Forever.[malec]

Capitulo 13

Magnus no podía dormirse. Sus ojos se abrían a cada rato y su mente no paraba de crear historias o tonterías. Sus pequeños estaban durmiendo en una cuna doble al lado de la cama, del lado de Alec, quién estaba pegado a su pecho.
Miraba hacia todos lados sin poder consiliar el sueño. Pensaba en el futuro de aquellos bebes que tenía a su lado, pensaba en lo que Maryse había dicho, ¿acaso de verdad sus hijos eran malos? Él no lo veía así, él los sentía cómo criaturas indefensas, cómo tan sólo bebés que querían vivir y crecer junto a sus padres.
Alec se removió en la cama, y se aferró más a su novio, mientras que Magnus no podía callar las voces en su cabeza.
Se levantó, y se quedó mirando a sus bebés, se veían tan lindos. Tenía miedo, miedo de que alguien quisiera hacerles daño. Así que, se preparó un café y se sentó a su lado, a mirarlos y protegerlos. Se sentía aturdido y sin saber qué hacer, sabía que parecía un obsesionado, pero no podía evitarlo.
¿Que tal si alguien aparecía por la noche? ¿Que tal si alguien quisiera hacerles daño? Esa idea no podía quitarse de su cabeza.
-¿Amor?- la voz de Alec inundó la habitación, tenía ls voz ronca y se frotaba los ojos. Magnus le sonrió de lado.
-Está bien, puedes volver a dormir.
El cazador se sentó, sin seguir las indicaciones de su pareja.
-Izzy me ha dicho que te ha visto hablando con mi madre, y cree que las cosas no fueron bien, ¿que te ha hecho?
Mágnus se pasó la mano por la cara, cansado, y sin encontrar las palabras concretas para explicarlo.
-La Clave cree que los niños pueden ser peligrosos.
-¿De qué hablas?- Alex le miró un poco aturdido y confundido.
-Dicen que pueden haberse mezclado nuestras sangres y ambos pueden ser una nueva raza, y tal vez, esta pueda ser malvada y acabar con todos.
Alec se paró rápidamente mirando hacía todos lados furioso. Magnus lo tomó de los brazos y lo atrajo hacia sí. Rodeándolo por la cintura y agarrándolo con fuerza para consolarlo. Sintió las lágrimas en los ojos de su amado y se sintió terrible por haber tenido que decirle aquello.
-¿Mi madre dijo eso? Yo... No voy a permitir que toquen a mis niños.
Luego de decir aquello, se separó un poco para que ambos puedan mirarse a la cara. El brujo quitó las lágrimas de las mejillas de su novio y le sonrió de costado.
-Jamás dejaré que los toquen, a ninguno de los tres.
Alec sonrió ante eso.
-¿Crees que la clave venga por ellos?
-No ahora, pero pronto sí. Sé que querrán saber sobre ellos. Pero, ¿sabes qué? Les mostraremos que nuestros hijos no son una amenaza.

Y así fue. Durante los siguientes dos meses, estuvieron preparando a sus niños con mucho amor y esperanza. Zoey y Max se habían vuelto grandes primos, y William era el más tranquilo de todos. Zoey era de jugar más y estar más imperativa, pero William estaba tranquilo en donde sea que lo dejaran. A pesar de todo, ambos creian que sus niños estaban creciendo bien. Les enseñaban a portarse bien y qué cosas podían tocar y cuales no. Zoey ya gateaba, pero Will no se despegaba de su padre Alec. Magnus y Zoey también eran unidos, la pequeña castaña seguía a su padre por toda la casa con su pequeño gateo, era sigilosa y muchas veces sorprendía al brujo.
Todo iba bien, cada niño se llevaba bien con sus tíos y amigos, y nada estaba saliendo mal, cosa que alegraba muchísimo a Alec, hasta que su madre apareció otra vez. Una tarde, en casa de Izzy.

-¡Alex! ¿Cómo has estado? Hace tiempo que no te veo...- dijo, intentando sonar amable. Pero Alexander no iba a caer en esa.
-¿Que haces aquí?
-Vine a ver a mis nietos.- sonrió a los bebes jugando en el suelo.
-¿A verlos o a cerciorarte de que sean "buenos"?- dijo haciendo las comillas con las manos.
-¿Tu novio el brujo te dije eso?
-¡No lo llames así!-. La observó con ojos furiosos, y fue allí cuando se dio cuenta de lo que hacía allí. -¿Lo has hecho, verdad?
-Mañana estarán aquí.
-¿¡Maryse, cómo pudiste!?
Ambos estaban ahora frente a frente, en el comedor de la casa de Isabelle, quién oyó los gritos y corrió desde la cocina a ver qué pasaba. Se encontraban hablando en la puerta y ella llegó para tranquilizar a su hermano.
-¿Que pasa aquí? ¿Que haces tú aquí?- preguntó la morena.
-Yo sólo vengo a ver a mis nietos, para que se preparen. - sonrió con malicia. El corazón de Alexander latía a lo loco, y miró hacia atrás para poder visualizar a sus niño, quiénes estaban jugando inocentemente. ¿Que le harían a sus hijos para creerles?
Mientras Izzy y Maryse discutían, Alec presenció un momento extraño de su pequeño William, quien tenía un cubo de colores en frente. Movió sus dedos rápidamente y un brillo salió de sus dedos, un brillo oscuro que podría haber sido una amenaza para cualquiera. Con ese movimiento, logró convertir ese cubo en cuchillo y su hermana le miró con sorpresa. Max, quién estaba jugando con sus muñecos, apenas se movió, sin darse cuenta de lo que estaba pasando. Zoey, intento hacer lo mismo que su hermano, y logró convertir una muñeca en una daga.
Alex corrió tras sus niños y les quitó aquello que habían convertido, pero al tocarlo estos se convirtieron otra vez en los objetos principales. Su temor creció y fue allí, cuando se dio cuenta que la Clave no podía verlos así.
-¡¡Esos niños van a matarnos!!- exclamó Maryse desde la puerta, y salió corriendo mientras Izzy no alejaba la vista de los pequeños hijos de su hermano.
-Alec, ¿que fue eso?
-No lo sé, Izzy, no lo sé. Pero debo llamar a Magnus ahora mismo, o la Clave les hará algo a mis hijos.

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Por favor NO ME MATEN ! sé que muchos estuvieron escribiendo y esperando esto, pero... Tuve unas semanas complicadas con internaciones de familiares y más problemas personales y escolares. Pero ya he vuelto, okay?
Wowwwww, que les pareció el cap, ah? Espero que les guste, voy a intentar subir el prox pronto, así podrán ver qué pasa con estos bebés mágicos.
MILES DE GRACIAS A LOS QUE SIGUEN LEYENDO DESDE HACE TIEMPO Y A LOS NUEVOS, he leído toooodoooosss sus comentarios y me alegraron muchísimo. Gracias por su apoyo, y espero que pueda seguir escribiendo más seguido.
Les mando un abrazo lleno de amor
-Lulu. Lara Vázquez.