❤️ Nos callamos la boquita❤️

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Era una tarde tranquila, dos amigos disfrutaban de su compañía mutua mientras comían una deliciosa pizza. Estos dos chicos, Samuel y Guillermo, o como mejor los conocía el mundo, Willyrex y Vegetta, eran los mejores amigos  desde hacía un par de años, su amistad era tan fuerte que había decidido irse a vivir juntos a Los Ángeles, pero después de tomar varias decisiones ahora habían regresado a vivir en su país natal, por ciertas conveniencias laborales.

Willy disfrutaba cada bocado de su pizza, mientras escuchaba a Vegetta hablar y hablar y hablar sin parar sobre videojuegos y YouTube, aunque eso no le molestaba, es más le encantaba, pero de vez en cuando le gustaba simplemente disfrutar del silencio y su comida, y eso a veces se volvía difícil estando con Vegetta. Estos dos amigos se llevaban de maravilla, pocas veces discutían y si lo hacían a los minutos se reconciliaban, pero después de vivir tanto tiempo juntos su amistad fue cambiado a algo más que solo eso, ambos tenían fuertes sentimientos por el otro, pero no era nada formal, algunas veces se besaban o se tomaban de la mano, incluso llegaban a tener locas noches de pasión, pero nunca quisieron formalizar nada, les gustaba ser amigos y llevar la relación que tenían y no quieran que nada de eso cambiase.

—¿Willy? ¿Willy? ¿Me estás escuchando?— preguntó Vegetta al notar lo distraído que estaba su amigo.

Willy no sólo estaba no escuchando a Vegetta, se los estaba devorando con la mirada. Él solo veía como se  movían los finos labios de su amigo, sabía que estaba diciendo algo, pero no le interesaba mucho, él solo se dedicaba a verlo con deseo, moría de ganas por besarlo. Estuvo a punto de hacerlo cuando un chasquido justo enfrente de su cara hizo que se despabilara.

—Tío, estás empanao'— mencionó del mayor entre risa.

Willy para esconder sus ganas de comérselo a besos decidió contagiarse de su risa.

—Lo siento— se disculpó.

—No importa— le sonrió con ternura. —En fin, te decía sobre esta partida de Skywars que jugué y...

Aquí iba de nuevo, hablar sin parar hasta que se quedara sin aliento.

Ya habían terminado de comer, tenían todos los vídeos preparados y finalmente tenían unos minutos para descansar. Habían optado por ver una película juntos y en este momento estaban sentados en el sofá de la sala de TV, la película ya había comenzado pero Vegetta simplemente no paraba de hablar.

—Ah y podemos meter estos mods para la nueva serie, fijo que a la gente le molaría. Y estuve viendo el mod de magia, y ¡ostras chaval! Mola mogollón. También ayer estuve hablando con...

Willy solo quería ver la película, un par de minutos en silencio disfrutando de compañía de su mejor amigo, pero él solo se dedicaba a hablar, esto estaba llegando al límite de su paciencia. Tenía que hacer algo para callarlo. Entonces lo hizo, se giró bruscamente, cortando abruptamente la conversación que estaba teniendo Vegetta, estampó sus labios sobre los de su amigo, tomándolo posesivo, al principio el mayor  no supo responder, todo había sido muy rápido y sorpresivo pero cuando Willy comenzó a mover sus labios él le siguió el tierno movimiento. Varios segundos después se separaron, por la falta de oxígeno en sus pulmones. Se quedaron unos momentos con las frentes juntas sintiendo muy cerca la respiración del otro.

—Nos callamos la boquita— dijo finalmente Willy cuando recuperó el aire que le fue arrebatado.

Samuel solo pudo soltar una risita, mientras acariciaba con mimo la mejilla de su amigo.

—Si así me vas a callar cada vez que hable, nunca pararé — dijo y finalizó besando con dulzura al menor.

Se quedaron el resto de la película abrazados y besándose de vez en cuando, aquello había sido uno de los mejores momentos que pasaron juntos y Guillermo había descubierto la mejor manera de callar a su amigo. No se arrepentía de nada.

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¡Hola! :D hoy les traigo un precios drabble, (un tanto cortito :'c ) que se me ocurrió mientras veía Wigetta Extremo (malditos :'v solo juegan con nuestros sentimientos) Y pues no sé, se me hizo muy adorable como Willy callaba a Vegetta y pues al final esto salió de mi cabeza.

En fin, espero que les haya gustado, los quiero muchísimo y nos leemos pronto.

-Pam

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