EN EDICIÓN: Dear Music Teacher (Andy Biersack y Tú)

XLIII. Should Have Seen in my Eyes What was Going Around my Head

Dejen mi título en paz, zy? >:v Déjenme ser Bon Jovi Lover ;-; ❤
Soundtrack de hoy: Runaway, Bon Jovi >///<

Sólo pude escuchar el grito de mi mamá y como si todo mi cuerpo se rompiera.

A como pude, me enderecé y vi a Ian tirado al final de las escaleras, yo había quedado a la mitad de ellas.

No podía pararme, si el gotcha me había dejado moretones, la estupidez de Ian terminó con mis fuerzas. Me senté y abracé mis piernas, escondiendo mi rostro entre éstas, llorando de dolor.

Mi mamá corrió primero hacia Ian, pero él sólo se quejaba por el dolor. Quizá no vio tan mal tan Ian, quizá se preocupó más por mí. Subió hasta quedar a mi lado y, suavemente, me acarició la cabeza y me abrazó.

TM: ¿Qué pasó, hija? -me susurró dulcemente.

____: Me golpeó... Él me golpeó, mamá... -le dije entrecortada-. Está ebrio...

Escuché los apresurados pasos de mi papá, levantó a Ian y lo estampó contra la pared.

TP: ¡¿Qué le hiciste a mi hija?! -reclamó muy enojado. Ian sólo emitía sonidos que expresaban dolor-. ¿A qué demonios hueles, Ian? ¡¿Estuviste tomando?!

TM: Dice que está ebrio.

Después sólo escuché a mi padre alejarse con Ian quejándose junto a él. Imaginé que lo tomaba del cuello, encorvándolo como lo he visto hacerlo con mis hermanos cuando lo sacan de quicio. Nunca he sabido lo que pasa después.

A como pudo, mi madre me levantó y me llevó a mi cuarto, deteniéndose a mirar cada detalle... Los pedazos de vidrio regados y la cerveza derramada alrededor de ellos, la cama ligeramente destendida, otras botellas y latas tiradas al pie de la ventana... Así pudo hacerse una idea de lo que ocurrió.

Me recostó sobre la cama para luego empezar a limpiar. Tiró los vidrios rotos y demás botellas y secó el piso en silencio. Yo no esperaba que dijera nada, a menos que fuera un "Ian no va a regresar, no volverás a verlo". Nada que no fuera eso no sería de mucha ayuda.

Eso era lo que quería, que se alejara de mí. No quería que volviera a tocarme, ni siquiera a verme. No quería volver a escuchar su nombre jamás ni saber otra cosa de él. Había dicho que a pesar de todo, me amaba, pero yo no, a él no, nunca más.

TM: ¿Ves lo que provocas, ____?

____: Eh?

TM: ¿Ya ves lo que provocas? -Oye, ¡¿Qué?! Eso no era lo último que pensé que diría-. Si no lo hubieras rechazado, ésto no habría sucedido.

____: ¿Ahora vas a defenderlo? -protesté no muy altiva, mis costillas dolían mucho.

TM: Es muy injusto que te quiera tanto y a ti no te importe. Tú lo orillaste a esto.

____: ¡Mamá, ¿acaso tiene 13 años?! ¡Él ya debió haber madurado! ¡Ésto que hizo fue una estupidez!

TM: Siempre culpando a los demás, ____. No entiendo porqué no quieres intentarlo. No tienes novio ni otros pretendientes. Entiendo que sientas miedo, pero no pierdes nada con darle una oportunidad.

____: ¡¿Cómo dices eso después de lo que hizo?! ¡Le di una oportunidad! Él me rechazó. ¿Y me afectó? ¡Claro que no! La vida sigue y no sirve perder el tiempo así -mi madre soltó un pesado suspiro y, sin poder contenerlo, continué-. ¡Estoy harta de que me vean como la única culpable de todo! ¡Estoy harta de que me obliguen a ser alguien que no me gusta ser y que me manipulen! ¡Odio que sigan cuestionándome y poniéndose en mi contra por todo! ¡Odio que confundan la protección con la comodidad de no tener que vigilarme! ¡Estoy creciendo, mamá! ¿No pueden dejarme descubrir la vida por mí misma y no como ustedes quieren?