Un desconocido en casa (EN EDICIÓN)

Capítulo 2

A la mañana siguiente Gabriela esta en el desayunador disfrutando de su par de tostadas con jugo de naranja.

─ ¿Cuántas veces debo pedirte disculpas?─ Preguntó Rosa.

─ Muchas más de la que has hecho. Le respondió Gabriela.

─ Simplemente se me olvido decirte que Harry llegaba hoy, le dije que podía quedarse en tu habitación en lo que iba a comprar las cosas faltantes para que su habitación estuviera lista, además ya te había dicho que era una sopresa, pense que esto te emocionaria.

─ ¡No simplemente no se te olvido decirme que venía, se te olvido decirme que un extraño estaría en la casa, en mi cuarto, en mi cama, y más importante aun que se quedaría aquí, oh si vaya sorpresa que si fue!

─ Está bien, fue mi error, ahora a ver si te apresuras a terminar tu desayuno antes de que llegues tarde, me iré a terminar de arreglarme para el trabajo, por favor asegúrate de limpiar los platos antes de irte. Le dice Rosa mientras sube las escaleras, Gaby solo asiente mientras rueda los ojos.

Pasado unos minutos entra Harry a la cocina luciendo solo unos ajustados calzones Tommy Hilfiger y su cabello húmedo, se acerca a la nevera y saque el jugo de naranja, Gabriela inmediatamente lo ve se queda en boquiabierta y se colora. Harry se da la vuelta y la mira, nota sus flameante cachetes y solo sonríe, ella lentamente gira la cara al lado opuesto y posa su mano en sus ojos, oye sus pasos alejarse y se quita la mano de los ojos, mira alrededor y ya no ve a Harry, unos segundos más tarde siente una cálida respiración en su nuca, su piel se eriza y Harry se acerca a su oído.

─ ¿Acaso nunca has visto a un hombre en ropa interior recién salido de la ducha?

Gabriela se queda petrificada y se enrojece aun más, el extiende su mano y toma la media tostada restante de el plato de Gaby, le da un mordisco y vuelve a subir los escalones.

─ ¡Eres un pervertido ¿te lo habían dicho?!─ Le grita Gabriela con una reacción tardía.

─ ¡Me lo dicen todo el tiempo!─ Grita Harry desde lo que parecía ser la habitación.

Ya listos Gabriela sale por la puerta y se encuentra con Louis en su Ferrari rojo F40, este sonríe al verla y cuando ve a Harry salir de la casa enarca una ceja y la mira confundido.

─ ¿Siempre has sido tan pervertido?─ Le pregunta Gabriela a Harry aun mirando a Louis.

─ Si, y te sorprenderías de las cosas que pueden salir de esta sucia boca.

─ No quiero escucharlas, gracias. Ella sube al auto y Harry sonríe antes de disponerse a seguirla subiéndose en el asiento trasero.

─ ¿Gaby quien es…?

─ Que ni se te ocurra preguntar. Dice furiosa.

─ Está bien…

El camino transcurre aburrido y silencioso pero como se empieza a hacer habitual Harry rompe el silencio.

─ Lindo auto hermano.

─ Gracias, es un Ferrari F40, amo a este bebe más que a mi vida, alcanza una velocidad de 324 km/h. Dice Louis sonriendo orgulloso sin dejar de ver el camino.

─ No lo sé, pienso que es mejor el Jaguar XJ220, llega hasta 343 km/h.

─ ¡Estás loco, tiene un manejo demasiado delicado, el Ferrari es mejor!

─ Bueno si el manejo es más difícil pero es el dios de los autos veloces además su motor es…

─ ¡¿Pueden cerrar la boca?!─ Grita Gabriela enojada, ambos chicos dan un pequeño brinco de sorpresa ante su repentina reacción y guardan silencio.