¿Una Nueva Amenaza? Parte I

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Lo que menos se esperaba era lo que estaba pasando, unos cuantos grupos de vampiros de todas clases estaban atacando nuevamente las instalaciones de Hellsing como hace 30 años, ella por acto reflejo desapareció y trató de buscar a Integra para asegurarse que estuviese bien al fin y al cabo era lo único que realmente preocupaba ya que su Ama no era lo suficientemente fuerte para cuidarse sola frente a los vampiros, agregando que ella era la segunda mascota de Hellsing encargada de cuidar al Amo de su Maestro. Al llegar a la oficina de Integra se asustó porque de detrás de la puerta no se escuchaba ni un sonido pero un susto mayor fue cuando vio escurriendo un río de sangre tan grande que podía llegar más allá del pasillo, sin pensárselo dos veces de una patada abrió la puerta en busca desmesurada de Integra pero para su tranquilidad ella se encontraba sentada en el escritorio fumando uno de sus finos puros con tanta tranquilidad, por otra parte Eron no tenía ni una gota de sangre en su traje negro, ella lo encontraba impresionada ya que más de 20 cadáveres de vampiros vilmente desmembrados se encontraban esparcidos por todo el suelo del despacho de la regente de Hellsing.

-Ve y ayuda a los soldados que yo estoy bien- trató de disimular su preocupación por sus subordinados que defendían la mansión en esos momentos.

Victoria asintió con la cabeza y se desvaneció en aquellas sombras entremezcladas con sangre de la habitación, a decir verdad tuvo que retener a sus deseos más primitivos por beber la sangre de aquellos cadáveres. Ya estaba oscureciendo y los gritos de los hombres y los vampiros siendo asesinados brutalmente eran desgarradores pero el aroma a sangre enloquecería a cualquier ser de la oscuridad y más a una aprendiz del príncipe empalador quien amaba la sangre y el matar, al llegar al "campo de batalla", hizo lo posible por controlar a la mayoría de vampiros pero lo que no se esperaba era que un vampiro de rango S se atrevería a darle pelea al igual que otros cuantos del mismo o rangos más bajos.

Aquellos vampiros la encerraron en una de las habitaciones de la mansión, ya ni siquiera tenía a Harkonen puesto que sus balas se había terminado al ayudar a los ejércitos de Hellsing, tocaba pelear a puño limpio como su Maestro adoraba hacerlo, estaba algo confiada porque no se veían tan peligrosos y efectivamente así era, podía matar a la mayoría de ellos con gran facilidad pero había algunos que realmente se le complicaba enfrentar, ya podido terminar con casi todos ellos pero uno no se rendía, era más fuerte de lo que le hubiera gustado admitir. Su rival le hacía frente como si fuera un vampiro de igual fuerza que la de ella más sin embargo usaba todo lo que podía a su alcance para destruirlo.

Era de reconocerle que ese vampiro era apuesto y de actuar muy elegante como si se tratara de alguien proveniente de una familia noble, aquel vampiro poseía ojos rojos al igual que la chica y un pelo largo y de color castaño un poco desarreglado pero que le llegaba más allá de los hombros, su complexión era de un muchacho delgado pero con gran tamaño y sumándole su fuerza era impresionante, su vestir era como el de alguien adinerado, un traje negro de terciopelo que se veía carísimo agregando sus zapatos muy formales y sus modales tan refinados, cualquiera notaría que era alguien de la alta sociedad.

La luz de la luna se encontraba cubriendo la habitación medio destrozada, se veían con tanta seriedad y odio, sin pensarlo Victoria se lanzó al ataque tratando de darle un golpe en el estómago sin embargo aquel vampiro lo esquivó con facilidad como si de un juego de niños se tratase. Él, por otra parte era un poco más veloz que victoria y la atacó en variadas ocasiones dejando grandes heridas en su cuerpo las cuales derramaban sangre por montones, ella sonrió como lo hacía su Maestro y en su mirada tenía un dejo de demencia e infame crueldad, el vampiro se exaltó de una manera impresionante el sólo ver el rojo de los ojos de aquella chica y ver su sonrisa lo perturbaba en demasía, ella ni siquiera se inmutaba ante las acciones de aquel vampiro y a pesar de estar tan herida ella se veía tranquila como si se encontrara en perfectas condiciones, cuando por fin pudo acercarse a él lo golpeó con tanta agresividad en su estómago que lo hizo perder el suelo rápidamente para después atacarlo con las sombras que poseía, atravesando el cuerpo del joven en repetidas ocasiones, aquel vampiro trató de defenderse velozmente pero ambos eran veloces así que se hacían daño continuamente pero aquel vampiro que proclamaba ser el mejor de todos, desenfundó su espada y con esta atravesó el estómago de victoria clavándola sin piedad en la pared, la movía en ciertos momentos haciendo que esta entrara más y más en el cuerpo de la chica. Victoria derramaba sangre al igual que aquel vampiro y no sólo por las heridas generadas en el combate sino pequeños disparos de los soldados anteriormente asesinados a decir verdad la que derramaba más sangre era victoria ya que al clavar aquella espada comenzó a escupirla, sin embargo aquel vampiro pensó que había terminado con la pequeña Draculina ya que sabía perfectamente la restricción que le daría a la chica.

MIS DEMONIOS (AxS) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora