Para Siempre®

Capítulo 19

La alarma suena por segunda vez y esta vez, me levanto.
Pero algo o más bien, alguien, me lo impide. La mano y las piernas de Ele se encuentran sobre mí. Su mano aplasta mi mejilla derecha e intento apartarla sin que se despierte.

A la porra.

Sacudo su mano con fuerza haciendo que se despierte y que a su vez, también Vanessa, que se encontraba al lado.

Me incorporo y cuando voy a dar palmadas para que se despierten, Gina entra.

-Vístete y vete abajo a desayunar, ya las despierto yo- sonríe.

Asiento con la cabeza y tras susurrarle un "Gracias", entro.

Lavo mi cara y también cualquier presencia de lagaña que hubiera.

Cojo la ropa que está encima del armario y me la pongo. Consiste en unos pantalones negros y una simple camisa de tirantas, ya que estamos en época de verano.

Recuerdo que hoy tenemos Gimnasia y suspiro frustrada.

Salgo del cuarto de baño y cuando lo hago, una sombra viene corriendo hacia mí y se encierra en el baño, Ele.

-¿Por qué me meto siempre la última en el cuarto de baño de mi propia casa?- dice Vanessa mirando al techo.

La observo un segundo y hablo- Pues yo me voy a comer.

-Gorda.

-Gracias- digo tirándole un beso.

-0-

Tras llegar al centro escolar, noto a Ele demasiado nerviosa a mi lado.

-¿Tienes ganas de ver a tu novio?- le doy un codazo.

-Primero, no es mi novio, y segundo, no...no me gusta-tartamudea.

-Chica, lo tienes en el bote- le guiña un ojo Vanessa.

-Oh mierda, está ahí.

Se da la vuelta disimuladamente y antes de que eche a correr, la agarro del brazo.

-No, señorita. Usted va a hablar con él ahora mismo. ¡Tienen que arreglar esto!- replica Vanessa.

-Oh dios, te está buscando con la mirada- digo tiernamente.

-Que vienen, que vienen- dice Vanessa cantando.

Los tres chicos andan hacia nosotras a cámara lenta. Como la serie de los Vigilantes de la Playa, pues así.

-A ese paso nunca llegaréis- me cruzo de brazos.

Los tres se miran confundidos y ahora se retan el uno a el otro para ver quien llega primero.

-Hmm...Ele, ¿puedo hablar contigo un segundo?- pregunta Nick tras llegar hasta nosotras.

Le pego un pellizco disimuladamente y ella asiente.

-Tienen que estar juntos- reprocha Michael a mi lado.

-¿A qué sí? Son tan tiernos.

-Pero es que Nick está todo el día hablando de ella. Siempre ha querido decirle que la quiere pero nunca se ha atrevido. Lo hemos animado muchas veces pero no ha podido- explica Austin.

-Entonces, es verdad, ¿no? Están enamorados el uno del otro- habla Vanessa juntando las manos y poniendo ojitos.

A lo lejos, Nick le coge la mano a Ele y ésta sonríe.

-Podría decirse que sí- me sonríe Michael.

-0-

-Bueno, chicos, hoy, 1 de junio, quedan exactamente 9 días para el viaje de fin de curso- todos abren la boca sorprendidos- Ya está todo programado. Iremos el día 9 de Junio a Londres y nos quedaremos una semana, hasta el 16 de Junio. Ahora os daremos el horario de actividades, aunque casi todo el día estaremos fuera de las habitaciones visitando Londres. Las habitaciones serán de tres personas, ya organizarlas vosotros como queráis. La cuota del viaje se abonará mañana en conserjería-suena la sirena avisándonos de que la mañana ha acabado- Eso es todo. Ahora, a casa a comer.

Soltamos todos una carcajada y recogemos nuestras mochilas para salir de clase.

-Un día menos-suelto nada más salir de clase.

-¿No irás a empezar a darnos la lata con los días como cuando fuimos a aquel concierto de One Direction?

-Hm, sí, así es- respondo sonriente.

Fuimos todos juntos hasta nuestras casas. Cuando llegamos a la mía, solo quedaban Michael y Vanessa, ya que son los que vivían más lejos.

Entro en casa y tras dejar la mochila y las llaves en el salón, voy a la cocina, donde hay un tupper con macarrones.
"Estará trabajando", supongo, ya que hoy es lunes.

Tras calentármelo, me siento en el sofá y recibo una videollamada de Skype. Vanessa y Ele, veo en la pantalla.

-¿A que no sabéis qué?- tras ver que no respondemos, sigue hablando- ¡Nick me ha invitado a salir!- dice sumamente emocionada.

-¿En serio?

-No jodas.

-Sí- dice alargando la i y dando pequeños saltos de alegría.

-Y después dice que no le gusta- replica Vanessa divertida.

-Dios mío, Ele, me alegro de que por fin estéis juntos. Bueno, ¿y cúando es?

-Pues ahora. Me va a invitar a almorzar. Por eso os he llamado.

De repente, escucho el timbre de la puerta. Me apresuro a abrirla y de fondo, sigo oyendo la conversación y los gritos de euforia de Ele.

Abro la puerta y me encuentro con...nadie. No hay nadie. Miro hacia todas direcciones y no veo a nadie. Pero cuando voy a cerrar la puerta, encuentro una carta bajo mis pies.

La cojo y la abro con cuidado.
Es él.
Otra vez esa caligrafía perfecta.

Siento que me voy acercando más a ti y eso me llena de alegría.
Si quieres saber quien soy, ven hoy a las 17:00 al jardín del instituto.
Te estaré esperando.
Con cariño y deseo,
Tu admirador secreto.