Una obra en camino #2

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¡La inmortal Yulieth! No, eso es estúpido

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¡La inmortal Yulieth! No, eso es estúpido. Se supone que haremos una obra de teatro sobre Blancanieves, lo cual incluye una historia de amor y romance con cosas tontas como el destino, casarte cuando alguien te da un beso, amor y finales felices. Es difícil entender todo eso de tener pareja cuando jamás he tenido un novio realmente, y mucho menos me han correspondido cuando alguien me ha gustado.

—Entonces, es una historia de amor, sigo sin entender qué es el amor, además soy muy tímida para tener algo así con alguien. Creo que no haré la audición, tal vez sí...

Genial, ahora hablo sola diciendo cosas que ni siquiera tienen sentido, ¿acaso yo tengo sentido? Este mundo está demente y me provoca oír sonidos extraños; no... espera, es mi celular. Al ver que este estaba sonando lo saqué de mi pantalón del uniforme y contesté al ver el nombre.

—¡Hola!, aquí Sabina. Estoy ofreciendo nuevas oportunidades al mundo aburrido de Yuli.

—Oye Sabina, sé que allá es más tarde, pero sigo en la escuela. Puedes esperar, ¿verdad?

—Bueno... —se le oía desanimada, ella era así—, ya qué. Por cierto, tu protector te manda saludos.

Para ser más clara, León, la única persona que a pesar de todo siempre está conmigo, aunque lejos.

—Igual, adiós, te quiero mucho.

—Adiós, ¡yo te quiero más!

Sabina era mi mejor amiga en todo el mundo, más bien era mi única amiga y es muy diferente a mí; adora darse a notar ya sea pintando su cabello de colores llamativos, gritando mucho o hablando hasta por los codos. A veces siento que no es una amistad tan cercana como la que tengo con León, su hermano y mi mejor amigo en todo el mundo; además de un viejo amor. Creo que lo que sentí por él es la definición más cercana que tengo a enamorarse.

Guardé mi celular y me preparé para escoger mi taller obligatorio, aunque juro que sentí a un chico rubio cerca de mí, como si me siguiera, creo que era mi imaginación. No quiero escoger un taller, se supone que son una guía en tu futuro, algo que puedes hacer cuando seas grande; es obligatorio y cada año elegimos un taller diferente si eso queremos o podemos quedarnos en el anterior que estábamos, pero sinceramente después de mi experiencia en industria textil prefiero hacer otra cosa.

Me cansé de caminar por lo que decidí sentarme en mis escaleras favoritas en el patio de la escuela. Solo elegí industria textil porque mi mamá es diseñadora, mas ese no es mi camino. Lo mejor ahora era ver qué dice el guion de la obra. Abrí el folleto que nos dio el profesor y leí hasta ser interrumpida.

—¿Qué? ¿Estudiando la obra?

Que extraño, el chico rubio de la mañana se sentó al lado mío, cuando lo hizo tocó mi hombro y me miró sonriente. Quité enseguida su mano de mi hombro, es incómodo que se la pase acosándome. Ni siquiera sé por qué me habla, debe gustarle mucho mi manga que estoy leyendo, lo admito es genial hablar con alguien de eso, pero su confianza me dio escalofríos.

Efímera ApuestaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora