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27 de Agosto

-Princesa- Juan llama mi atención al llegar del estudio a la mesa en la que estoy sentada- Te extrañé- me da un pico en los labios.

-¿Cómo va el CD?- le pregunto cuando se siento al frente mío.

-No me sacarás información Nina- dice con una sonrisa maliciosa- Solo te diré que todas las canciones tienen un significado entre nosotros.

Mi corazón se derrite ¿Cómo es que merezco a un hombre como él?

-¿Estás bien?-se alerta al ver mi mueca de dolor- ¡Nina!- exclama cuando no le respondo.

-Las patadas... cada vez son más fuertes- le trato de sonreír como puedo- Amo a mis bebés, pero el embarazo me esta volviendo loca.

-Ay princesa- me toma de las manos sobre la mesa- A veces no puedo creer lo suertudo que soy.

-Te amo mucho y lo siento por arruinar el momento pero mi comida ya llego- digo viendo como el mesonero se acerca a nuestra mesa.

-¿Que haré contigo?

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-Emma la princesa- dice Juan a mi lado- Rima ¿no?- asiento con la cabeza viendo mi teléfono- La princesa de papá- y alzo la vista para mirarlo con el ceño fruncido.

-Yo soy tu princesa.

-Pero pronto te convertirás en mi reina- me besa en la mejilla.

¿Se referirá a matrimonio?

Y de repente me imagino en el altar con un vestido blanco y Juan Luis a mi lado poniéndome un anillo en el dedo... No, no se debe de estar refiriendo a eso.

-Señorita Pancheri ya puede pasar- dice la recepcionista y, con ayuda de mi novio, me levanto para entrar al consultorio de la doctora.

Mi doctora de Miami nos recomendó que a partir del mes siete debería ir al doctor cada dos semanas y como nos faltan algunos días para irnos a Miami, decidimos venir a una en Los Ángeles.

-Se han formado bien- dice la doctora haciéndome una ecografía en 4D- Miren a la pequeña; está sonriendo- pone el aparato en el lado derecho de mi vientre- Y el pequeño se está chupando el dedo.

-¿Que lado patea mas?- dice Juan Luis con lagrimas en los ojos.

-El derecho... donde esta Lucas- le aprieto la mano viendo como sus caras se mueven un poco- Un pequeño futbolista, como tú.

-Ahora veremos si se quieren mover y creo que al padre le gustaría hacer los honores- Juan Luis hace lo que le dice la doctora; pasar su mano sobre mi vientre para estimularlos- Miren.

Efectivamente, podemos ver como patean.

-Creo que Lucas tiene tu nariz- le sonrío- Un pequeño Juan.

-Te amo- me susurra pero para no hacer a la doctora mas incómoda, la miro para poder terminar.

-Les quiero decir que los bebes están en un buen peso pero como son dos y tu cuerpo no está desarrollado para un embarazo...- la cara de Juan se pone seria al segundo que dice eso- Les quiero ir avisando que es muy poco probable que nazcan en un peso adecuado. Lo que lleva a que tal vez hasta nazcan al final de este mes- por lo menos se que hasta ahora están bien- Por lo que les recomiendo que no viajen después de la próxima semana.

Cuando llegamos al hotel y entramos a la habitación, Juan Luis se va directo a los closets y empieza a meter nuestras cosas en las maletas.

-¿Qué haces?- acaricio su espalda tratando de calmarlo.

-Nos vamos esta noche- suelta de la nada- Mañana en la mañana vamos a la casa y compramos todo lo que falta con los catálogos.

-¿Y tu álbum?- le pregunto confundida.

-Lo puedo terminar de grabar en Colombia- me quito del medio del closet sentándome en la silla del escritorio- Ese es el mas mínimo de mis problemas en este momento.

-¿Somos un problema para ti?- mis ojos se llenan de lagrimas, el embarazo me hace llorar por todo- Juan...

-¡NO!- grita asustando- Lo siento nena pero esto de las casas, el CD y el nacimiento me están volviendo loco.

-No puedes hacer que nos vayamos así como así ¿cuando nos iríamos a Medellin?

-Pues... en dos días- abro los ojos de par en par.

-¿¡ESTAS LOCO!? En la casa de Medellin los cuartos no están listos- su cara se sonroja y cambia a una de culpable- ¿Que hiciste Juan Luis?

-Compré otra casa...- dice mirando al suelo.

-Y eso me confirma que si, estás loco.

-Es que allí Amanda casi me viola, su prima fingio que estaba embarazada de mi y los exámenes...- me trata de acariciar la mejilla pero no lo dejo- Vele el lado bueno, seremos vecinos de JBalvin y esas habitaciones ya están listas.

-¿Como las decoraste?- me saca una sonrisa, no puedo pasar ni un segundo molesta con él.

-Todo lo que marcaste que querías para la casa de Miami lo compre para esta- se agacha para queda a la altura de mi vientre- ¿Creen que mamá esta molesta conmigo? Yo solo quiero hacerla sentir como la reina que es.

-Ok- suspiro- Nos podemos ir mañana a Miami- me sonríe de oreja a oreja.

Se acerca a mis labios y me hace olvidar ese ataque compulsivo que le dio besándome de esa manera que hace él, volviéndome loca.

-No quiero- le digo cuando se que va para mas- No me siento muy cómoda teniendo sexo con esto- señalo mi vientre.

-Tranquila- me da un beso en la frente- Pero igual ven a acostarte en la cama mientras termino las maletas.

Y no pasan mas de cinco minutos cuando una pregunta surge en mi cabeza.

-Hey- llamo su atención- ¿Cómo haremos cuando los mellizos nazcan?

-¿A qué te refieres?- y me da gracia de que no lo pueda ver porque mi vientre lo tapa.

-Pues cuidarnos... cuando... ya sabes- me sonrojo de la nada.

-Sabes que no haría nada que no te hiciera sentir cómoda- se acerca y me acaricia la pierna- Creo que deberías hablar de eso con la ginecóloga después para ver que te recomienda- se pasa una mano por la cara y se que lo hace cuando esta nervioso- Quería preguntarte... ¿quisieras mas hijos? ¿o con dos es suficiente?

-Tu amor por los niños me sorprende- Juan levanta los hombros- Maximo seis, así que no te hagas ilusiones con diez hijos- digo riéndome.

-Eres el amor de mi vida- dice mirándome a los ojos y parece que no pensó antes de decirlo, pero en vez de hacer alguna corrección; lo afirma- Si, eres el amor de mi vida.

Que alguien me diga por favor en que momento me gane la lotería con este hombre.

Mi Pequeño Gigante 1 (MALUMA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora