Capítulo 23

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-¡Que empiece la fiesta! -Exclamó Slash llegando al lugar acompañado de Steven.

La casa de Izzy estaba para reventar, todo el colegio estaba ahí. Duff estaba ligándose a una rubia de senos exageradamente grandes para su edad y Slash estaba en la barra con Steven conversando mientras tomaban unos Tragos. Mientras Izzy estaba sentado en la banqueta afuera de su casa, lejos del bullicio. No era divertido disfrazarse de mosquetero sin los otros dos mosqueteros. ¿Donde demonios estaban Axl y Marie? Después de media hora solo en el silencio de la noche, dos figuras se hicieron presentes en la esquina de la calle. Se levantó y caminó hacia ellos.

-¿Por qué demonios tardaron tanto? ¿Donde estaban? -Se quejó Izzy.
-No encontraba mi disfraz. -Pronunció Axl.- Entremos. -Tomó a Marie de la mano y la arrastró hasta adentro.

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-No tenias porque hacer eso. -Dijo Marie tomando asiento en la barra.
-Sé que sigues molesta, pero te he dicho que lo hice por ti.
-Ibas a matar a mi abuela. -Protestó en un susurro.- Y yo no maté a ningún familiar tuyo. -Afirmó.
-Ni a nadie. -Siguió Axl. Ahí Marie se dio cuenta de que prácticamente le había confesado todo.
-Ahora vuelvo. -Habló rápidamente después de unos segundos.

A paso rápido se dirigió hacia afuera. Un grupo de chicas conversaba alegremente en la terraza con cervezas en las manos.

-"Hay mucho de donde elegir" -Comentó una de ellas.
-"¿Vieron al pelirrojo que entró hace unos momentos?
-"¿Cual?"
-"El que está sentado en la barra."
-"Ah, si. Va en la misma clase que mi hermano."
-"Pues no sé ustedes, pero yo iré con él a ver que pasa." -Guiño un ojo a sus amigas.

Marie entró inmediatamente, esperó a que la chica entrara y se interpuso en su camino tirándole la cerveza encima. La chica volteó a verla furiosa mientras Marie fingía que lo sentía.

-Estúpida, ¿que no miras? -Se quejó.
-Disculpa, dejame limpiarlo.
-¡No! No me toques, idiota.

La chica entró al baño muy molesta, Marie la siguió e igual entró al baño, poniendo seguro a la puerta.

-¿Que demonios quieres? -Cuestionó la chica de mala gana mientras limpiaba su disfraz de enfermera puta.
-Saber tu nombre. -Sonrió.
-No te diré ni mierda.
-Lastima, quería saber tu nombre para saber a quien maté. -Pronunció en voz baja.

En un intento por huir, aquella chica resbaló y calló al piso haciendo las cosas mas sencillas para Marie. Puso una mano sobre su boca y la otra sobre esta ejerciendo más presión. Agradecía que el estúpido traje de mosquetero llevara guantes. Después de un par de minutos, las pataletas y los rasguños de parte de la chica se detuvieron. Quitó sus manos y se levantó del piso. Se miró al espejo, tenia un leve rasguño en su mejilla y otro cerca del ojo. Tomó la bolsa que la difunta chica traía y la abrió. Sacó un maquillaje que encontró y con el cubrió los rasguños como pudo, lo cual no había funcionado muy bien, pero serviría. Al dejar el maquillaje en el bolso, notó una pequeña bolsa de cocaína, de pronto, comenzaron a golpear la puerta, haciendo que derramara aquel polvo blanco en el lavabo y que cayera al piso. "Britney", llamó una chica. Bien, la chica estaba muerta y ya sabia su nombre, lo único que quedaba era salir por la ventana del baño y volver a entrar a la fiesta. No podía huir, sospecharían de su repentina desaparición. Así que entró tranquilamente a la fiesta y volvió con Bruce.

-¿Donde estabas? -Cuestionó.
-Salí a tomar aire. -Dijo mientras regulaba su respiración, el esfuerzo de salir por la ventana le había cansado.
-¿Estas bien? Podemos regresar a casa. -Habló Bruce mostrando preocupación.
-No, estoy bien. -Sonrió. Desvió su mirada al baño, aquellas chicas seguían ahí, hasta que una mas se acercó y se las llevó con un par de chicos con los que empezaron a conversar.
-Oigan, par de amargados. ¡Vengan a bailar! -Exclamó Duff jalandolos al centro de la pista.

     La fiesta era una total locura, un desastre. Steven había regresado a su casa, por su parte Slash no recobraba el conocimiento desde hacía varios minutos, por lo que Izzy lo llevó a su habitación. Duff era el show de la noche mientras bailaba sobre la barra. Mientras Axl y Marie, completamente ebrios y con una peligrosa dosis de cocaína corriendo por sus venas, hacían de la cocina un desastre al estar cogiendo sobre la mesa o en cualquier lugar que se les ocurriera. Después de un rato, al llegar la policía a calmar el lugar, los invitados fueron saliendo uno por uno hasta vaciar la casa, Izzy fue multado, y una vez que habían confiscado todo los policías se marcharon.

-Bien, creo que la fiesta se acabó. -Habló torpemente.
-Si, oye me quedaré aquí, estoy muy ebrio como para volver a casa. -Dijo Duff para luego dejarse caer en el sofá.
-Como sea. ¡Axl! ¡Marie! -Gritó caminando hacia la cocina.- Espero estén vivos, han estado ahí toda la noche.
-¡Privacidad! Maldito pervertido. -Gruño Marie, quien estaba sentada en la mesa mientras Axl hacia lo suyo.
-¡Que puto asco! Ahí es donde como. -Se quejó.- Largo de aquí, la fiesta terminó.
-Si, si, ya nos vamos. -Pronunció Axl subiendo sus pantalones.- Vámonos, nena.
-Deberías ir a ver a Slash, podría estar muerto. -Mencionó Marie para después sufrir un ataque de hipo de unos segundos.
-Si, claro. Pero después, ahora solo quiero dormir que son las 3:00am. -Se acurrucó con Duff en el sofá.

     Caminaron por las oscuras y solitarias calles hasta llegar a duras penas a casa de Marie.

-Nena, hay que terminar lo que empezamos. -Habló Axl mientras subían las escaleras torpemente.
-No, quiero dormir. -Dijo Marie, apenas y podía mantener los ojos abiertos.
-Siempre he pensado que tu me ocultas algo. -Tocó su nariz para luego sonreír.
-No es cierto. -Rió un poco. Definitivamente estaban bajo los efectos de la droga y el alcohol.- Bueno, si. Me atrapaste. -Ambos entraron a la habitación.
-Dime que es. -La puso contra la pared de forma amenazante.
-Maté a tres chicas, por ti. Me vuelves loca. -Acarició su mejilla.

     Los dos se echaron a reír como un par de locos, después de unos segundos, el semblante de Axl pasó a uno serio y miró fijamente a Marie. Este le arrancó la ropa, la tumbo en la cama y se lanzó encima para devorarla.

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     La puerta era golpeada con fuerza, y era un fastidio. Había despertado por ese infernal ruido que se hacía mas molesto por la jodida resaca. Se levantó de la cama, estaba desnuda, y su cuerpo estaba muy adolorido. Bruce tenia la espalda descubierta y podían notarse rasguños muy marcados, eso era suficiente para saber lo que había ocurrido. Los golpes en la puerta aun no cesaban, y terminaron por despertar a Bruce.

-¡Joder! ¿Quien demonios es? -Gruñó molesto.
-Iré a ver. -Dijo Marie mientras se vestía. Bajó las escaleras, abrió la puerta y se encontró con Steven.- Popcorn, buenos días.
-Son las 4:30pm. -Entró a la casa, parecía molesto.
-Maldición, creo que nos pasamos anoche. -Pronunció con una mano en su cabeza.
-¿Quien mierda es? -Cuestionó Axl bajando las escaleras con solo un bóxer.- Oh, Steven.
-¿Que se te ofrece, Popcorn? -Preguntó.
-Marie, estas metida en un gran lío. -Dijo el rubio.
-¿A que te refieres?
-Mira esto. -Le entregó un papel.
-¿De... De donde lo sacaste? -Cuestionó. Era la nota que había dejado a Charlotte. ¡Maldita perra! Ese error podría ser fatal.
-Charlotte dejo su chaqueta en mi casa, y cuando la tomé se cayó este papel. -Explicó.
-Dame eso. -Pronunció Bruce arrebatando el papel de las manos de Marie. Después volteó a verla con un semblante bastante serio.
-Alguien quiere culparte. -Habló Steven aliviando la tensión.- Alguien que te conoce bien como para poder falsificar tu letra. Porque esa es idéntica.
-Pero, ¿quien? -Fingió inocencia. Sentía alivio de que Steven creyera en ella, era un gran amigo. Pero la situación ya se le estaba saliendo de las manos, tenia que acabar con eso de una vez por todas.

Psicópata  //Terminada//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora