Fingir en una mentira

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Capítulo 7

Estamos todos sentados en una gran mesa. A mi derecha esta mi madre y a mi izquierda mi adorado, amado, apreciado, comprometido. También se encuentran mis hermanos con sus parejas, mi padre con su intento de muñeca y Theodor junto a Amelie la tía de Ulises.

-¿Gala como esta tu libro?- pregunto mi padre y no pude evitar ahogarme con el vino.

-¿Estás bien?- preguntó preocupado Ulises, rozando mi brazo con su mano.

-Si.- susurro nerviosa- El libro... es algo que lleva su tiempo, un libro no se escribe de un día para el otro.- froto mis manos con una sonrisa inocente- Está en proceso... tengo que hablar con la editorial... necesito mas tiempo, la inspiración no esta en el aire.- dije en un susurro casi inaudible.

-¿De que tratara?- pregunto Mikael.

-Es un secreto, uno no puede ir revelando su mayor proyecto a todo el mundo.- sonreí falsamente.

Ni aun yo se de que se tratara el libro. Tiene que estar listo en unos meses o el contrato con la editorial habrá expirado y mi padre me matara por haber desperdiciado mas de dos  años de mi vida en algo inservible.

-Si me disculpan necesito salir a tomar aire fresco.- dijo Ulises y Theodor asintió.

Se puso de pie, se colocó las gafas de sol negras y se retiró, acaso es tonto o no sabe que es de noche. Termino mi copa de vino y mi miro la mesa, esto es muy aburrido realmente no me interesa saber sobre el balance de la empresa o que la próxima semana habrá un desfile.

-¿Ya sabes cómo será el vestido?- pregunta Amelie y mi falsa sonrisa se esfuma rápidamente.

-Hija.- mi madre toca mi hombro luego de un tiempo giro a verla.

-No.- respondo negando, miro mi copa y esta vacía- Si me disculpan iré al tocador.- sonrió poniéndome de pie.

Me escondo detrás de una gran columna y miro las mesas. Parece un funeral, la gente no habla estan susurrando y como si fuera poco una horrorosa banda esta sonando, realmente dan ganas de suicidarse. Miro a mi familia, y estos hablan tranquilamente sin darse cuenta de que falto en la mesa.

Sin pensarlo dos veces me escabullo en el  jardín. El lugar es hermoso, plantas de rosas, una gran fuente en el centro del lugar, esta todo iluminado. Permitiendo una encantadora vista del cielo y de Ulises.

Algo dudosa me acerco al castaño y me paro a su lado mirando las estrellas.

-¿Linda noche?- asiento con una sonrisa- ¿Fumas?- volteo con una mueca.

-Si no hay nada que hacer.- me encojo de hombros y tomo el cigarrillo- ¿Cuántos años tienes?- pregunto con intriga- No es algo que necesite saber, solo que me da curiosidad pareces algo... bastante mayor- me encogí de hombros y lleve el cigarrillo a mi boca.

-En un tiempo cumpliré veinticinco años.- larga el humo y levantó las cejas sorprendida- Tú pareces muy pequeña... cuando te vi pensé que eras una niña caprichosa de dieciséis años...¿es eso verdad?- pregunto y solte una carcajada ahogándome con el humo.

-Permiso.- me apoye en su hombro y con algo de esfuerzo me saque los zapatos quedando mas pequeña- Tengo veintiún años.- dije con una sonrisa desafiante- ¿Quien te dijo que no soy caprichosa?- pregunte de brazos cruzados.

-Peligrosa.- rió y le pegue en el hombro- Deberías ponerte los zapatos podrían verte.- dijo sorprendiéndome.

-Crees que me interesa lo que me digan, yo soy Gala McAdams nadie me desafía.- dije y me miro sin decir nada-Tu  deberías usar esto todo el día, son insoportables.- enojada levanto los zapatos.

Una gran mentira #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora