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Mi hermana y yo salimos de nuestra habitación 20 minutos después de que Melanie saliera del baño. Entramos al restaurante de el hotel y nos sentamos en una mesa para dos.

Nos atendieron y pedimos nuestro desayuno.

-¿Qué les parece el hotel? –preguntó un mesero-

-Increíble, acabamos de llegar pero nos han sorprendido. –dijo Melanie-

-Pues esa es nuestra meta, sorprender a toda persona –dijo el mesero muy amable y sonriente- Les traeré sus alimentos en unos minutos –dijo y se fue-

-¡Oye, cuidado y te babeas hermana! –dije riendo, ella bajó su rostro algo avergonzada-

-Es lindo –dijo Melanie jugando con sus dedos-

-¡No puedes tener nada con él! –dije-

-¿Pero por qué? –preguntó-

-Porque apenas lo conoces –dije-

-¿No crees en el amor a primera vista? –preguntó-

-¡Hay, no me vengas con "amor a primera vista"!

-¿Acaso así no fue como te enamoraste de Harry? ¿Con amor a primera vista? –quedé pensando- ¿Ves? –dijo, yo sonreí-

-Bueno, bueno, anda con él si quieres, pero la cosa será si él quiere andar contigo, por que si no, já. –dije burlándome de ella-

Minutos después de conversación entre conversación llegó aquel mesero con nuestros deliciosos alimentos. Colocó cada plato y vaso en la mesa ordenadamente, en frente de la que le pertenecía. Miró a Melanie detenidamente, sonriéndole. Luego Melanie habló:

-¿Me podrías dar tu número telefónico? –preguntó sonriendo-

-Claro que sí hermosa –dijo el mesero sonrojado, sacó un papel y anotó su número- Estoy libre por las noches, trabajo en las mañanas. –le guiñó el ojo y luego se fue-

-Te llamaré –dijo Melanie sonriendo- ¿Qué habías dicho?

-Olvídalo. –dije sonriendo-

-No, recuérdamelo, que lo estoy olvidando. –dijo ella agarrándose la oreja-

-Que tal vez el no quería andar contigo –dije-

-¿Y qué acaba de pasar?

-Te dio su número telefónico. –dije-

-¡Bulla! Yo 2 y tú 1 hermanita –dijo ella burlándose ahora de mí-

-¿Podemos comer? Tu habla sin cesar me da más hambre de la que tengo. –dije-

-A comer entonces.

Empezamos a comer como si fuese una carrera, lo cual no era. Debo admitir que los alimentos parecían haber sido cosechados en el cielo, eran extremadamente deliciosos con un sabor que jamás había probado, hechos a su punto. Cuando terminé de comer mi desayuno, respiré profundamente. Estaba en el país que siempre había soñado. Amaba a Inglaterra desde antes de conocer a 1D, no sé por qué. Inglaterra siempre ha tenido aquel "no se qué" que hace que a cualquier persona le llame mucho más la atención, bueno. Melanie terminó justo después de mí, con una sonrisa de oreja a oreja en su rostro. Las dos nos levantamos de la mesa y salimos de el restaurante del apartamento. Caminamos un rato por las calles hermosas de Londres muy sonrientes y entretenidas.

Las personas eran hermosas, física como emocionalmente. Cada vez que pasábamos alado de cualquier persona, ellas nos saludaban alegremente, como si reconocieran que éramos turistas. Es hermoso estar en este país, las personas son maravillosas, todo es maravilloso. Melanie y yo regresamos a nuestro apartamento. Entramos y nos sentamos en la mesa, a hablar sobre lo que haríamos en un par de semanas, cuando el colegio iniciaba.

-Te juro que ahora las ganas de ir a la universidad se me han ido hermana –dijo ella tratando de ser sincera-

-¿Por qué? Para eso llegaste acá hermana, no fue en vano. Tú quisiste venirte para acá, para estudiar.

-Lo sé Elle, no es necesario reprendérmelo. La cosa es que, creo que soy incapaz. –dijo ella con pena-

-¿Incapaz de qué hermana? –pregunté-

-Incapaz de sobresalir, de ser buena, sabes que estudiar no es lo mío. Me da pena estar un día en una presentación y diga algo mal o algo así. –dijo ella-

-Melanie, eres la mujer más hermosa y fuerte del mundo, por eso a los 8 decía que quería ser como tu cuando fuese grande, y todavía lo pienso, ¿sabes? Sé que puedes hacer eso y mucho más, sé que serás sobresaliente en tu universidad y sé que no te dejarás de ninguna rubia hueca...yo confío en ti hermana, ¿por qué no confías tú en ti misma? –pregunté-

-Se supone que debería ser yo la que te aconseje, pero ahora es todo lo contrario. –dijo ella-

-A veces en la vida hay que cambiar de papeles. –dije levantándome de la silla-

-¿Para dónde crees que vas? Aún no hemos terminado de hablar, ¿estás segura que quieres ir a ese colegio?

-¿Por qué no estarlo? Leí sobre él, es muy bueno.

-Sí, pero sabes que es uno de los más privilegiados de todo Inglaterra, ¿cierto?

-¿Y privilegiado significa?

-Importante, grande, bueno...hay millones de sinónimos hermana. No quiero que te sientas inferior a las demás chicas.

-Hay por favor, si soy la novia de Harry Styles, ellas se sentirán como hormiga alado de un león. En este caso, leona. –dije haciendo un movimiento con la mano y dedos de león-

-¿Ya tienes el uniforme cierto? –preguntó-

-Lo tengo todo no te preocupes. Ahora, si me permites quedé en verme con mi novio nuevamente en el parque, así que hasta luego.

-¿Para dónde vas? La puerta es por allá.

-Me iré a bañar primero –dije-

Entré a el baño y me di un baño breve pero bueno. Salí en vuelta en una toalla y me vestí.

Salí ya lista del baño y salí por la puerta, en dirección al parque.

Al llegar a este vi a Harry sentado en la banca, con los brazos cruzados mientras el fuerte viento movía sus hermosos rulos. Me le acerqué lentamente y lo abracé del cuello, causándole a el un gran susto.

-¡Richelle, has vuelto! –exclamó- ¿Dónde estabas? Estoy aquí desde hace 15 minutos.

-Desayuné con mi hermana, tranquilo. –dije abrazándolo-

-Creo que debemos irnos, se aproxima una lluvia fuerte. –dijo mirando al cielo, era cierto, habían nubes negras- Vamos –agarró mi mano-

Fuimos en busca de algo que desconocía. Lo desconocí hasta verlo con mis propios ojos, el automóvil de Harry. Nos subimos a este y Harry nos llevó hasta su casa. Al llegar nos bajamos del auto rápidamente ya que empezaban a caer pequeñas gotas de agua. Entramos a la casa y cerramos la puerta reídos.

Conversamos sobre cualquier tema, cada tema nos decía que nos extrañábamos mucho y nos decía cuanto nos extrañábamos.

De repente vi como Harry se subía encima mío, para después empezar a besarme. Sabía lo que quería, y no solo quería sino que también necesitaba, y yo también...

Adolescentes (Harry Styles)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora