Híbridos: genesis

capitulo 14

el cielo estaba gris, sin duda iba a llover. estaba caminando a media cuadra de su casa cuando sentí un aroma familiar, no dude en seguirlo. mientras caminaba una gota callo en mi cabeza, seguida de otra, y otra mas, en menos de un parpadeo se largo a llover. bajo la lluvia perdí el rastro de olor que venia siguiendo, pero me alegre al encontrar a la dueña de ese aroma. estaba parada debajo del toldo de una tienda, esperando que dejara de llover para ir a su casa. se me ocurrió hacerle una pequeña broma, rápidamente cruce la calle en medio de la lluvia y me acerque con cautela hacia ella, sin hacer ni el mas mínimo ruido. me detuve a pocos centímetros y...

-ni siquiera lo pienses- me dijo Jess sin voltearse.

esperaba poder decirle "buu" al oído (si, ya se que es lo mas infantil e inmaduro del mundo), pero ella de alguna manera se dio cuenta de lo que iba a hacer.

-¿como pude olvidar mi paraguas?- dijo molesta.

yo odiaba verla molesta o triste, así que se me ocurrió algo, extendí mis alas y las junte sobre ella formando una especie de paraguas.

-¿la acompaño a casa, mi lady?- le dije con un gesto caballeresco.

ella se sonrojo y me tomo de la mano para que la siguiera. llovía cada vez mas fuerte y yo ya estaba empapado, pero no me importaba mientras no le cayera ni una sola gota a Jess. en eso una ráfaga de viento me obliga a levantar las alas, dejando a Jess totalmente mojada. rápidamente volví a ponerlas sobre ella, aunque ya estábamos frente a su casa. la acompañe corriendo a la puerta mientras guardaba mis alas en mi espalda.

-¿quieres pasar y secarte?- dijo ella mientras abría la puerta.

sonreí tímidamente y acepte su invitación. entre y me quite los zapatos y la chaqueta mojada, para no empapar todo el piso. ella corrió hasta la cocina y volvió con un canasto lleno de toallas. luego de secarnos ella me pidió si podía encender la chimenea mientras ella buscaba ropa limpia para cambiarse. cuando la vi desaparecer en las escaleras me voltee hacia la chimenea, tome uno pedazos de leña y los encendí con mi aliento. un par de minutos después Jess bajo las escaleras y me encontró sentado en el suelo frente al fuego.

-hola- le sonreí-ya te habías tardado-

ella se sentó a mi lado y toco mi ropa, se sorprendió al ver que ya casi estaba seca.

-¿como...- dijo señalando mi camiseta.

-ah, ¿esto? puedo usar el calor de mi fuego para subir mi temperatura corporal...-dije sintiéndome un experto- y también para secar la ropa rápidamente- añadí como chiste.

ella sonrió tiernamente mientras recostaba su cabeza en mi hombro. esta acción provoco que mi pulso se acelerara al recordar aquella tarde después del entrenamiento. sentí como mi brazo se movió automáticamente, subiendo por su espalda hasta su hombro. ella respondió enrollando sus brazos en mi cintura mientras se acurrucaba mas contra mi.

levanto su cabeza, me beso en la mejilla y me dijo:-te quiero, Dony-

no podía creer lo que mis propios oídos habían escuchado. abrí y cerré la boca tratando de responder a su declaración pero las palabras se rehusaban a salir. empece a sentirme mareado, sentía un olor en el aire, era un aroma dulce. moví la nariz varias veces, como un sabueso persiguiendo a un zorro, y esta me guió a la fuente, Jess. la lluvia había lavado el olor de su perfume, dejando al descubierto el de sus feromonas. ella realmente me quería, mas que como amigo, estaba realmente enamorada de mi. aunque trate de detenerme mi instinto me arrastro a apoyar mi cabeza en su hombro y olfatear suavemente su cuello. sentí su cuerpo estremecerse, así que me detuve.

-Jess, yo... lo sient...- me interrumpió sellando sus labios con los míos.

trate de alejarme un poco pero puso sus manos en mi cara y me jalo hacia ella. durante un minuto que pareció una hora estuvimos así, hasta que finalmente me soltó para poder respirar, dejando un fino hilo de saliva entre los dos. respiraba agitada, me miro y se tapo la boca con vergüenza. se separo de mi y trato de levantarse y salir corriendo, pero sujete su mano, la jale hacia mi y la abrace.

-lo... siento- dijo ella al borde del llanto-solo quería decírtelo, aunque se que tu no sientes lo mismo...-

la abrace y le dije dulcemente al oído-también te quiero-

ella me abrazo de vuelta con mas fuerza. un largo rato mas tarde estábamos sentados en el sofá mientras le contaba todo acerca de Darcy. ella me miraba fascinada, estaba a punto de decir algo cuando sonó mi teléfono. atendí de mala gana, solo para quedar aturdido por los gritos de Darcy.

-¿donde estas?¿cuando vuelves a casa?¿por que te fuiste?- decía ella casi histérica.

-Darcy tranquila, volveré cuando deje de llover, lo prometo- le dije y pareció relajarse, pero aun se la escuchaba resoplar del otro lado- y voy a presentarte a alguien- agregue mientras tomaba la mano de Jess con cariño.

cuando corto la llamada, mire hacia la ventana y ya era de noche. como llovía a cantaros me quede a dormir en su casa. creo que después de lo que paso, con eso ya era oficial que eramos novios. sus padres llegaron del trabajo y al vernos juntos, tomados de la mano, no pudieron evitar sonreír.

-ya era hora- dijo su papá.

-!papá¡- grito Jess roja de la vergüenza.

la señora Holmes agarro lo del brazo y lo llevo al piso de arriba, para cambiarse de ropa y para regañarlo seguramente. luego cenamos, la especialidad de la señora Holmes, sopa de microondas.

-dime Dony ¿tus padres saben que estas aquí?- me pregunto el señor Holmes.

-si, me llamaron hace rato y les dije que me quedaría hasta que deje de llover-

-no creo que deje de llover hasta mañana- sonrió la señora Holmes

-pero te puedes quedar a dormir- agrego de nuevo su esposo- en el sofá, claro esta- y luego me guiño el ojo

nos reímos un rato y luego de levantar la mesa todos se fueron a dormir, menos yo. me quede recostado en el sillón mirando el techo, pensando en que quizás, solo quizás, haber salido dejando a Darcy sola con los demás no hubiese sido buena idea. ella aun no estaba acostumbrada a vivir con nosotros, y yo era el único que parecía poder calmarla si se salía de control. podría hacerse daño, o a mi familia, o peor... me sentí culpable, egoísta. saque mi teléfono y envié un mensaje.

Dony: hola Lina. ¿como esta Darcy?

unos minutos después me respondió.

Lina: hola, ella esta bien, se quedo dormida después de que mamá le mostrara el álbum familiar.

Dony: lamento haberme ido. le paso algo? se lastimo?.

Lina: tranquilo, esta bien, se altero un poco porque no te encontró cuando despertó, pero Rex jugo un rato con ella y se tranquilizo. ¿donde estas?

Dony: en casa de Jess, vuelvo mañana.

Lina: ah, picarooon, espero que estés "cómodo" XD.

Dony: eres peor que Rex jaja. me voy a dormir. buenas noches.

Lina: buenas noches hermanito.