Forever.[malec]

Capitulo 23.

Magnus y Janet caminaban por los pasillos del lugar de La Clave. Todos los guardias los miraban mientras iban pasando, y el Brujo tomaba fuertemente la mano de su hija. La rubia solo observaba el camino y se recordaba donde estaban sus armas bien guardadas para combatir en caso de emergencia.
Pero cuando llegaron a la oficina de Sheila se encontraron solos con ella, sin interferencia. El adulto se preguntó si acaso era seguro aquello, no sabía de lo que ella podría hacerles.
La mujer levantó  el rostro y los observó.
-¿Me vinieron a visitar?- se les burló y Magnus se puso aún más serio de lo que normalmente estaba. Sus ojos verdes dorados detonando el enojo dentro de ellos.
-Déjate de bromas,  Sheila. Nos están atacando en nuestro propio apartamento y tú sabes muy bien que yo no sé nada acerca de Alexander y los bebés.
El rostro de la mujer se volvió sombrío.
-Aún no te creo, Magnus Bane. Eres el brujo más famoso y poderoso, debes tener un truco debajo de la la manga. ¿Quien dejaría ir a su esposo e hijos a un lugar desconocido?
-¿Quieres probar que no se nada? Hazme lo que quieras, pero deja a Janet en paz.
La mujer se le quedó mirando un rato.
-Te encarcelaremos hasta que nos des información.
-¿Y tú crees que eso me hará hablar?
-Ya veremos los métodos para hacerte hablar.
-¡No toque a mi papá!- le grito la pequeña rubia poniéndose en frente de Magnus. Este la miro y sonrió. Se arrodilló y la puso frente a él.
-Janet, déjame ocuparme de esto. Será mejor que vayas con los tíos, Izzy y Simon, y con el primo Max.
-Pero....-hizo un puchero.- quiero ayudarte.
-Me has ayudado muchísimo cariño.- le dijo mientras le corría delicadamente un mechón de la cara. -Es momento de que estés tranquila y de que papi arregle este problema así tus hermanos puedan volver a casa.
Ella asintió aunque Magnus sabía cuanto le dolía a la niña no ayudar en combate y salvar a la familia. El le acaricio la mejilla y le beso la frente antes de levantarse y dirigirse a Sheila.
-Déjame abrir un portal y luego seré todo tuyo.
-No aquí, síganme.
Ella los sacó de la oficina y caminaron por unos cuantos pasillos con guardias que los miraban atentos, como si Magnus y su hija estuvieran a punto de atacar. Se detuvieron en un lugar habiendo donde parecía haber reuniones normalmente. Era como un hall enorme, con esculturas y dibujos en el techo. Magnus movió sus manos y abrió un portal, pero antes de que la pequeña se vaya, esta le susurró algo que permanecería en la cabeza del Brujo para siempre.
"Familia fuerte, familia unida."

Alec movió sus brazos y abrió la puerta de la habitación. Dejo los bolsos en el piso y dejo pasar a los niños para luego cerrar la puerta.
Había encontrado una tarjeta de Magnus en su bolso que aún tenía dinero y ahora estaban en un hotel donde podrían hospedarse un largo tiempo: el dueño conocía a su novio.
El moreno se agarró el cabello con cansancio. William y Zoey ya se habían subido a las camas y se encontraban saltando.
-¡Niños! Salten despacio, no rompan nada por favor. Tengan cuidado.
-¡Si papá!- le respondió sarcásticamente la pequeña.
-¿Quien te enseño a usar ese tono, niña?- pregunto cruzado de brazos y los niños se detuvieron para mirarlo. El que contestó aquella pregunta fue Will, y con gran melancolía.
-Papá Magnus.
Alexander hizo una mueca y se acercó a la cama para sentarse al lado de su hijo, mientras Zoey se acercaba a ellos.
-¿Lo extrañan no?
-Mucho.- dijo la castaña, con ojos dorados.
-Ya también niños, pero ahora no es posible que lo veamos. Prometo que volveremos pronto y no nos separaremos nunca más de él.
Les dio un abrazo que tuvo que romper luego de un golpe en la puerta de la habitación.
Tenso, tomó el cuchillo serafín y se acercó lentamente a la puerta. La abrió rápidamente pero se encontró con una cara sonriente.
-¡Hola! Soy Greg Evans, el dueño del hotel. Escuche que Magnus Bane estaba aquí, ¿me equivoqué de habitación?
-Pues....- titubeó. - No. Yo soy el novio, y él no está aquí.
-¿Ya se fue? ¿Tan malo es el hotel?- se rió.
El Cazador sonrió un segundo antes de contestar.
-Pues, no....
Entonces los niños aparecieron por la puerta con grititos y sonrisitas.
-¡Oh Santo Cielo! ¿Estos son sus hijos?-los miró con adoración. -Ella es igual a Magnus. - dijo mirando a Zoey que se sonrojó.
-Lo es, -rio Alec. - Pero Magnus no está aquí en Rusia, sigue en Nueva York.
-¿Y qué haces tú? ¿Se separaron? A ese Brujo nunca le duraron las relaciones.
Alexander no se sentía cómodo hablando con esa persona sobre su vida personal pero si era el único amigo que tenía allí, más le valía poder contar con el. En momentos críticos como esos, necesitaba cuanta más gente podía tener.
-Aún estamos juntos, de hecho. Pero... La Clave está... persiguiéndonos.
-¿Que hizo Magnus?-rio.
-No, los persiguen a ellos.- dijo señalándo a los niños.
-Oh.-los miró Greg con intriga. - Pues quédense aquí el tiempo que quieran, esta a mi cuenta.
-¿En serio?-dijo sorprendido Alexander. - No es necesario, podemos pagarlo.
-Digamos que son algunas deudas que tengo que pagar con Magnus.
Alec asintió agradecido, y Greg se quedó un rato más hasta que Alexander le prometió que lo esperaría en Nueva York.
Cuando volvieron a adentrarse en la habitación él castaño más rojizo le preguntó a su papi si ese hombre los llevaría de vuelta a Magnus. Alexander se puso melancólico al saber que no solo él extrañaba al Brujo, pero le dijo a su hijo que ese hombre los cuidaría hasta que volvieran con Magnus.

Janet se encontraba en el Instituto junto a sus cuatro tíos:Izzy, Simon, Clari y Jace. Max y ella habían jugado hasta que el bebé se había quedado dormido y ahora, la rubia estaba sola en la sala de entrenamientos, a la que solía asistir todos los días. Había practicado bastante y se sentía tan enojada, impotente, sola... quería estar con su familia, ayudando, peleando y estaba allí parada mirando armas.
La puerta rechinó y la rubia se encontró mirando hacia la entrada al salón. Su tía Isabelle estaba allí, con una pequeña mueca en el rostro y una pancita que crecía día a día.
-Oye, Jan, ¿estas bien linda?
-Nadie me llama así.
-Lo se, quería encontrar un apodo que solo yo diga, uno bonito. - dijo mientras se acercaba a ella y se sentaba en la colchoneta. Janet se sentó junto a ella. -¿Como estas?
-Quiero ver a mis papás.
-Lo se, bonita, créeme que yo estaría igual. Y se que eres terca como Alec y quieres afrontar todo ya, pero tus padres hacen esto para cuidarte. Y cuidar a tus hermanos.
-¡Es que yo también quiero cuidar a mis hermanos!
Una sonrisa se formó en el rostro de Isabelle.
-Mira, podrás cuidarlos pero esta no es una batalla que puedas ganar sola, Jane. Es una batalla mucho más grande que tú, y que yo. Es algo que Alec me pidió que no me metiera, porque sé que él quiere resolverlo con su nueva familia, aunque, haré todo para que esté a salvo y se que cuñado las cosas se compliquen, sin que me lo pida, lo ayudaré. Y tú harás lo mismo, ¿vale? Es que ahora todo está violento y tenso, y tú familia corre mucho peligro.
-No quiero perderlo....-lloriqueó- No como a mi familia.
-Jane....- se acercó y la abrazó con fuerza, le acarició el cabello y le susurró cosas bonitas. Janet comenzó a sentirse mejor, pero su charla emotiva fue interrumpida por unos fuertes golpes en la puerta del instituto. Ambas se separaron y fueron hasta la puerta, a donde también se estaban dirigiendo el resto de los presentes en el lugar.
Cuando el tío Jace abrió la puerta, cuatro niños en la puerta aparecieron. Uno alto y rubio, un bebé, un niño de no más de 4 años y una chica, niña, que llamó la atención de Janet. Era morena, con ojos grandes y de un celeste brillante, con una piel pálida. Se veía algo ruda, pero ella también miró a la rubia y sus miradas se conectaron.
Janet apartó la mirada avergonzada, y observó a sus tíos hablando con el niño mayor. Pero no podía prestar atención mientras sentía la mirada d ella niña bonita. ¿Acaso era posible que una niña fuera tan bella?

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HEY HEY HEY HEEEEEEEY! Ya se, pensaron que había muerto, disculpen, reviví (?
Bueno, espero que les guste el cap aunque haya tardado décadas. Esta vez me voy a enfocar en esta novela y vamos a ver qué sucede ahora.
Mmm, Magnus y Alec... ¿que le hará la clave a Magnus? ¿Y Greg ayudará a Alec? ¿Qué pasa con Janet y esta nueva chica?
Gracias por todos los likes y comentarios llenos de amor 💕 muchas gracias por todo el apoyo! los quiero.
-Lara Vázquez.