MIS DEMONIOS (AxS)

Nueva Vida

Este capítulo a sido traído a ustedes gracias a Dianawitch12
Denle las gracias. -3- si ustedes no se las dan yo si porque es de las primeras personas que le dio favorito y sigue mi historia.
Recuerden que si quieren que el siguiente capítulo sea dedicado para ustedes deben ser el primer favorito, les tengo una sorpresa pero se las diré después.... Si, soy malvada  >:3
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//Regresamos a narración normal //

El silencio se volvió sepulcral y ninguno de los dos dirigió una palabra al otro, pensó que realmente ni siquiera se tomó la molestia de leer su mente o apenas preguntara él, ella se lo diría o más bien él quería que se lo dijera sin pensarlo, realmente ya no sabía que era lo que pasaba por la mente de ambos pero como ninguno de los dos hablo una lágrima de la pequeña se escapó y ella al sentir esa lágrima resbalar su mejilla optó por cruzar la puerta de la organización marcando por fin su libertad. Y lo peor de todo... Señalando el nunca volver a ver a quien ama solo para dejarlo ser feliz con su Ama con la mujer a la que realmente amó y amará.

Alucard estaba atónito y sorprendido que realmente no sabía cómo actuar ante lo que la pequeña Seras hizo, estaba extrañado y confundido aunque al inicio deseaba pensar que era una broma de mal gusto de su Chica policía pero al parecer ahora no parecía una broma. No quería ni imaginar cómo sería la mansión si ella no estaba haciéndola resplandecer con su sonrisa a pesar de que fuera el día más oscuro, triste y deprimente del mundo; ella podía hacerla brillar. Además de que no sabía cómo haría para quitarse a ese mayordomo de encima ya que estaría molestándolo durante todo el día y culpándolo de lo que pasó.

Él no se detuvo y en cuanto regreso de sus pensamientos se decidió a seguir a la pequeña hacía donde esta se dirigía pues parecía que tenía un plan muy bien estructurado ya que no dudaba ni una sola vez de su decisión algo que preocupó más al joven pues realmente el creer que esta desaparecería de su vida le aterraba.

La pequeña Draculina siguió caminando durante un par de minutos cruzando bellas calles con poca luz que no revelaban su rostro, para terminar por llegar hasta el Jardín Real en el cual se encontraba un joven que admiraba tranquilamente los enormes rosales que se encontraban teñidos de color blanco y con una fragancia dulce que impregnaba la más fresca brisa. Victoria apenas verlo se detuvo unos pocos metros frente a él con la mirada baja como si mostrará respeto ante este.

-Veo que has llegado mi pequeña Seras - la miró de reojo con una dulce sonrisa entregándole una pequeña rosa de color carmín.

-Ammmh es que he aceptado su propuesta y vengo aquí a jurar lo que me prometió y lo que prometí a cambio dé - comentó algo nervioso, apenado e inseguro de lo que decía.

Ambos tenían un espía que escuchaba cada palabra por parte de ambos sin embargo la única que no se dio cuenta fue Victoria ya que se encontraba ensimismada en sus pensamientos, trataba de pensar las cosas con tranquilidad y ver si podía salir corriendo antes de aceptar o eso pensaba sin embargo sus piernas no le respondían.

-¿Estas muy segura de lo que harás? Aún tienes la posibilidad de retirarte si lo deseas - quedó de frente a ella esperando una respuesta seria y concreta.

-Estoy demasiado segura... Yo... Yo vine por venganza - aclaraba un poco la voz con fingida seriedad tratando de ser lo más convincente posible.

-No trates de fingir conmigo pequeña, yo sé cómo se atrevió a hablarte en aquella misión - tomó con delicadeza la barbilla de la chica y la hizo mirarle con dulzura.

-yo... - la chica se quedó Impresionada por aquello, ¿era acaso tan evidente o que la gente leía sus pensamientos? Aún así no se atrevió a mirarlo pues se sentía apenada.