Capítulo 22

297 41 20
                                    

-Genial, la policía esta aquí de nuevo. -Comentó Duff.- Me largo de aquí.
-Yo te acompaño, no quiero tener que lidiar con eso. -Habló Marie.
-Yo también voy con ustedes. -Dijo Izzy.
-¿No van a venir? -Cuestionó Marie.
-Si, por que no. Vamos pelirroja. -Dijo Saul revolviendo el cabello de Axl.- Hay que ir con Steven.
-No esta en su casa, esta en la cárcel de visita. -Informó Duff.
-Por cierto, Marie, ¿podemos hablar? -Preguntó Izzy.
-Claro, Izzy. -Sonrió y ambos fueron a un lugar apartado.
-Quiero que me perdones, te culpe injustamente de algo muy grave.
-No te entiendo, ¿a que te refieres?
-Es mejor hablar en otro lugar. Vamos a mi casa. -Este hizo una seña a los chicos de que siguieran su camino.
-¿Por que aquí no?
-Es algo, un poco complicado de explicar. Además, no sé como lo tomes.
-¿Tan grave es? -El chico solo asintió.

Después de varios minutos llegaron a la casa de Izzy. Este guió a su amiga hasta la cocina y le ofreció algo de desayunar, ya que como no se habían presentado al colegio, no habían comido nada.

-¿Y bien? ¿Que es lo que me tienes que decir? -Cuestionó.
-Marie, cuando comenzó eso de los asesinatos, tu habías recién llegado al pueblo. Y fue por eso que yo... comencé a sospechar de ti. -Confesó.
-¿Que? Pero Izzy... Espera, es por eso que entraste a mi casa, ¿no es cierto?
-Si, fue por eso. Duff y yo tratábamos de conseguir pruebas en tu contra, pero no encontramos nada. Y ahora sé porque. Por eso te pido, por favor, que me perdones. -Tomó sus manos.
-Admito que me dolió saber esto porque, tu y los chicos son mis únicos amigos. Pero con esto sé que tus sospechas quedaron en el pasado, así que no hay nada que perdonar, Izzy. -Lo abrazó.- Solo tengo una pregunta.
-Dime. -Dijo aun agarrado a la chica.
-¿Por que inventaste todo eso de que te gustaba?
-Es que, Marie, eso no lo invente. Estoy enamorado de ti. -Comenzó a acortar la distancia entre ellos.
-Yo... -Se alejó lentamente.- Lo siento, debo irme. -Dijo tomando su mochila rápidamente.
-Espera Marie. -La jaló hacia él y la besó.
-No, Izzy no esta bien. -Protestó alejándose.
-¿Por qué no?
-Yo amo a Bruce, y tu eres su mejor amigo.
-Pero yo te quiero. -Tomó su mano.
-Lo siento. -Se zafo del agarre de su amigo y salió de ahí.

-----

No podía creerlo, estaba llorando por Izzy. ¿Por qué lloraba por él? ¿Acaso se sentía mal por no corresponderle a su amigo? Si, así era. Que irónico. Podía asesinar a una persona sin tener el más mínimo remordimiento, pero no podía rechazar a su amigo sin sentirse mal por él. ¡Maldita sensible! Entró a su casa dando un portazo. Había un par de maletas, ¿su abuela había regresado?

-¿Abuela? -Cuestionó en voz alta.
-Marie, ¿como no me dijiste esto? Me llamaron ayer para avisarme. Si hubiera sido por ti jamas me habría enterado. -Exclamó llorando.
-Abuela, iba a decirte pero...
-Ya basta, Marie. -La interrumpió.- ¿Que te esta ocurriendo? No eres la misma de antes.
-¿Que? No he cambiado, sigo siendo la misma. -Protestó.
-Eso no es cierto, y tu lo sabes muy bien. Explicame, ¿como sucedió?
-¿Quieres la verdad o el cuento que se tragó la policía?
-¿Que? -Cuestionó confundida.
Rodó los ojos.- Tu querido hijo intentó abusar de mi. De no haber sido por Axl quien sabe que hubiera pasado.
-¿Ese chico estuvo aquí?
-Si, él llegó a ayudarme. Y cuando tuve la oportunidad, golpeé a mi tío... y murió al momento de caer por las escaleras. -Mintió. No iba a decirle a su abuela que había sido Bruce quien había golpeado a su tío provocándole la muerte.
-¿Tu lo mataste?
-No, solo me defendí de ese asqueroso tipo.
-¡Callate! -Gritó su abuela dándole una bofetada.- ¿Que le dijiste a la policía?
-Que se cayó por las escaleras de lo ebrio que estaba. -Dijo rápidamente con la mano en su mejilla.
-No puedo creerlo. -Dijo caminando hacia la puerta.
-¿A donde vas?
-A la delegación. ¡Deberías estar en la cárcel! -Dijo saliendo de la casa, pero se encontró con un semblante bastante serio, era el chico pelirrojo que no le agradaba.
-Lamento decirle que usted no va a ninguna parte. -Cerró la puerta.
-Bruce, ¿que haces aquí? -Cuestionó Marie acercándose a él.
-Izzy llegó a la casa de Slash, me dijo que habías huido de su casa, luego hablamos de eso. Supuse que estabas aquí, por eso vine. Y me alegra haberlo hecho, pudiste haber ido a la cárcel. -Habló acariciando su rostro.
-Y es a donde irá, se lo merece. ¡Por su culpa mi hijo esta muerto! -Gritó molesta.
-Abuela, entiendeme, yo solo me defendí.
-¡Callate! Y tu -señaló a Bruce-, no vas a impedir que lleve a esta asesina a la cárcel. -Tomó a Marie por el brazo.
-¿Quiere ver como si se lo impido? -Sacó un arma y apuntó a la mujer.
-¡Bruce! -Exclamó Marie, estaba sorprendida... y asustada por lo que pudiera pasar.

-----

-Oye chico, la visita terminó, andando. -Habló un guardia.
-Steven, no me dejes. -Suplicó Charlotte.
-Lottie, debo irme. Pero no te preocupes, vendré a verte la próxima semana. -Dijo Steven, para luego salir de ahí.

Era duro para él ver a Charlotte tras esas rejas, ¿por que lo hizo? ¿Como sucedió? Eran tantas sus dudas... Caminó hasta su casa rápidamente. Entró y se dejó caer en el sofá. Miraba a su alrededor, desesperado por encontrar una respuesta a las preguntas en su cabeza. De pronto, la voz de su madre se hizo presente.

-Cariño, tienes una llamada de tu amigo Saul. -Informó la mujer.
-Si, gracias mamá. -Le sonrió y atendió el teléfono.- Hola.
-¡Steven! Amigo, ¿listo para lo que se viene esta noche?
-Slash, no creo que vaya a esa fiesta.
-¿Que? ¿Por que? Ya tenemos los disfraces, yo soy batman y tu robin.
-Slash, no lo creo.
-Ya sé, entonces tu eres batman y yo soy robin.
-Escucha, no ha pasado ni una semana desde que Lottie esta en la cárcel. No puedo creer que Izzy vaya a dar la fiesta.
-Amigo, te hará bien divertirte un rato. Por favor.
-Bien. Iré. Pero solo un rato.
-¡Eso, amigo! Te veo en casa del pálido, hasta luego. -Cortó la llamada.

-----

-Bruce, deja esa arma. -Este se negó.- Por favor, Bruce. Ella ya esta arriba, encerrada en el baño de su habitación, no puede hacer nada. -Dijo Marie para calmarlo.
-No puedo... -Dejo caer el arma.- No puedo creer que en verdad haya disparado. -Volteó a ver a Marie.
-Ni yo. Pero mi abuela esta ilesa, no te preocupes. Ahora solo iré por ella para...
-¡No! -La tomó por el brazo bruscamente jalandola hacia él.- No puedes. Te enviará a la cárcel. Y escucha bien, ¡tu no iras a la cárcel!
-Bruce. -Se zafó de su agarre.- Deja de portarte como un loco, ¿si?
-¿Un loco? Trato de salvarte. -Se excusó.
-Pero no era necesario sacar el arma y apuntar a mi abuela. -Protestó.
-Claro que lo era. -Se acercó a ella.- Haré todo por protegerte. -La tomó de los hombros.- Mataré por ti, si es necesario. -Le sonrió, una sonrisa desesperada. Él no era Bruce. Bruce jamas habría dicho eso por mas que la amara. Eso se estaba saliendo de control, e iba a acabar trágicamente...

Psicópata  //Terminada//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora