Capitulo 20.

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Si Magnus hubiera dormido algo aquella noche, se hubiera sentido mejor pero ¿que podía hacer? Su novio estaba al otro lado del mundo con sus hijos y él estaba sólo con Janet. La pequeña niña había logrado dormirse y eso agradecía el Brujo. No sabía cómo le explicaría a Janet todo lo que sucedería a continuación.

Eran las 9 am cuando sonó el timbre y Magnus se apuró a ir tras la puerta. Isabelle, Simon y Max lo esperaban del otro lado. El brujo los dejo pasar sin quejarse ante su presencia, aunque eso le hiciera acordar a su novio.
-¿Como estás?- pregunto Izzy a Magnus, quien sonrío a medias.
-Complicado.- fue lo único que respondió antes de que Janet llegara a la sala y saludara a todos.
-¡¿Janet?! ¿Esto quiere decir que Alec no se fue?
-No, Isabelle. Lamento desilusionarte. Janet se quedó por cuenta propia.
Isabelle miró a su sobrina con miedo. ¿No que ella no habría ido? Ella trago saliva. Maryse le había dicho que La Clave estaba cerca y que iban a llevarse a cualquier testigo que estuviera en la casa para hablar sobre los niños.
-No puedes estar aquí, J. La Clave está por venir.- exclamó Simón, desde el otro lado de la sala con Max en sus brazos.
-No hay vuelta atrás.- dijo Magnus.
-¿No puedes mandarla con Alec antes de que ellos vengan? Estaría más a salvo.- propuso Izzy.
-No, no puedo.
-¿Por qué?
-Es.... complicado.
-Magnus.- se enojo Isabelle.-¿Que has hecho?
-Yo....
En ese instante la puerta del apartamento se abrió de golpe y unos agentes de La Clave entraron a la casa, llenos de armas y apuntándolas hacia adelante.
-¡DETÉNGANSE YA! ESTÁN DETENIDOS POR LA CLAVE.
Y todo pasó en cámara lenta. Cómo comenzaron a agarrar a Isabelle y Simón, como unos agarraron a Janet, quien pataleo y grito. El Brujo le dijo que tuviera fuerza, pero en ese momento ya no había fuerza. Varios hombres agarraron por los brazos a Magnus y a pesar de que este se resistió al principio, después cedió dándose cuenta que ya no había vuelta atrás.
Un brujo, conocido de Magnus que trabajaba para La Clave, hizo un portal hacia Iris y todos se fueron sin demandas. Desaparecieron del apartamento y se encontraron en el juzgado de La Clave. Muchas personas de la comunidad Cazador de Sombras estaba allí, y todos miraban a Janet y Magnus como bichos raros. Ambos por fin fueron soltados por los agentes, y se sentaron en la primera banca libre. La jefa de La Clave habló, con voz firme y amenazante.
-Soy Sheila Astro. Vengo a llevar a cabo este juicio acerca de la familia Bane-Lightwood. Señor Bane, ¿no es cierto? ¿Brujo?
Magnus tan solo asintió sin darle mucha importancia. Acaricio el cabello de su hija mientras está seguía enojada acerca de los agentes de La Clave que habían invadido su casa.
-A su lado está su hija acogida Janet Bane-Lightwood, ¿no es así? Yo creo que todos tenemos una pregunta, ¿dónde están Alexander, Zoey y William Bane-Lightwood? Porque no están con usted.- pero cuando Magnus iba a excusarse Sheila habló.-Vamos a decirle a Astrid que te ponga un hechizo de la verdad, ¿no te parece?
La tal Astrid apareció, con gran cabellera rizada y colorada, y pecas en todo su rostro. Movió sus delicadas manos y Magnus sintió un movimiento en su mente y cuerpo. La bruja hizo una mueca y se acercó a la jefa de La Clave, susurrándole algo en el oído. Luego de ello, se alejó y Magnus quedó libre de la tortura.
-Entonces, señor Bane, ¿sabe dónde están Alexander Lightwood, Zoey y William Bane-Lightwood?
-No lo sé.- declaró.
Sheila se sorprendió ante su respuesta y comenzó un susurro entre la multitud detrás.
-¡Silencio por favor!- pidió para luego concentrar su mirada en Magnus otra vez. -Volveré a preguntar, ¿sabe dónde está su novio y sus hijos?
-No lo sé, lo siento.
-¿Y cómo escaparon? ¿A donde fueron?
-Yo hice un portal. No tengo idea a donde fueron.
-Es decir,- dijo con desesperación la mujer.- ¿usted abrió un portal que podría haberlos llevado a cualquier lado y ni siquiera sabe a dónde los mando? ¿Jamás lo supo?
-Jamás.
Y entonces todos comenzaron a gritar en su contra. Izzy se quedó inmóvil pensando en que Alec y sus sobrinos podrían estar corriendo peligro ahora y Magnus no podía ayudarlos. ¡Nadie podía ayudarlos!
-¿Cuando volverán?- pregunto entre gritos Sheila.
-Cuándo mis hijos estén a salvo.

En algún lugar del mundo....
-Papi, ¿donde damos?- pregunto la voz pequeñita de Zoey. Alexander miraba hacia todos lados asustado.
-No lo sé, cariño. Pero debemos hallar un lugar para quedarnos, ¿no te parece?
Estaban en una carretera, no sabían dónde, esperando a que algún auto parara y los llevase a la ciudad más cercana. Tenían que pasar desapercibidos como humanos o sino La Clave los encontraría. Y sabía que para tal punto, La Clave ya había mandado a todo el mundo a buscarlos.
Will se agarró a su cuello y hundió la cabeza en el huevo de su hombro y cuello. Alex estaba totalmente frustrado. Necesitaban dormir en una cama, necesitaban ayuda. No podía estar allí solos. Alexander extrañaba tanto a Magnus y a las infinitas cosas que él le hacía sentir. ¿Por que siempre les pasaba algo como esto? ¿Por que nunca podían vivir felices y tranquilos? Parecía ser su destino huir todo el tiempo.
Alex levanto el brazo en cuanto un auto apareció a lo lejos, y se sorprendió cuando este comenzó a bajar la velocidad y paro a su lado. El cazador de sombras preparo sus armas, tal vez necesitaría matar, pero a estos puntos ya no importaba. Él sólo quería sobrevivir con sus hijos.

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Caaaaaap!!!! Al finnnnnn. Soy una persona que escribe muy poco y me odian por ello, lo sé. Pero este cap otorga mucha información bastante complicada. ¿Qué hará La Clave? ¿Magnus y Janet? ¿Alec y los niños? Prox cap tiene las respuestas. Prepárense!!!
Gracias por leer y votar y comentar! Veo que les está gustando mucho la novela y me encanta ver eso.
-Lara Vazquez.

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