Richelle se despertó por el sonido de un despertador, no era el suyo.
-¿Quién mierda dejó su celular aquí? *gritó muy enojada*
-¡Lo siento hermana! Es que me estaba viendo en tu espejo. *dijo Melanie*
-¿no tienes habitación?
-Sí pero es que el espejo esta sucio.
-¿Y no tienes manos?
-Sí pero...
-¡Fuera de mi habitación!
-Si si okay *salió*
Con mucha flojera me levanté de la cama, fui al baño y me bañé, un baño de unos 50 minutos.
Salí envuelta en una toalla en mi y en el cabello, comencé a buscar ropa para ponerme, hoy era el concierto de One Direction, como olvidarlo, debería estar afuera para hacer mi plan, para que todo saliera tal y como lo planeo.
Bajé silenciosamente, eran las 11:00 y seguramente mis padres dormían hasta que escucho la femenina voz de mi madre. ¡Diablos!
-¿Se puede saber a donde vas señorita? Tan temprano y tan descubierta *preguntó mi madre*
*Claro... Tu debes saber todo *dije como una hija buena* Pues verás, madre, saldré un rato. Pasearé por toda la ciudad.
-En ese caso, sí *se fue*
Suspiré aliviada y salí de mi casa. Tenía mi celular en mano y dinero en el bolsillo.
Llegué a el famoso y moderno hotel en donde todos los artistas que venían a dar conciertos se hospedaban.
Llegué a la recepción, ahí había un muchacho de unos 23 años de edad, fuerte muy guapo de ojos azules.
- Buenas tardes ¿Qué necesitas linda? *dijo de una manera muy coqueta guiñándome el ojo*
- Hola, necesito ayuda *dije con tono sensual*
-Pues dime y te ayudo en todo lo que necesites. *dijo mirándome de los pies a la cabeza*
-Necesito saber donde... *me acerqué a sus labios provocativa mente* Se hospedarán los muchachos de una banda.
-Yo... Yo te daré el número de la habitación *dijo hipnotizado, sabía como hacer eso, era muy fácil* Están en el piso 9, habitación 13 *finalmente lo besé, me separé de sus labios lentamente, cuando este abrió los ojos ya no estaba ahí, miró a su derecha, la llave de aquella habitación no estaba, creía que se había perdido y por suerte tenían una replica*
Caminé hasta la habitación. piso 9 habitación 13. repetía para que no se me olvidara. Al llegar abrí la puerta con la llave que el chico de la recepción me había dado, o yo cogí sin permiso.
La habitación era lujosa, extremadamente lujosa. Pero no venía a contemplar, yo venía a hacer mi plan.
Me escondí en un lugar remoto de la habitación, seguramente ahí nadie me podría ver, además podría verlos a los cinco haciendo todo lo que hicieran.
Escuché el sonido de la puerta, al parecer ya habían llegado.
-Es muy linda *dijo un chico, la voz la reconocería por todas parte, era Niall*
-Y cómoda *dijo Liam*
-Si es linda es cómoda ¿no? *dijo Zayn sonando obvio*
-¿Huele a...mujer? *dijo Louis*
Oh no... Mi perfume era demasiado fuerte... Ojalá no siguieran el olor como perros, ¿pero qué digo? Eso es imposible.
-Sí...es perfume de mujer, exactamente el que usa Perrie *dijo Zayn*
-Huele delicioso, ¿pero de donde vendrá ese olor? *dijo Harry*
-Tal vez una mucama *dijo Niall*
-Oh no... Harás que Harry la quiera buscar *dijo Louis*
-No la buscaría... *dijo Harry seguro de sí mismo*
-Iré a ver el lugar...¿Me acompañan? *dijo Liam, los demás dijeron 'Sí'*
Escuchaba el sonido de sus zapatos, las cuales se acercaban cada vez más y más en donde yo estaba. Empecé a guardar la respiración.
-El olor esta también por aquí *dijo Louis*
-Olviden el olor... *dijo Zayn*
-¿Cómo olvidar algo que huele delicioso? *dijo Harry*
-Gracias *susurré para mi, pero lo dije en voz alta, cubrí mis labios con mi mano*
-¿Qué fue eso? *dijo Niall asustado*
-Fue un ''Gracias'' Aquí hay fantasmas *dijo Liam asustado*
-Los fantasmas no existen *dijo Harry seguro pero a la vez asustado*
-¡Hey! Miren... Esos zapatos *dijo Louis*
Oh no... habían visto mis pies... traté de esconderlos un poco, pero un timbre me salvó, el timbre de la puerta...