Una gran mentira #1

Como una perra

Capítulo 17

En este momento tendría que estar poniéndome un maldito vestido para salir con un idiota, para ir cenar con tal vez otros idiotas. Pero no, prefiero estar en la cómoda cama viendo la maravillosa película, mientras disfruto los chocolates.

Frente a la cama se para Ulises de brazos cruzados. Lo miro y sonrió burlona, si el cree que yo acompañare a esa estúpida cena luego de traerme a este maldito lugar obligada esta muy equivocado.

No, mejor dicho mis hermanos aquellos a los que tanto quiero me entregaron a las manos de mi maldito sexy prometido. Al cual odio con toda mi maldita alma.

-¿No piensas vestirte?- pregunto Ulises de brazos cruzados sin dejar de mirarme

-No pienso ir a ningún lado- dije subiéndole al volumen la película- Después de todo, te debe gustar verme solo con una toalla- dije jugando con un trozo de chocolate

-Solo te pido que me acompañes a una cena- dijo relajado, me puse de pie y acomode mi cabello dejando caer la toalla

-Yo un día te pedí que no discutamos- me puse una camiseta de tirantes y me acerco a él- Pero lo único que consigo es que mis dos hermanos mayores me entreguen a un sexy empresario- sonreí jugando con su corbata, me aleje de él y suspiró relajado

-Solo será una cena luego te dejo en paz hasta la boda- lo mire y sonreí

-No prometas tonterías- dije caminando al baño- Solo déjame en paz esta noche- pedí antes de cerrar la puerta

Rápidamente ató mi cabello en una coleta alta y comienzos vestirme con uno de los vestidos que empaco mi hermana. Mas precisamente con el mas revelador posible, ya que no tengo  la mas mínima intención de hacer quedar bien a Ulises.

Estoy enojada con él quiero venganza. Se arrepentirá de llevarme a esta cena.

***

Camino delante de Ulises por el lindo restaurante. Desde que salimos del hotel ninguno ha dicho una palabra, cosa que me tiene demasiado bien, no tengo ganas de escuchar al idiota.

Paro en seco al sentir la mano de Ulises en mi cintura, giró furiosa para encontrarme con una sonrisa burlona en su rostro. Algún día lo matare, solo pido que no falte mucho.

-Mas te vale soltarme o veras de lo que soy capaz- advierto apretando los dientes y el se acerca

-Deja de actuar como una niña caprichosa y compórtate- susurra en mi odio- Solo serán unas horas-

-No te prometo nada- sonrió divertida y tomo su mano

POV ULISES

Rápidamente miro a Gala y esta me guiña un ojo, acomodo mi corbata nervioso.

Desde que llegamos  Gala ha estado actuando raro, no deja de decir incoherencias de actuar como una niña caprichosa, esta completamente cambiada como si no le importase nada. La Gala seria, responsable y coherente desapareció en menos de una hora, ahora solo queda una chica rebelde y caprichosa que al parecer esta decidida a arruinarme la noche.

-¿Gala es cierto que publicaras un libro?- pregunta con una sonrisa Kay mi socio y amigo, el rostro de Gala cambia rápidamente

-Si es algo que aun esta por verse- toma su copa de vino y me mira- Tengo muchos temas por resolver- sonríe pícaramente a la vez que su mano se desliza por mi pierna

-Gala podrías simplemente dejar quieta tu mano- susurro molesto y asiente con una sonrisa

-¿Cuando será la boda?- pregunto Louise la mujer de Kay

-Pronto, espero- responde Gala y la miró sin entender- Esta algo asustado- ríe al igual que los demás

-Asustado, claro que no- dijo con seriedad

-Por favor Ulises, tu cara de espantado dice todo lo contrario- ríe Kay y Gala toma mi mano

-Amor no te asustes que yo no muerdo- se acerco y beso mi mejilla- Aunque yo que tu empezaría a correr- susurro antes de alejarse con una sonrisa

A que se refiere, acaso que me arrepentiré. Esta muy equivocada yo no le temo al matrimonio, unirme por el resto de la vida a una persona con la cual peleó todos los días no puede ser tan malo, después de todo también tenemos nuestros momentos buenos, con una Gala cuerda y responsable se podría llevar una vida casi normal, pero con esta Gala caprichosa; rebelde; malhumorada; y pervertida, mas de lo normal, no pasaría ni un minuto de mi vida.

POV GALA

En este preciso momento me siento feliz, llena se podría decir. Mientras estábamos en la cena me di cuenta de algo, el lindo; poderoso; valiente Ulises le tiene miedo al matrimonio.

Bueno mas que al matrimonio podría decir que me tiene miedo a mi. Soy una persona muy cambiante en un momento estoy feliz, al otro llena de ira y pocas veces, como ahora, me comporto como una niña caprichosa y malcriada que quiere venganza.

Puede que sea bipolar o que simplemente Ulises afecta mi integridad mental.

Entró a la habitación con una sonrisa en mi rostro, detrás de mi entra el malhumorado de Ulises murmurando algo incompresible para mi.

-¿Por qué te comportaste así?- suelta de la nada, me giro y lo miro desentendida

-¿Así?- pregunto con ironía

-Como una niña caprichosa, maleducada y pervertida- grita furioso y muerdo mi labio para no reir

-Eso dolió- toco mi pecho indignada- Yo no soy ninguna maleducada y menos pervertida- grito enojada

-Demostraste todo lo contrario- grita moviendo las manos mientras camina de un  lado a otro

-Quieres saber porque demonios actué así- grite acercándome- Mis hermanos me mandaron con un maldito gruñón, sin preguntarme, y tú no me contaste nada ya que al parecer lo disfrutas- golpeo su pecho furiosa

-Sinceramente no disfruto ni de tu presencia en este momento- ríe sonoramente, dolida bajó la vista y giro hacia la ventana

-Vaya, no tenias que ser tan hiriente- murmuró apoyándome en el cristal deseando que se rompa y caer a la salvación

-Sinceramente has estado actuando como una...- hace una pausa y me giro

-¿Cómo una?- inquiero con la voz quebrada

-Como una perra- dijo claramente, rápidamente me acerco a el y llena de ira le doy una bofetada

-Hace unos días era tu tierna novia- sonrió conteniendo mis lagrimas- Ahora soy una perra, sabes que Ulises vete al demonio tu y el maldito casamiento, olvídate de mi, has lo que quieras con tu maldita vida- grite girando con algunas lagrimas corriendo por mis mejillas-Me arrepiento de estar con alguien  como tú- suelto invadida por la tristeza y desesperación

-Bien, me iré- dijo sin ánimos antes de girar

-Bien- grité antes de sentarse en la cama

Respiro profundo tratando de calmarme pero de nada sirve, la tristeza se ha apoderado de mí en menos de lo que pensaba. Descubrí mi rostro al sentir la respiración de Ulises cerca de mi rostro, miro sus ojos rojos y las lagrimas corriendo por sus mejillas, verlo así me parte el alma pero él ha roto mi corazón eliminando así las pocas esperanzas de amor y felicidad que quedaban en el.

-Gala por favor...-

-Vete- susurre cerrando los ojos

Segundos después escucho como la puerta de la habitación se cierra y dejo que las lagrimas vuelvan a caer por mis mejillas.

El amor es una mierda.

Ulises un desgraciado sin corazón.

Yo una imbécil por quererlo.

La vida me odia.

La vida es una mierda, yo también lo soy.