudar a los mellizos. Ella había decidido irse a tener que enfrentar el hecho de quien era su madre biológica.

Ella había decidido irse con tal de ayudar a los demás.