12

254 12 0
                                    

Llegamos a un restaurante, bastante lujoso.

Harry se bajó del auto primero, para después abrirme la puerta.

Tomó mi mano y la entrelazamos, entramos a aquel hermoso restaurante.

-Señor Styles, lo estábamos esperando, conseguimos la mejor mesa para dos *dijo un hombre de unos 45 años* Pasen por favor

-Gracias *dijo Harry*

Nos guiaron a una mesa que se encontraba en medio de el restaurante, había un hermoso adorno arriba de nosotros, era brillante y le daba un toque más de romanticismo.

Llegó el mesero, con los menús.

-¿Qué van a pedir? *dijo el mesero muy educado*

-Queremos langosta por favor *dijo Harry mirándome con una sonrisa*

-¿De tomar? *dijo, yo bajé el rostro*

-Soda por favor *dijo Harry*

-En un momento se lo traigo *dijo el mesero y se fue*

Fue muy lindo por parte de Harry decir que solo tomaríamos soda, sé que no iba con lo que íbamos a comer, pero no me iba a hacer tomar vino sabiendo mi edad.

-Luces muy hermosa esta noche Richelle *dijo Harry, sacándome de mis pensamientos*

-Gracias *mis mejillas ardían, estaba como un tomate*

Minutos después llegó el mesero con la comida, Harry agradeció, pero antes de que el mesero se fuera Harry le susurró algo en el oído, el mesero solo asintió, la intriga me mataba pero solo prefería esperar a ver que pasara.

Harry y yo estábamos muy a gustos, comíamos y nos mirábamos, siempre sonreíamos a cada cosa que el otro decía, todo era perfecto. Este chico si que me entendía, perfecto.

Al terminar de comer, Harry le hizo una seña al mesero, el solo asintió, yo miré extraño a Harry y el solo sonrió.

El mesero llegó con los postres, ahora sí entendía.

Amaba el chocolate, lo único malo es que me causaba muchas espinillas.

-Más espinillas para mi *dije graciosa*

-Con o sin espinillas luces hermosa, no te preocupes. Siempre serás hermosa, para mi *dijo tomando mi mano suavemente, hizo que me estremeciera*

Le di una probada al postre, era delicioso. El le dio también la probada y así seguimos comiendo los dos.

De repente el mesero llega con galletas de la fortuna. El mesero se fue.

-No sabía que también traían galletas de la fortuna, que genios *dije graciosa, agarré una galleta de la fortuna*

-No, no. La tuya es la de la izquierda *dijo Harry*

-¿Ahora escoges galletas de la fortuna? Que bien *sonreí* Esta bien, la mía es la de la izquierda.

Abrí la galleta de la fortuna, y decía '¿Quieres ser mi novia?'

Lo miré por unos minutos para después tapar mi boca.

-¿Que dices? ¿Quieres ser mi novia, por favor? *me pidió Harry sonriente*

-Sí, sí quiero ser tu novia *me lancé encima de el y lo abracé*

-Ahora, esto *sacó algo de su bolsillo, estaba en una cajita* Es para simbolizar nuestro amor, que será por siempre y para siempre *me puso un anillo en el dedo anular de la mano derecha, para que supieran que no nos íbamos a casar y luego me besó*

Nos besamos por uno 5 minutos, nos separamos por la falta de aire.

Adolescentes (Harry Styles)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora