28. Primera cita oficial

159 29 4
                                    

Nota rápida: ¡Hola a todos! Yo me inspiré en este capítulo con la canción "almost is never enought", la dejaré en multimedia por si gustan escucharla mientras leen.

Nota rápida: ¡Hola a todos! Yo me inspiré en este capítulo con la canción  "almost is never enought", la dejaré en multimedia por si gustan escucharla mientras leen

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

*GEORGE*

La biblioteca es mi lugar favorito para hacer tareas, usualmente suelo venir los fines de semana y esta vez Arthur vino conmigo para terminar un reporte, desgraciadamente mi cabeza está en todos lados y mi nerviosismo es notorio.

- George ¿Estás bien? -Arthur tronó sus dedos para sacarme de mi ensoñación.

- Estoy nervioso. -dije.

- Sólo es un reporte de los átomos, no es complicado, ésto es lo tuyo. -negué con la cabeza. - ¿Qué sucede?

- No es por el reporte, es por mi cita de esta noche con Madie.

- ¿En serio? - Arthur cerró el libro del cual estábamos haciendo el reporte y me observó. - ¿A donde la llevarás?

- No se me ocurre nada.

- Que tal Dizzy club. -rodé los ojos.

- No la llevaré a un bar. -suspiré. - No iremos a un restaurante lujoso. No quiero parecer pretencioso ¿Y si la llevo al cine? Pero temo que le aburra la película.

- Relájate George. Sólo es Madie.

- ¡Exacto! Para tí "Sólo es Madie", y para mi es el amor de mi vida.

- Está bien, está bien. No te enojes. -dio unas palmadas en mi hombro.

- ¿Qué hago?

- ¿Que tal si la llevas a twilight? Es un nuevo restaurante al aire libre y muy cerca de aquí. A Madie le gustará.

Una sonrisa se expandió en mi rostro, al fin Arthur abre la boca para dar una gran idea.

- Tienes razón, tengo que irme.

Pasado de las ocho de la noche, conduje a casa de Madie, la música en la radio despejó todos los malos pensamientos de mi cabeza

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Pasado de las ocho de la noche, conduje a casa de Madie, la música en la radio despejó todos los malos pensamientos de mi cabeza.

En menos de cinco minutos llegué a casa de mi chica, salí del auto con las rosas y caminé a la puerta principal. Toqué el timbre y escuché como unos pasos se aproximaron.

TERRIBLE ELECCIÓN© ✅ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora