Psicópata //Terminada//

Capítulo 15

El cielo parecía que nunca mas volvería a aclararse, unas nubes pesadas y negras lo invadían. Varios alumnos del colegio habían asistido al entierro de su difunta compañera. Bruce le había pedido a Marie que lo acompañara, esta no pudo negarse, después de todo, ella le había arrebatado a su amiga. Se sentía raro para ella estar ahí, presenciando como la madre de Winona lloraba a mares, al igual que su padre y varios alumnos que la estimaban, mientras Marie no sentía culpabilidad alguna por haberla asesinado. Después que el entierro diera por terminado, Bruce y Marie caminaron hasta casa. Comenzaba a odiar el ver a Bruce de esa manera, parecía que se había apagado aquel brillo que irradiaba a su alrededor.
-¿Realmente te afecto, verdad? -Cuestionó haciendo que la mirara a los ojos, este asintió ligeramente dejando que sus ojos se humedecieran, pero ninguna lágrima se escapó de estos.- Lo siento mucho. -Lo abrazó fuerte.
-Aun no puedo creerlo. Ese mismo día la acompañe a su casa, y le prometí que iríamos todos juntos al otro pueblo... justo hoy. De no ser por eso, quizá ahora estaríamos en camino, riendo de cualquier cosa, haciendo bromas. -Sonrió levemente.- Sé que no la conociste bien, pero era una gran amiga. Me hizo compañía y me ayudó en los momentos más difíciles... Si tan solo me hubiera dicho por lo que pasaba, yo habría hecho lo mismo, y quizá ella seguiría aquí. Pero ya no esta. Ya no esta, Marie, no esta. -Dijo mientras se aferraba a ella tratando de no romper en llanto.
-Tranquilo, Bruce. Ella ya esta en un lugar mejor, lejos de todo sufrimiento. Y desde donde esta, te puedo asegurar que agradece tu valiosa amistad, que apuesto, para ella, fue de las cosas más importantes en su vida. Todo pasa por una razón, pero hay veces que no logramos verla a simple vista. Ella así lo decidió, y aunque ahora parezca lo mas difícil del mundo, lo debemos aceptar, y con ayuda del tiempo, curar la herida. -Se separó para verlo a los ojos.- Jamas te dejare solo, Bruce. Nunca en la vida. -Besó su frente y lo abrazó de nuevo.

-----

-Digame con toda sinceridad, señorita. ¿Vio a quien le hizo esto? -Cuestionó el oficial.
-No, oficial, ya se lo dije. -Respondió Ruth.
-¿Y ustedes? -Señaló a Tracy y Wendy.- ¿Vieron a alguien?
-No, a nadie. -Respondió Wendy.
-Como todo estaba oscuro no pudimos ver nada, solo escuchamos cuando Ruth se quejo. -Añadió Tracy.
-¿Y tienen alguna idea de quien hizo esto? Por la nota dedujo que es alguien con quien ustedes no se llevan bien, o saben algo que a él o ella no le conviene que sepan.
Wendy y Tracy intercambiaron miradas y voltearon a ver a Ruth. Estaban casi seguras que había sido acto de Marie, y temían que algo les pasara si confesaran la verdad. Por otro lado, si lo hacen, atraparían a Marie, pero había una desventaja, también las arrestarían a ellas por haber cometido secuestro, porque lo que le habían hecho a Marie había sido un secuestro. Y ahora se arrepentían tanto, pues les costo la vida de su amiga.
-No, oficial. Nosotras no tenemos enemigos, nos llevamos bien con todos nuestros compañeros. Inclusive los de otros grados. -Objetó Ruth, dando a entender a Wendy y Tracy que no hablar.
-Es cierto, oficial. -Apoyó Wendy.
-Bien, si están diciendo la verdad, tal vez solo sea un alumno que quiere llamar la atención. -Suspiró.- Me retiro. -Se levantó del sofá del pequeño cuarto y salió.

-----

-¿Puedo pasar? -Cuestionó Marie.
-Adelante. -Respondió Ruth.
-Hola. -Pronunció sonriente.
-¿T-Tu que haces aquí? -Preguntó temerosa.
-Tranquila, solo vine a visitarte. -Se sentó en el sofá.- Quiero que sepas que fue un aviso, sé que sabes que yo lo hice, así como también sabes que te conviene no hablar si sientes dolor, o las cosas podrían terminar realmente mal. -Dijo Marie, había disfrazado su mensaje, sin embargo, Ruth lo había entendido perfectamente.
-No te preocupes, no hablaré si me siento mal, no quiero que me pase nada. -Respondió Ruth.- ¿Por qué vienes a estas horas de la noche?
-Tengo algo, importante que hacer. -Estiró la manga de su blusa, tomó una jeringa de su bolsillo, esta contenía un liquido en su interior. Se acercó a la bolsa de suero mientras Ruth la miraba horrorizada, se estiró para alcanzar dicha bolsa y descargó en ella el liquido mortal que contenía, era veneno.
-¿Por qué haces esto? -Cuestionó alterada.
-Para que veas que soy buena, no dejaré que mueras con la duda. -La miró fijamente a los ojos.- Winona trató de quitarme lo que es mió -comenzó a hablar en susurro-, y ese mismo día en que murió, por la mañana, le advertí que alejaría a todas aquellas putas que se acercaran a Axl a como diera lugar. Y así me deshice de una. Tu, Wendy y Tracy saben la verdad, no me puedo arriesgar a que hablen. -Sonrió levemente.- Fue un gusto, Ruth. Espero te mejores pronto. -Sonrió, guardó la jeringa en su bolsillo y salió de la habitación directo a deshacerse de la evidencia una vez mas.

-----

Caminaba hacia su casa mas tranquila, las cenizas de la evidencia estaban bajo tierra, nada podía conspirar en su contra. Ahora lo que tenia que enfrentar era a su tío, vivía con Bruce ahora, pero no podía seguirse vistiendo con su ropa masculina. Necesitaba sus blusas de manga larga y sus suéteres para hacer mas fácil sus pequeñas tareas. Además de que seguro la abuela había llamado y no había atendido ninguno de estos tres días. Tocó a la puerta, nadie abrió, por lo que decidió entrar por su cuenta, después de todo era su casa. Subió las escaleras hasta su habitación, parecía que su tío no se encontraba en casa, así que se apresuro a tomar una mochila y comenzó a meter varias prendas. Después de eso, bajó a la sala y tomó el teléfono para llamar a su abuela.
-¡Marie! ¡Gracias a Dios estas bien! ¿Por qué no has respondido mis llamadas? -Cuestionó su abuela del otro lado de la linea.
-Lo siento, abuela. He estado muy ocupada con las tareas del colegio, han estado dejando mucho trabajo. -Dije como excusa.
-¡No mientas Marie! -Gritó.- Tu tío respondió anteayer por la tarde.
-¿Que te dijo? -Preguntó sorprendida.
-Mejor dime tu la verdad. ¿Por qué no has respondido mis llamadas? -Volvió a cuestionar.
Suspiró.- Estoy viviendo en otra parte.
-¿En donde y con quien?
-Estoy viviendo con Axl, y tengo una razón muy grande para haberme ido. -Soltó molesta.
-Y según tu, ¿cual es esa razón?
-El hombre que dejaron a cargo de mi. Ese hombre puede abusar de mi en cualquier momento, con Axl estoy a salvo de él. -Protestó, un sonido fuerte se hizo presente, su tío había llegado, y estaba ebrio, desafortunadamente.- Abuela, debo irme. Dale un beso a papá de mi parte. Adiós. -Colgó rápidamente.
-Así que aquí estas, muñequita. -Pronunció mientras le ponía seguro a la puerta.
-Lo siento tío, pera ya me voy. Se me hace tarde para largarme de aquí. -Contestó fría y se acercó a la puerta.
-No, no, no. -La tomó del brazo fuertemente.- Esta vez no te escaparás.