Alice
¿Una cita?
Mis manos están sudando, estoy nerviosa, bastante nerviosa. Limpio un poco el sudor sobre mi falda, estoy esperando a que Derek se aparezca, ya tengo rato de estar esperándolo pero no hay rastro de su existencia.
Eli estaba casi incrédula, de lo que Derek me había pedido. Según ella "los chicos como él, nunca quieren demostrar ningún tipo de atadura hacia una chica." Yo no sé decir a ciencia cierta si eso es o no verdad, porque al único chico que he conocido con su personalidad, es a él. Nunca, nadie me había hablado ni tratado de esa manera y mucho menos chicos populares se fijaran en mí.
Teníamos todo planeado, luego de ello, pediríamos ayuda a Damián, sería nuestro maestro guía y su proyecto del año especial. Eli está segura que es la mejor forma de que Jake no sospeche ni un poco de que estoy en algún tipo de embrollo con ese tipo. Al cual por azares del destino tendré que frecuentar el resto del año.
Suspiro, menos mal es talentoso, de lo contrario tendría muchos más problemas de los que ya tengo, aún no hay nada notificado hacia nuestros padres o tutores y eso se quedará así. Por eso estoy aquí. Me encuentro sentada en el pórtico de entrada y viendo hacia el edificio de hombres, ya perdí en definitiva mi primera clase por este problema. Espero que el director pueda levantar un permiso especial.
Todo esto está pasando por mi cabeza cuando lo veo venir. Viene como siempre con el uniforme del colegio, y lo maldigo porque pareciera que estuviera modelando a una pasarela en lugar de a encontarse con el director de la escuela y menos conciente aún de que se ha convertido en mi sufrimiento eterno. Los pantalones del colegio le quedan a la perfección, de una forma muy elegante y cómo es de último año, lleva puesto un traje completo de saco y camisa formal, debería llevar una corbata pero en lugar de ello, tiene el último botón de la camisa suelto. Su cabello castaño hermoso y sus grisáceos ojos son el complemento perfecto. Y al verme suelta una sonrisa burlona "Idiota"
― Oh ya estás aquí...― afirma y me mueve la cabeza hacia la derecha y adelante para que lo siga. ― Vas a dejar que yo hable, ¿Entendido?― me ordena deteniéndose en la puerta. Me detengo con una distancia prudente de él.
Odio la forma en la que me habla, es como si fuera su sirvienta. ―Si.― digo secamente, para no comenzar a maltratarlo, debo de acordarme las razones por las que hago esto.
―Bueno, yo concerté la cita con Weigel desde ayer. Nos verá en cinco minutos. Mientras tanto tenemos que ensayar.
―¿Ensayar? ¿El qué?― ¡Dios! me odio en estos momentos... "¡Fue una mala idea, una mala idea!"
―¡Ohh ya sabes! primero tienes que endulzar tu mirada y verme como si fuera lo mejor que te ha pasado...― dice como que si fuera una nada. ¿Está de broma no?
―Derek, escucha...― digo mientras siento mi corazón latir fuertemente por el enojo. Señalo a la dirección. ― Voy a entrar ahi, voy a sostener tu mano, y se acabó. Jamás tendrás miradas estúpidas de mi parte y mucho menos vas a ganarte mi lealtad ni nada parecido de la noche a la mañana.― Él alza una ceja divertido por mis palabras y se cruza de brazos frente a mi.
―Lo siento, pero no voy a fingir ser alguien quien no soy. Y menos voy a fingir como las mejores actrices que siento algo por ti...― Veo como sus ojos se endurecen y camina en dirección a mi.
Retrocedo unos pasos hasta que topo con la maldita pared. No tengo hacia dónde escapar. Trago saliva, creo que lo he enojado. Está tan cerca de mí que creo que nuestros cuerpos están a tan solo unos centímetros de distancia. Mi pecho sube y baja, junto con mi respiración que se acelera más y más. Posa sus manos a cada lado de mi cuerpo en la pared, aún sin tocarme y baja su mirada hacia la mía. Sus ojos tienen una mirada intensa, y noto que en realidad su iris tienen una pizca de café claro, son casi como miel.
Su rostro se acerca al mío lentamente, y no sé por qué no puedo luchar por apartarme. Es casi como si estuviera hechizada, o quizá solo estoy en shock. "¿Qué es lo que está haciendo?" Alarmas suenan en mi cabeza, no sé si está acercando su rostro porque me va a besar, o porque solo quiere intimidarme al hacerme esto. Cuando veo que sus labios están casi rozando los míos, y puedo sentir su ardiente aliento en mis labios. Mis músculos responden, por fin y giro la cabeza rápidamente hacia la derecha. Aún así su rostro avanza hasta a estar a unos centímetros de mi oreja.
―¡Está bien, Alice! Puedes fingir, todo lo que quieras, puede que en estos momentos no te afecte mi presencia― dice con una voz ronca a pesar de estar susurrando. ―Pero, te aseguro que tarde o temprano sentirás algo por mi...― trago saliva y siento que mi piel se eriza.
Pero es que este tipo... ¿Está loco? ¿Qué está siquiera insinuando? Abro mi boca para responderle, pero al momento se escucha como se abre la puerta de dirección.
―¡Oh! Aquí están. Pasen adelante chicos... ― dice Weigel y Derek se separa de mí pero toma mi mano rápidamente para poder entrar en la oficina.
Nos sentamos cada uno en un lugar, pero a diferencia de la vez pasada, no dejamos una silla de por medio, al contrario nos sentamos tan juntos que nuestras piernas están rozando. ―¿Qué puedo hacer por ustedes?― dice Weigel viéndonos con el ceño fruncido.
―Verás Weigel, he decidido que tomaría tu consejo...― y voltea a verme. ―Sabes que ambos somos alumnos ejemplares y no nos gusta estar en problemas... Por lo que queríamos pedir tu apoyo y sobre todo hacer un trato.
―Hmmm... A ver ¿Cómo es eso?― dice Weigel llevándose una mano a la barbilla en un gesto pensativo.
―Trabajaremos en algo enorme, lo mejor que puedas imaginar. Algo hermoso para este campus y el renombre de la escuela. Pero sólo queríamos pedirte una cosa...
―Te escucho...― dice únicamente asintiendo.
―A ojos de todos, y con esto quiero decir, nuestros padres, maestros y el resto del alumnado. Estamos trabajando en un proyecto especial a tu elección y no por un castigo. Es más, no queremos que nadie se entere que estamos castigados― voltea a verme una vez más. ―Tú sabes que eso, sólo nos traería más problemas de los que necesitamos. El director parece pensar la idea unos momentos y luego asiente levemente
―Está bien, de igual forma no he notificado aún a sus encargados...― dice con una pequeña sonrisa de complicidad. ―No quiero meter a una joven pareja en problemas. Pueden contar conmigo y pueden irse.
―Gracias.― y con eso se levanta aún tomando mi mano y salimos de la oficina. Cuando la puerta está cerrada él simplemente, suelta mi mano y sin mirar atrás se va, no dice nada más.
Este hombre me frustra a un nivel increíble. Soy una autentica mierda por dejarme arrastrar por su atractivo, aún cuando sea un completo idiota es masculino y asombroso, y lo peor de todo es que no se si puedo evitarlo. ¡Maldito sea! Camino hacia el edificio principal y veo que está sentado justo en donde me encontraba yo, hacía unos minutos. Pensé que se había largado. Bueno, haré lo mismo me iré sin dirijirle la palabra.
Paso a su lado de largo, caminando apresurada, pero siento que tira de mi blusa fuertemente. Y me gira para que lo vea.
―¡Oye! ¿Dónde crees que vas?― dice y vuelve a tomar de mi mano para no estropear mi uniforme. ― Ven, tengo que mostrarte en dónde vamos a ensayar, que por cierto serán todos los domingos en la tarde.― dice con una sonrisa, extrañamente amigable.
Me suelto de su agarre, y digo ―Primero que nada, voy tarde a clase y segundo me puedes estropear el uniforme, la próxima, sólo llama mi atención con mi nombre en lugar de forcejear.― digo muy molesta por su imprudencia.
Alza las manos al aire, en forma de rendición y dice ― ¡Está bien, no más jaloneos, lo prometo!
―Voy a clase, Derek― digo con preocupación, espero que el profesor aún me deje entrar. ―¿Te parece si lo vemos después de la cena?― digo con apuro.
―¿Es una cita?― dice alzando su ceja y con una sonrisa burlona. No me dá tiempo a responder y mandarlo al carajo. En lugar de éso el simplemente, se da la vuelta, saluda con su mano derecha, ―¡Es una cita entonces, hasta luego!― y se va.
Suspiro, mientras me dirijo en lado contrario... Está demente. No quiero ningún tipo de cita con él. La única persona con la que puedo tener citas es con Jake.
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Alice esta en problemas... Derek es un loquillo :)
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La melodía del corazón
RomanceAlice ama la música y a su violín más que cualquier otra cosa en el mundo. Ella cree, que la música es el lenguaje de todas las almas... ya que no hay ningún ser humano que no caiga rendido a los suaves tonos de una hermosa melodía. Cuando Alice...