El Amor Nace Entre Espinas

Prólogo XIX

Lisbeth Deforth, desde pequeña ha sido una niña independiente, directa y sobre todo curiosa. Fue creciendo con sus propias ideas y convicciones para ser más que una simple señorita de la burguesía, y ella era feliz siendo la chica rebelde, en realidad disfrutaba revelarse a sus padres y sobre todo a la sociedad. Pero en ocasiones las reglas sociales sobre pasan nuestra forma de pensar y sobre todo la idea que tenemos de llevar nuestras vidas, y eso mismo le paso Lady Lisbeth. Le toco enfrentar a la decisión de su Padre en arreglar su matrimonio y darle un vuelco a su vida. Aunque no debería de sorprenderla ya que a su edad de diecinueve años es normal, buscar un esposo, y así mismo asegurar el linaje de la familia y los negocios de esta.

Que más se le puede pedir a la vida, Andrew tenía todo lo que un joven desearía tener, poseedor de un título, riqueza, y si no fuera suficiente era un joven atractivo, con ojos azules intrigantes, facciones finas y un cabello que deslumbraba con su color dorado bajo el sol; claramente es un partido perfecto para cualquier madre casamentera, pero a criterio de él, nunca desearía llenar los requisitos para ser un esposo perfecto. En realidad a sus veintiséis años ha llevado una vida despreocupada, es un libertino, y no busca bajo ninguna circunstancia tener responsabilidades como su Título de Conde lo requería, solo quería disfrutar de las ventajas de este.

Pero nuestro destino siempre nos encuentra, y suele llevarnos a caminos que no deseamos o que desconocemos, pero a veces eso es lo que necesitamos para encontrarle un sentido a la vida.