En algún lugar en los límites de Distrito Forestal. Viernes, 8 de octubre, 22: 43 h.
En una lujosa mansión de estilo antiguo, oculta en uno de los múltiples espesos bosques del distrito, se hallaban ocho individuos. Estaban en el despacho y había reunidos animales de distintas especies. La atmosfera en el lugar era pesada y misteriosa, caldeada, como antes de que un rayo cayera en una zona determinada. Los ocho animales se encontraban sentados en una mesa estilo ejecutivo con trece asientos, de los cuales, cinco estaban vacios.
—¿Ya saben por qué los he reunido hoy? —preguntó una pequeña zorra fennec, de pelaje color arena y ojos oscuros; llevaba un vestido gris y una americana negra; y en el cuello tenía un collar con un dije de una corona. Todos la observaron y asintieron—. Exceptuando a los demás, estamos todos. Ahora el punto principal: ¿por qué demonios Dioniso está preso?
La pequeña zorra pasó la vista por todos y cada uno de los miembros presentes y ninguno dio respuesta.
—¡Cuerda de inútiles! —espetó enojada—, es por esto que Dioniso está preso. —Lanzó un periódico sobre la mesa, en ellos aparecían un zorro y una coneja—. «Valerosos oficiales capturan a miembro de una peligrosa organización». —Hizo una pausa y suspiró—. Como si no tuviéramos suficientes problemas con la ZIA, unos polizontes de quinta fastidian nuestros planes.
—¿Unos pacos atraparon a Dioniso? —preguntó una loba ártica de ojos amarillos, arqueando las cejas; llevaba un conjunto y abrigo de camuflaje negro, y un collar con un dije de luna creciente.
—Así es, Artemisa —respondió la fennec—, y lo que más me enfada es que fueron un zorro y un conejo. O sea, si hubieran sido, no sé..., un rinoceronte y un elefante, o el mismísimo Bogo, lo entendería; ¿pero unos animaluchos como esos? —La zorra se frotó el entrecejo en un intento de calmarse—. Si no me creen, lean el artículo.
Una pequeña nutria, con gafas, esmoquin y un collar en forma de lechuza, tomó el periódico y lo leyó en voz alta para que todos escucharan.
—«Bajo un increíble acto de valor y responsabilidad policiaca, los oficiales Nick Wilde y Judy Hopps lograron capturar a Héctor Bearline, alias "Dioniso", de la organización criminal "Los Olímpicos". Tiempo atrás éstos oficiales resolvieron el caso de "Los Aulladores" y son considerados como la mejor pareja del ZPD. En una entrevista realizada a ambos sobre su motivación, éstos respondieron: "Lo único que nos importa es limpiar el crimen de Zootopia, esta ciudad es muy hermosa y da tantas oportunidades, que el crimen no debe de prosperar en ella. Mejor dicho, no prosperará"».
La nutria dobló el periódico y dirigió su vista a la zorra fennec.
—Sinceramente no puedo creer esto —admitió ella, acomodándose las gafas. Todos en la mesa asintieron iracundos—. ¡Nos están retando, Hera! Nos están diciendo que se saldrán con la suya.
Un tigre soltó unas carcajadas.
—Vaya, vaya, ¿quién lo diría? Atenea está nerviosa.
—¡Cállate, Ares! —le reclamó un búfalo que llevaba una camiseta color cobre.
—A mi no me calles, Hefesto, sabes muy bien que no te conviene hacerme enojar —amenazó Ares.
La zorra azotó la mesa iracunda, miró furiosa al tigre y éste se calmo.
—Ares, más te vale que te calles —le advirtió. Dirigió una mirada más calmada a la pequeña nutria—. Si ellos quieren guerra; guerra tendrán. Atenea, quiero que planees algo para hacerles frente tanto a la ZPD como a la Alcaldía.
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Siempre estaré para ti (SEPT 1)
أدب الهواةNick y Judy están enamorados el uno de la otra, mas ninguno tiene el valor de confesarse; prefieren negarlo. Sin embargo, debido a un accidente de Nick con un delincuente, Judy es la primera en decirlo. Pero lo que ellos no saben es que ese delincue...