Capitulo 24

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Ni bien Flor se fue mi madre me mandó a comprar al supermercado.

-Necesitas que te dé una lista?- Me preguntó.
-No, no. Me acuerdo.

Salí de casa, guarde mis llaves en mi bolsillo y me dirigí al supermercado buscando:

🔘Harina
🔘Huevos
🔘Azúcar
🔘Leche
🔘Queso

Los encontré a todos. Aun así, la sensación de que me faltaba algo se hacía presente. Pagué por todo y volví a casa.

Saqué las llaves de casa y abrí la puerta. Alguien tira de mi brazo para que me de vuelta. Qué manía que tiene la gente de tomarte del brazo. Unos conocidos labios tocaron los míos en un dulce beso. Sabía perfectamente quién era.

Nicolás se había pasado a saludarme y a saber si me habían regañado, lo cual respondí que no al igual que él cuando yo le pregunté.

-Tengo que ir de mis primos pero te veo después, si?- Asentí y le di un beso de despedida. Cuando se fue, pude notar que sus padres y el auto estaban estacionados por allí. Entré y dejé las cosas en la cocina.

-No había jamón crudo?- me preguntó mi mamá. Eso era lo que me había olvidado. Me di vuelta.
-No, no vi.
-No había o no te acordaste?
-Las listas no sirven. No había.- Ella se rió y yo subí a mi cuarto.

Qué raro, todo el día en mi habitación. Pero que puedo decir? No se me ocurría nada más que hacer.

Mi teléfono suena. Miro el mensaje.

Lu: Deberíamos salir, no?
Pau: Si, cuando?
Sofi: Nada mejor que despejarse cuando tenes que estudiar para matemática!

No tenía ganas de nada, así que me limité a dejar el visto. Y aunque hiciera eso, no tardaron en llegar más mensajes.

Pau: Ori clava visto -_-
Sofi: Contesta!!

Fue la última vez que revise los mensajes.

No tenía nada para estudiar y como suelo dejar algunos libros por la mitad, me decidí por leer uno.

Mi teléfono sonaba y sonaba con aquel sonido que me indicaba que era de un grupo. Luego sueña con otro, el de un privado.

Cansada, desbloquee el teléfono y vi en las notificaciones que era de un número desconocido.

Abrí el whatsapp y la conversación de aquel desconocido. Leí el numero y aún así no logre saber de quién era.

"Hola" empezaba el primer mensaje.
"Ori, no te vi en la fiesta"

Era alguien que me conocía. Miré su foto de perfil en donde habían 4 chicos. Los cuales pude reconocer a los cuatro, pero no sabía quién de esos cuatro era.

"¿Quién sos?" Pregunté.
"Lau" Allí me di cuenta que era el chico de mí mismo año que había interrumpido mi almuerzo y el sándwich.
"Ah, Hola!"
"No te vi en la fiesta"
"Me fui antes. Olvidé buscarte."
"No pasa nada. Te gustaría salir?" Ese momento en que queres salir pero no tenes ganas. Además, me di cuenta de que se estaba fijando más en mi. No sé por qué en este momento.
"¿Salir a dónde?"
"Podríamos ir al Starbucks."
"Si tuviera las suficientes ganas, iría."
"Vamos! Arriba el animo! Ayuda?"
"Poco, pero algo."

Terminé por decirle que sí. Sabía que se pondría pesado por salir y que insistiría hasta que dijera que sí. Siempre me hubiera gustado poder ser su amiga. Sé que Nicolás se lleva bien con el. Son conocidos, pero no más que eso.

Avisé en casa de que me iría por un rato al Starbucks.

Cuando entré, lo encontré esperando en una de las mesas que estaba al lado de la ventana que daba a la calle.

-Hola- Dije saludándolo con un beso en la mejilla.
-Hola- La mesera vino a tomar la orden y le dije lo que quería.- Yo ya pedí algo, así que en un rato llega.- Me sonrió.

Hubo un breve silencio que terminó por romper el.

-Y... Por qué te fuiste antes?
-Mi novio- Directo a la friendzone.- quería darme una sorpresa.
-Aahh. Y se puede saber cuál era?
-Una cena.- No tenía ganas de dar detalles, era algo que quería guardar para mí.
-Y es buen novio?- Dijo sonriendo.
-Por qué las preguntas?
-Si hay otro tema que podamos hablar...
-Si, es buen novio.- Sonreí. Otra pausa.

-Se que nunca nos hablamos pero... Me gustaría empezar una...
-Amistad?
-Si, si, eso.- Se le escuchó frustrado. La mesera trajo nuestro pedido y se fue. Tomé un sorbo y le dije.
-Que fue lo que viste en mi?
-Que?
-Si, no soy muy tonta. Me preguntaste por ir a la fiesta, te interesaste en mi novio y ahora, justo ahora queres una amistad.
-No sé que vi. O por qué ahora pero... Me gustas y no es fácil decirlo para mí.
-Desde cuándo?
-Unos cuantos meses.
-Cuantos?
-A mí también me gustaste. Pero fue pasado. Nunca pensé que podría pasar.
-Se que estás con alguien y no quiero interferir en el medio, pero me gustaría pasar tiempo con la chica que me gusta.- Le sonrio.
-No me molestaría.

Siempre y cuando solo sea como amigos. No lo considero más que eso.

Y la verdad era esa. No me molestaba, pero ya estaba con alguien y era demasiado tarde.

Charlamos un rato más hasta que se hicieron las 5:30 p.m.

Es un chico agradable, pero quería volver a casa y volver a la rutina de no hacer nada.

Diario de una adolescenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora