Sabana Central. Domingo, 10 de octubre, 23:00 h.
La pareja y la pequeña habían llegado a Zootopia ya muy adentrada la noche. Estaban rodeando Sabana Central para llegar a los suburbios en donde se encontraba el departamento de Nick. Se observaba un paisaje deprimente. Autos de los que sólo les quedaba la carcasa toda negra y quemada, barriles aun con fuego encendido, tiendas destruidas y uno que otro charco de sangre en el suelo. Lo acontecido fue algo grande, algo sin precedentes.
Agradeció a la poca resistencia de Judy y Meloney, porque bien había empezado a anochecer, cayeron rendidas del cansancio y no pudieron presenciar ese triste ambiente. El taxi los dejó en toda la entrada del complejo de Nick, éste sacó su billetera y le pagó la carrera al chofer, cosa que no salió nada barata. Meció un poco a Judy para despertarla y bajara, a Meloney sólo la cargó en sus brazos nuevamente; le estaba empezando a gustar llevarla así a todas partes.
Se despidieron del taxista, le dieron las gracias y entraron al complejo. Al entrar, saludaron a Larry, una cebra que era el vigilante del lugar. Él movió su gorra en respuesta al saludo y le sonrió a Nick y Judy, sin pasar inadvertida la mirada curiosa que le dio a la cachorra dormida. Subieron cansados los tres pisos para llegar al departamento y abrieron con cuidado de no despertar a Meloney.
Entraron y dejaron sus pertenencias ahí en el suelo, y sin más, se fueron a la cama. Judy preguntó en dónde dormiría la Meloney, pero Nick con un ademan de la pata le dio a entender que mañana resolverían eso. Por hoy, ella dormiría con ellos. Judy se colocó su pijama y se acostó abrazando a la pequeña, en cambio, Nick se quitó su uniforme de policía con todo el placer del mundo y se acostó solo con unos bóxer negros; tenía mucha flojera y cansancio como para estar buscando un pijama para ponerse. Le dio un beso de buenas noches a Judy y le acarició la cabeza a Meloney con cariño antes de caer en los cómodos y reconfortantes brazos de Morfeo.
Sabana Central, departamento de Nick. Lunes 11 de octubre, 6:03 h.
El sol comenzó a salir en el horizonte y sus dorados rayos iluminaban la ciudad, débilmente, como si estuviera pidiendo permiso, atravesó los vidrios de la ventana y se adentró en el cuarto de la pareja. El primero en despertar fue Nick, quien se bajó con suavidad de la cama para no despertar ni a Judy ni a Meloney. Tomó su teléfono para ver la hora: las seis de la mañana. Se preocupó, porque su hora de entrada a la jefatura era a las seis y treinta de la mañana; fue a levantar a Judy, pero vio que tenía un mensaje en su buzón. Al leerlo, se calmó un poco: era Bogo, les escribía que por esa semana, debido a los acontecimientos, la hora de entrada se desplazó de las seis treinta a las siete de la mañana. Aliviado por tener más tiempo, tomó su uniforme y se lo llevó a la cocina para ponerlo en la lavadora, si tenía suerte estaría listo faltando veinte minutos para las siete. Empezó a preparar al desayuno e hizo una nota mental.
«Bloquear a Bogo en mi celular, o en su defecto, cambiar de número.»
Comenzó a sofreír algunos vegetales, cocer unas pocas zanahorias, preparar una ensalada y con varios huevos hizo una omelette; como punto final, unas tostadas y un jugo de naranja recién hecho. Faltando veinte minutos para las siete de la mañana, Nick llamó a Judy.
—Zanahorias, el desayuno está listo. —Sabía que ella lo primero que haría al despertar sería ver el reloj, y al darse cuenta de la hora, saldría disparada de la cama.
Levantando un dedo por cada segundo que pasaba y al tercero, Judy derrapó en los azulejos del suelo del departamento, buscando tracción para frenar de la carrera que de seguro pegó.
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Siempre estaré para ti (SEPT 1)
FanfictionNick y Judy están enamorados el uno de la otra, mas ninguno tiene el valor de confesarse; prefieren negarlo. Sin embargo, debido a un accidente de Nick con un delincuente, Judy es la primera en decirlo. Pero lo que ellos no saben es que ese delincue...