Una apuesta hará que Yulieth y Jabari se conozcan; un popular de secundaria y la niña otaku de la escuela. Gracias a esto comenzará el inicio de todas las historias. Para que una larva se convierta en Mariposa necesita una metamorfosis que le regala...
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Cuando abandoné a Yulieth y Sabina en el callejón me despedí de ellas para caminar hacia la entrada de la escuela.
Me sentí aliviado de dejar a esa niña con su amiga, sacarla de mi casa sin que nadie la viera fue un caos. Hablé con ella en la mañana, la convencí de ir a ver a Yulieth; quise que saliera por la ventana, pero dijo que no quería volver a hacerlo porque se tardó una hora en subir, también me dijo que debería dejar de tardarme tanto en el baño.
Cuando finalmente salí de casa le dije que se adelantara una calle para que mi mamá no la viera. El dilema fue cuando mi mamá vio el tinte rosa en mi almohada preguntándome qué había hecho en la noche. Mi excusa fue que la almohada se había manchado cuando la ropa se lavó. Me alegra que ya este con Yulieth, además Yuli la llevó a su casa. Lo malo de eso fue que hoy no había asistido a la escuela.
Estuve todo el día con César. Ese era el otro asunto, Andrés había faltado a la escuela, lo cual es raro porque nunca lo hace. De verdad me preocupa ese chico. Ahora, si a mí me preocupaba que era su mejor amigo, imagínense al enamorado que estaba caminando conmigo a la próxima clase.
-Jabari, solo estoy diciendo que no es normal que falte a la escuela, lo mejor es ir a su casa... -detuve a César antes de que siguiera hablando.
-No César, no iremos, ni siquiera sabemos dónde vive -le dije a César para darle a entender que por ahora no podíamos hacer mucho.
-Vive en Ciudad Cristal, ya tenemos algo -dijo haciéndome creer que no todo estaba perdido. Lo miré serio a los ojos, él entendió que por ahora así sería la situación.
Seguimos caminando por los pasillos, empezamos a subir escaleras para llegar al salón de álgebra. Desde que Yulieth logró que bajaran mis calificaciones mis padres me tenían más vigilados que nunca. Si me meto en problemas una vez más me sacarán de la escuela. Ya me han amenazado antes, pero nunca he hecho algo tan exagerado para llegar. Sin embargo, por ahora he tratado de concentrarme en subir mis calificaciones, lo cual he logrado satisfactoriamente.
Nunca he sacado pésimas calificaciones, así que solo intento estar en nivel "A" y "B" para mejorar mi promedio.
Por ejemplo, en esta clase que comparto con César había logrado entrar a clase "B". Ingresamos al salón de matemáticas, al entrar una multitud estaba reunida alrededor de Fernanda, la ex novia de César. Debo admitir que tiene una muy linda voz. Aunque su ex novio la ignoró y provocó que los demás hicieran lo mismo.
-¡Cuidado! Hay viene el profesor -gritó César haciendo que todos fueran a sus lugares.
A pesar de que era cierto que el profesor se estaba acercando, sé que César solo lo hizo por molestarla y que Fer dejara de cantar. Cuando el profesor entró comenzó a dar su clase e introducción al tema. En algún punto la clase se volvió tediosa, así que él como buen profesor nos motivó a interesarnos en la clase. Empezó a escribir en el pizarrón unas ecuaciones complicadas.
