Deseos Inadecuados (Levi x Eren) [Fanfic Yaoi] 《Shingeki No Kyojin》

Capítulo XIII

—¡Corran, pedazos de escorias! —gritaba el instructor Keith.

—Agh... ¡¿Cómo es que Eren se salvó de esto?! —Se quejó Jean.

—Escuché que el idiota perdió la memoria —añadió Ymir mientras corría al lado a su lado.

—Sí, yo también escuché eso —dijo Christa.

—¿Acaso Eren desobedeció al capitán Levi? —habló Connie— Pobre, ya me lo imagino.

—¡Ah, que miedo! —agregó Sasha.

—¿De qué hablan? —se metió Marco.

—Eren ha perdido la cabeza —dijo Connie.

—¿Eh? ¡¿Acaso se volvió loco?! —exclamó Marco sorprendido.

—Ha perdido la memoria, Connie, la memoria —corrigió Jean.

—¿Eh? Pero, ¿cuál es la diferencia? —Se defendió el calvo.

—Sonó como si Eren se volviera un demente... —opinó Ymir— Aunque sí lo es.

—O como si en verdad hubiese perdido la cabeza, como si lo hubiesen decapitado —decía Christa con un pequeño susto.

—¡Era lo que iba a decir, Christa! ¡Ay... cásate conmigo! —exclamó Ymir, y abrazó a Christa mientras corrían.

—¡Oye!

—¡Tu voz es demasiado tierna!

—¡N-Nos vamos a tropezar!

—¿¡¡Qué es ese escándalo!!? —gritó nuevamente el instructor Keith.

—Mierda... —maldijo Jean.

—¡Ustedes seis seguirán corriendo durante una hora sin descanso! ¡Los demás descansen!

—¡¿Ehhhh?! —Se deprimió Christa.

—¡¿Qué?! —Se quejó Connie.

—¡Mierda, Ymir! ¡Por tu culpa! —rugió Jean.

—¡Cállate! ¡O confieso tu secreto! —amenazó Ymir.

—¡¡Mierda, Ymir!! —gritó nuevamente enfadado.

—¿Acaso no fui claro? ¡¡Ahora correrán durante dos horas seguidas!!

—¡¡Mierda, Ymir!! —repitió.

—¡¡Cállate, cara de caballo!!

—¡¿Qué me dijiste?!

—¡¡SERÁN TRES HORAS!! —sentenció.

—¡Ya por favor... cálmense! No quiero correr tanto... —suplicó Christa cabizbaja.

—Vale, vale. Tranquila —dijo Ymir mientras le levantaba el rostro— Si tú me lo dices entonces lo haré —obedeció sonriendo.

—¡¡CUATRO HORAS!!

—Re pu... —estuvo a punto de quejarse Connie. Pero, empezó a correr.

Luego, detrás de él, corrió Sasha, Marco, después Jean y finalmente, Ymir y Christa. Mientras éstos corrían, estaban los otros que descansaban.

—¡Mikasa! ¡Eren vendrá hoy a entrenar! —exclamó Armin.

—¿En serio? —preguntó Mikasa con una felicidad interior.

—Sí, ayer fui a visitar a Eren y vino un doctor a revisarlo. Dijo que no era grave, y que era temporal.

—Mmm... —murmuró con un pequeño enojo— solo quisiera saber cómo fue que perdió la memoria. Debió haber sucedido algo muy grave como para que pasara tal cosa. Si ese enano le hizo algo...

—El capitán Levi dijo que resbaló de las escaleras y se chocó contra la pared.

—Mmm... puede ser, tiene sentido, porque apenas llegué vi un balde caído en las escaleras. ¡Eren no se puede quedar con ese enano! ¡¿Y si a la próxima le pasa algo peor?! —pensó Mikasa— Dime algo, Armin, Eren, ¿te recordó?

—No. Pero, con el tiempo lo hará. ¡Y también te recordará a ti, Mikasa!

—Sí... sé que eso pasará —dijo con una tranquila sonrisa en su rostro.

—¡Oh! ¡Mira, Mikasa! ¡Es Eren! —exclamó señalando detrás de ella.

La pelinegra volteó y pudo ver a su querido castaño.