➳ Humano ◂JongKey▸

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XXX

Destellos

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"El amor es una locura. Y la locura hace bien al alma"

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—Y este cuadro quedaría bien en la segunda sección —mencionó Woohyun, moviéndose a un lado para que un muchacho reacomodara dicho cuadro.

Kibum se sintió mal por el joven. A pesar de que en la tarde ya habían ordenado cada uno de los cuadros a puro capricho de Woohyun (porque Kibum apenas y había abierto la boca), uno de los chicos que trabajaba para la galería tuvo que volver a estas horas, ya casi de noche, solo porque su agente quería que todo volviera a ser acomodado.

Apostaba que el capricho de Woohyun era culpa del enojo que aún tenía con Kibum. Ayer, luego de haber hablado con Jinki, se había animado a volver a su cuarto y hablar con Woohyun. Lo único que obtuvo fue un "ven y siéntate que debemos arreglar contratos". Y hoy se había limitado a quejarse sobre lo mal que estaban ubicados los cuadros en la galería, a pesar de que él había sido quien indicó los lugares.

—Así está bien. Puedes irte —intervino Kibum antes de que Woohyun lo mandara a correr otros cinco cuadros. El muchacho sonrió agradecido y desapareció por el final de la galería—. ¿Qué demonios te pasa?

—¿Por qué? Solo quiero que todo quede bien —se defendió Woohyun. Luego tomó su carpeta—. Entonces ¿nos vamos?

—¿Vas a tratar a todo el mundo tan mal? No me molestaría si solo te descargaras conmigo... A Heechul también lo trataste así en la mañana. No me imagino si esto sigue, mañana vas a tratar mal a la mitad de los artistas que también participan de la galería.

Woohyun no le prestó atención, comenzó a caminar por el mismo camino por donde se había ido el muchacho anterior. Kibum quiso decirle algo reconfortante, pero nada le salía, nada sincero al menos. Y ahora incluso tenía miedo de decir alguna mentira frente a Woohyun y quedar en evidencia. Decidió que era mejor quedarse allí un rato, tenía curiosidad por los trabajos de los demás artistas.

Aunque nada de eso ocurrió, porque apenas Woohyun desapareció por completo, fue su celular el que sonó en su bolsillo. Era una llamada de Jonghyun.

—¿Cuándo vuelves?

—Hola, sí, todo bien, gracias por preguntar Jonghyun —se quejó Kibum. Primera vez que lo oía en tres días y era lo único que tenía para decir. Aunque no había sido en un tono rudo, lo había molestado.

—Lo siento Bummie. ¿Todo bien en Jeju? —La voz de Jonghyun se suavizó e incluso sonó sincera.

—Vuelvo el sábado por la mañana. ¿Por?

—Quería verte...

Lo dijo de una manera que Kibum se olvidó del disgusto que Woohyun le había dado segundos atrás. Sonaba como si Jonghyun de verdad quisiera verlo, sonó a necesidad. Y a Kibum le encantó. No, no debía hacerse ilusiones, solo habían tenido sexo una vez. Pero... ¿Y qué? Ya se estaba hartando de tener que controlar todas sus emociones solo porque sí, por miedoso. Hacía años que no sentía esta emoción.

—¿Es muy urgente?

—Podría pasarte a buscar por el aeropuerto si quieres... No sé, ¿un café?

—Un café suena bien... ¿Puedo preguntarte algo?

—Ya lo estás haciendo, Bummie.

—¿Tuviste problemas en tu casa por llegar al día siguiente?