Parte sin título 7

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Ángel se volvió lentamente y lo saludo

_ "Hola"

Todos se volvieron enseguida y gruñeron ferozmente ante aquel ser que los burlo completamente. La puerta se cerró de golpe y esto solo puso más nerviosos a los lobos. Ángel fue hacia él para tratar de  calmar la situación, tenía tanto miedo como ellos, pero no le quedaba de otra que confiar y hacer que ellos también confiaran. Él estaba sentado en un piso que había en el otro extremo de la habitación. Ángel se inclino ante él apoyando ambas rodillas en el suelo y extendiendo sus manos hacia él.   El demonio   tomo sus manos y las llevo a sus labios para besarlas. Al liberarlas Ángel vio sus manos manchadas de sangre e inmediatamente le pregunto que le había pasado. Él se acerco más y puso su ensangrentada mano en la parte de atrás de la cabeza de Ángel y la obligo a acercarse más. Ángel se vio obligada a apoyarse en sus piernas y al hacerlo se dio cuenta que también sangraban.

En una voz gutural y horrible el demonio  le susurro;

_ "Un baño con agua caliente... una cama donde dormir esta noche... sabanas para cubrirme por completo, mientras se seca la ropa que lavaras para mí". Ángel asintió inmediatamente.

Los lobos tras ella gruñían cada cierto rato y estaban en posición listos para abalanzarse sobre el demonio. Ángel lo insto a pararse para seguirla y él lo hizo. Ella se paro detrás de él en caso de que uno de los lobos fuera lo suficientemente estúpido para tratar de atacarlo.

Por suerte nadie lo hizo.

Con horror Ángel comprobó sus temores, las ropas estaban empapadas de sangre, y por si esto no hubiera sido notorio, el rastro que dejo con sus pisadas y en el asiento y el respaldo de la silla fue suficiente.

A Ángel le costó muchísimo convencer a los lobos para que fueran por más leña para secar sus ropas. Les dijo que él no tenía más consigo en ese momento y no usaría otras ropas para andar por ahí resolviendo sus asuntos.

_ "¿Asuntos?" pregunto Hottu

_ "Tú no quieres saber" contesto Ángel

Se miraron entre ellos y negaron con la cabeza. Sentían un miedo que no habían sentido nunca antes en sus vidas, no sabían realmente que hacer.

Finalmente terminaron yendo por la leña y haciendo lo que Ángel les dijo.

Ninguno de ellos debía hacer guardia en la fortaleza por lo que todos decidieron quedarse en la casa de Lucian. Instaron varias veces a Ángel para que se acostara a dormir, pero ella se negó a dormir antes de la media noche.

Una vez que estuvo segura que ya había pasado la media noche,  se acurruco al lado de Lucian que estaba acostado en una frazada en el suelo, cerca del pasillo que daba a las piezas. Él lobo la acerco a él y la abrazo para que no se helara.

_"¿Por qué no querías dormir antes de que pasara la media noche?" le pregunto el jefe de los lobos

Ángel se tensó en ese momento y se preguntó cómo les caería lo que les diría, no era estúpida, ni por un momento se había tragado la farsa de que todos dormían, menos Lucian y Sacha.

_ "Él llegó aquí agonizando..." empezó diciendo Ángel en tono bajo, "murió cerca de las diez de la noche y volvió a la vida poco antes de la media noche"

Lucian se alejó de ella y se paró de un salto al igual que los demás. Todos miraban hacia las habitaciones, temblaban de pies a cabeza y respiraban agitadamente.

VIVIENDO CON LOBOS (  III libro  Serie La Niña Y Los Monstruos )Sin CorregirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora