Teenage wildlife

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Diane------
Llevaba dos semanas desde que había salido del hospital y los días no cambiaban. Siempre era la misma rutina: despierta, báñate, desayuna, medicamentos, duerme, suero, medicamentos de nuevo, duerme, más medicamentos y comida, descansa, otra vez medicamentos, temperatura, medicamentos, cena y duerme; estaba harta. A veces regresaban los síntomas, pero después de una pastilla todo se arreglaba. Sabía que había perdido mucho peso  y mis manos eran tan delgadas como las de David, mis ánimos estaban bajos, los brazos me dolían por el suero al igual que mi espalda y cabeza, de tanto estar acostada.
El único aspecto positivo era  la compañía de David y ahora Dorothy, quien se había vuelto como parte de mi familia. Ambos hacían hasta lo imposible para mejorar cada momento, pero necesitaba salir.
Cada vez la herida de la cirugía era menos visible, aunque en realidad nunca se notó gracias a  mi cabello.
Recuerdo que era miércoles y estaba decidida a hablar con David y Dorothy.
Mi enfermera estaba  retirándome las vendas y el suero. David estaba sentado frente a mi.
-qué lindo día- miré hacia la ventana
-así es linda- dijo Dorothy retirando las últimas vendas
-¿saben que sería bueno en un día como este?
-¿que?-preguntaron ambos al unísono
-salir al parque, comer helado, correr, ir a algún parque de diversiones...
-se a que va todo esto y la respuesta es no-Dorothy me interrumpió
-pero... estoy bien, solo necesito salir-miré a David suplicante
-lo siento preciosa pero no- respondió David
-no es justo, llevo dos semanas sin hacer nada y ya ¡¡estoy harta!! ¡¡Necesito salir!! ¡Estas 4 paredes me asfixian!-grité molesta
Ambos me miraron sorprendidos.
-sé lo que sientes linda pero es por tu bien créeme, en este momento quieres hacer de todo y no entiendes porque no simplemente te dejamos en paz para que salgas y sigas con todo normal, al final de cuentas no es para tanto- dijo mi novio acercándose
-tú que sabes- desvié la mirada  hacia otro lado
Rió levemente
-porque yo , linda, ya pasé por esto
-eso no me consuela
-lo sé, pero estás en la gloria a comparación de cómo a mi me tocó
-¿en la gloria? Si... claro- respondí sarcástica
-no es tan malo como parece
-¿sabes que esto no está ayudando?
-¿sabes que eres necia como tú sola?
-dime algo que no sepa
-aghhh... ok, ¿qué quieres que te diga?- dijo harto
-no se
-mmmm.... ¿Alguna vez te has preguntado porqué mis ojos son de diferente color?
-todos los días trato de encontrar una respuesta- respondí tajante
-¿eso que significa?
-que me cuentes la historia
-primero, ¿podrías dejar de ser tan grosera?
-¡¿grosera?!
-ok ok.... omite eso, solo déjame contarte la historia, ¿está bien?
-ok- me crucé de brazos
-bueno, cuando  tenía 15 años había una chica de la que me había enamorado, después de un tiempo descubrí que mi mejor también babeaba por ella y no iba a dejarle el camino libre, no tan fácil al menos
-¿que hiciste? ¿Lo mataste?
-no, solo nos peleamos golpes, fue una buena pelea, pero todo terminó cuando se le pasó la mano y me golpeó en el ojo izquierdo. No supe bien qué pasó, sé que me llevaron al hospital de inmediato para asegurarse de que estuviera bien y todos los médicos híper juraban que perdería la vista en ese ojo. Fue todo un drama, parecía experimento de la laboratorio, se la pasaban haciéndome miles de análisis, tomando demasiados medicamentos y haciendo cada procedimiento que se les ocurriera.
-¿eso significa que fuiste su conejillo de indias?
-Algo así
-¿y cómo le hiciste para que no perdieras la vista? O ¿si estás mal?
-no, nada de eso, después de todo eso determinaron que
mi pupila quedaría dilatada por siempre pero mi vista no se vería afectada
-¿y el color de tus ojos entonces...?
-Ahh si, originalmente mis ojos son azules y como tal el ojo izquierdo sigue siendo azul solo que la pupila dilatada, da la ilusión de que ese ojo es verde. Digamos que le da un efecto que oscurece el color y parece verde
-¿en serio? No había escuchado eso.... y ¿como se supone que relacione eso conmigo?
-que no pude hacer absolutamente nada en 3 meses. Me tuvieron internado todo ese tiempo.
-¡¿3 meses?! ¿Cómo sobreviviste?
-solo lo hice, no sé cómo
-¿todo por un golpe?- dije mirando a David
-asi es
-¿3 meses sin hacer nada...?
-si linda- rió un poco
-¿cuánto tiempo me falta?- le pregunté a Dorothy
-espera un par de días, querida
-mmm... prefiero un par de días y no 3 meses
-¿ya se te pasó tu berrinche entonces?
-a cualquiera se le pasaría el berrinche. O sea solo piénsalo, estoy aburrida pero en mi casa y tú estuviste 3 meses siendo una rata de laboratorio
-¿me dijiste rata?
-perdon, fue sin querer- dije tratando de contener la risa
-es mejor que descanses
-no, no te vayas- lo detuve tomándolo del brazo
Asintió y tomó asiento al lado mío. Recargué mi cabeza en su hombro y él su brazo por mis hombros.
-los dejo, debo ir a preparar la comida- dijo mi enfermera saliendo de la habitación
-¿todo por una chica? Debía ser todo un bombón para que llegaras a tanto
-no me acuerdo muy bien de ella además, era un niño
-jaja no te creo eso
-¿Por qué no?
-pues de seguro te acuerdas de tu amor platónico de la escuela, más si hablamos de la niña que hizo que casi perdieras el ojo
-en realidad no fue su culpa y no, no me acuerdo de ella, estaba más preocupado por mi ojo que por ella
-creo que eso tiene sentido para mi, pero no sé....
-¿no me crees?
-pues no... 3 meses en el hospital por una niña y dices que no te acuerdas
-no, no me acuerdo, ademas, ¿que querías? No pensaba muy bien
-¿pensabas?- alcé una ceja
-bueno, no pienso muy bien, gracias por recordármelo-indignó
-no... David, era broma- decía mientras besaba inútilmente su mejilla para que volteara.
Tomé asiento frente a él, pasé mis manos por su cuello y comencé a jugar con su cabello mientras depositaba breves besos en sus labios y solo así sonrió
-no hagas eso linda, sabes que no puedo resistirme a tus besos
-entonces no te resistas
Rió levemente de nuevo, me  tomó de la cintura y me besó. Fue un largo y profundo beso. Pasé mis manos por su cuello mientras él bajaba  poco a poco sus manos hasta llegar a mis piernas. Comencé a recorrer su abdomen cuando sentí sus manos en mi cadera, me apegó más a él mientras el beso se volvía cada vez más intenso. Después de unos minutos los dos parecimos reaccionar y nos separamos solo un poco.
-creo que... Debes descansar linda, aún estás muy débil
-si, tienes razón, pero no te vayas- agaché la mirada
-te prometí que me quedaría todo el tiempo que quisieras- tomó mi barbilla para quedar frente a frente.
-te amo Starman
-te amo Lady Stardust
David besó de nuevo mis labios y me abrazó por un tiempo.
El día transcurrió de la misma manera que los anteriores, y ya habían pasado dos semanas desde que había hablado con Dorothy y David.
Los síntomas eran cada vez menores, había acabado dos tratamientos y ya no eran necesarias las vendas ni el suero.
Ese viernes por la mañana Dorothy llegó cuando yo estaba tomando un baño. Salí de la ducha con una bata y me disponía a ponerme algo cómodo para reposar como siempre, pero Dorothy me lo impidió. Abrió mi closet y sacó el mismo vestido rojo que llevaba el día en que conocí a David, tomó unos zapatos bajos del mismo color con un toque de negro.
-¿necesitas ayuda con eso?- preguntó mi enfermera
-no... Gracias- dije confundida
Me coloqué el ahora gigante vestido, me puse los zapatos y comencé a cepillar mi cabello. Me maquillé un poco y me puse un poco de perfume.
Bajé las escaleras y encontré a David sentado en el sofá, me miró con la boca entreabierta.
-te ves... Wow- dijo distraído- vamos linda
-¿ves que rápido pasa el tiempo? ya puedes salir querida, pero cuídate mucho, sé que David se encargará de eso. Si necesitas algo, lo que sea saben en dónde estoy- dijo Dorothy en la puerta de la casa
Asentí y la abracé fuertemente
-gracias por todo-dije aún abrazándola
-no me agradezcas, sigue siendo así de linda
Se despidió de nosotros y se fue rumbo al hospital.
-vamos preciosa
-¿a donde vamos?- pregunté curiosa
-no te voy a decir
-¿planeas secuestrarme?
-claro.... ha sido mi plan de vida
-estoy segura de eso-reí
-solo confía en mí. Cierra los ojos y dame tus manos
-¿si es un secuestro?
-no, es una sorpresa- contestó divertido
-si intentas algo empiezo a gritar
-lo sé, todo está calculado
-David...
-solo confía en mi, de verdad
Hice lo que David me había indicado, caminamos un poco, mi novio se colocó detrás de mí mientras me tapaba los ojos.
-llegamos- susurró en mi oído
Se trataba de un hermoso parque, solo que a excepción de otros, ese era  mucho más tranquilo y solitario
-es lo que dije que quería al salir-sonreí
-disfrútalo linda- me abrazó por la espalda
Lo tomé de la mano y comencé a correr lo más rápido posible hacia un columpio vacío.
Le indiqué a David que subiera a uno de  los dos columpios y así lo hizo.
-a puesto a que no puedes ir más alto que yo- reté
-no me retes preciosa
-te reto- sonreí maliciosamente
El tiempo pasaba rápido entre risas y competencias entre David y yo.
Comenzamos a caminar hacia una heladería y seguimos caminando. Esa era la clásica escena de amor de los años 50's y me encantaba, había cierta inocencia y ternura en eso. Incluso todo era muy cursi: David estaba demasiado distraído así que ensucie su mejilla y nariz con un poco de helado, y comencé a correr mientras reía. Él corría detrás de mí y justo cuando creí que ganaría, me alcanzó y me tomó de la cintura.
-debo vengarme linda- dijo agitado
-no- dije tierna
-lo siento- mencionó mientras hacía exactamente lo mismo que yo minutos antes.
Me crucé de brazos mirando hacia otro lado.
-no te enojes linda, ¿que puedo hacer para que sonrías ?-me tomó de la cintura. No respondí a su pregunta y seguí con mi "indignación".
-no dejas otra opción- dijo antes de cargarme y depositar un largo beso en mis labios.
-es imposible enojarse contigo- acomodé su cabello
David me bajó, y tomó de nuevo mi mano.
-quiero mostrarte algo más.
Estaba oscureciendo, caminamos algunas cuadras hasta que llegamos a la entrada de lo que parecía ser un club.
Entramos tomados de la mano, un chico alto y delgado saludó a David.
-tú debes de ser Diane- dijo el chico- un placer- extendió su mano hacia mi
-un placer, pero ¿Como sabes mi nombre?- dije devolviéndole el saludo un tanto dudosa
-créeme que no tienes porqué desconfiar, por cierto. ¿te importaría si me llevo unos segundos a David?
-solo si me lo regresas-  reí
-claro- me guiñó el ojo
-ahora vuelvo preciosa- dijo David
Tomé asiento en una mesa al lado de lo que parecía ser un escenario. En realidad no sabía que estaba pasando ni porqué estaba ahí o porqué ese tipo de había llevado a David, pero mis pensamientos se vieron interrumpidos cuando una agrupación entró en escena. No les tomé mucha hasta que analicé a cada uno de  los integrantes y me di cuenta  de que David estaba con ellos. Tenía un saxofón en su mano y me miraba sonrientemente.
Le envié un beso y pareció sonrojarse un poco.
Después de algunos segundos la música comenzó a sonar

In love with ziggy stardust...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora