Me quedé sin palabras al escuchar aquello. ¿Después de decirme que quiere ser actor porno me suelta que me necesita?
"Zachary Brown,aparte de ser un romántico en toda regla eres raro. ¡Muy raro!"
Me limité a sonreír y decir.
- Zac, tu sabes lo que pasó la última vez que te dejaste llevar por tus impulsos...
- Pues no. No me acuerdo. Refréscame la memoria a ver. -Dijo con su estúpidamente increíble sonrisa. ¿Cómo no se va a acordar de que casi me besa en una fiesta de universitarios?
- No me tomes el pelo, que lo sabes perfectamente. -No me dejaría vacilar por él. Otra vez no.
- Pues no, no sé. -Dijo desafiante mientras se acercaba más a mí.
"¿Qué pretende?"
- ¡El beso de la fiesta, Zachary! -Grité apartándole para que no me intimidara más.
- Ah, el beso... No te preoucupes, ya está olvidado. -¿Olvidado? ¿No se supone que me necesitaba hace dos minutos? ¿Qué coño pasa con este chico?
- ¿No debería decir eso yo?
- No, dado que no lo vasa olvidar nunca. En cambio yo ya me arrepentí. ¿Cómo pude intentar besarte a ti? Seguro que iba borrachísimo.
- Ya, por eso me acabas de decir hace dos minutos que me necesitabas. Seguramente también ahora estas borracho.
- Vaya, eso ha sido un golpe duro... ¿Seguimos estudiando?
- ¡Estás esquivando el tema! -¿Se estaba comportando así solo conmigo o es que siempre era así de infantil? En cualquier caso, pude distinguir que sus mejillas se tornaban de un color rosado así que me reí por lo bajo para no intimidarle más y seguimos estudiando como si nada hubiera pasado.
Los días pasaron y una sola pregunta rondaba por mi cabeza:
"¿De verdad estaba arrepentido de haberme intentado besar? ¿pero por qué le doy tanta importancia? ¡Sólo es un amigo!"
Llegó el esperado día del examen y alguien tocó en mi puerta nada más y nada menos que a las ocho de la mañana.
"¿Quién narices será a esta hora?"
Antes de bajar las escaleras me percaté de que llevaba puesto mi característico pijama que consistía en una camisa holgada y unas bragas (de Minnie esta vez)
"¡Ah no! ¡Ya aprendí la lección!"
Me puse un pantalón corto y bajé las escaleras a toda velocidad dispuesta a echarle la bronca al estúpido que me molestaba en pleno sueño.
- ¡Ni en verano me dejan descansar! -Dije sin abrir los ojos y sin percatarme de que quien estaba en el umbral de mi puesta era Zachary Brown.
- ¡Vaya! ¡Parece que las marmotas también tienen mal humor! -Dijo riéndose.
- Lo siento Zac, estaba en medio de un sueño genial...
- Estabas soñando conmigo, seguramente.
- No creo que tu seas Peeta y yo sea Katniss, cariño.
- Soy mejor.
- ¡Déjate de tonterías y dime que haces en mi casa a esta hora en pleno verano!
- No sé por qué, pero me parece a mí que esta conversación ya la hemos tenido... Ah, no, me equivoco. En aquella ocasión llevabas braguitas de unicornios. -¡Malditas bragas de unicornios!
- Ja ja, qué gracioso. -Dije con cara de enfado.
- No te enfades pequeña marmota. Encima que te vengo a pedir suerte... -¿Suerte? ¿A las ocho de la mañana? ¿Para qué?
- Creo que estoy perdida... ¿Para qué quieres suerte?
- ¡Pues para el examen! Ya veo lo mucho que estás pendiente de mí... -Dijo con tono exageradamente afligido.
- Ups, lo siento, es por la mañana... Compréndelo. -Intenté excusarme pero lo mío no tenía perdón. ¿Cómo iba a olvidarme del día de su examen siendo su profesora?
- Tranquila. Esto, comparado con olvidarte las llaves en el muro de tu casa no es nada.
"¿Cómo sabe que las llaves estaba ahí? ¡Yo nunca le dije nada para que no se enfadara después de descubrir su fobia a las alturas!"
- Pues nada,concentración ¡y que la suerte siempre esté de tu parte! -Exclamé sonriendo.
- Dos cosas. Primera, así no se le desea suerte a nadie. Segunda, estás demasiado obsesionada con Los Juegos del Hambre, que lo sepas.
- Dos cosas. Primera, ¿cómo quieres que te desee suerte? Segunda, nunca se está demasiado obsesionada con Los Juegos del Hambre. -Mi sonrisa desafiante mostraba lo mucho que me gustaba molestar a "El Inalcanzable"
- Pues la mejor manera de desearme suerte es con un beso, que lo sepas. -¿Un beso? ¡Estará de broma! ¿no?
-Eh, no sé yo si... -Cada vez estaba más cerca de mí.
"¡Dios, dime que esto no va a pasar de verdad!"
- Sí que lo sabes, Amanda, tú sólo déjate llevar por tus impulsos... -Me susurró.
Me comenzó a rodear la cintura con sus brazos y mis pies comenzaron a despegar del suelo. Cuando me dí cuenta mi cara y su cara estaban a centímetros de distancia, y...
***
Buajajajaja, no me matéis por el capítulo intrigante que acabáis de leer. En realidad soy muy buena persona (a veces xD)
Si he dejado el final así de abierto es por una razón:
¡YA HAY CASI 2000 LECTURAS! ¡NO ME LO CREO EN SERIO! ¡GRACIAS!
Les propongo un reto... Dejadme en comentarios lo que os gustaría que pasara, es decir ¿Queréis que se besen? ¿Queréis que no se besen? ¿Queréis que un OVNI secuestre a Zac? (Todo puede pasar, oye JAJAJA)
Si llegamos a las 2000 lecturas antes de que acabe el día haré caso a la decisión que haya tomado la mayoría.
Si no... ¡ME TOCA A MÍ ELEGIR! ¡MUAJAJAJA!
Hasta la noche cosas bonitas y muchas gracias otra vez <3
Zac les quiere mucho.
Y yo también :3
![](https://img.wattpad.com/cover/47067432-288-k304897.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Te amaré cuando deje de odiarte. #Wattys2017
Genç Kurgu"El inalcanzable", así apodaban a Zachary Brown todas las chicas del instituto. Bueno, todas menos Amanda y su mejor amiga Kelsey que le habían cogido muchísima tirria hacía años. Hasta que el verano de 2015 se convirtió en el verano más aburrid...