NARRA KATHIA:
El desayuno había estado tan tranquilo, que por poco olvido mis últimas horas de llenas de preocupaciones.
Resignada suspiro mientras amarro mi cabello en una coleta y me observo en el espejo del baño de la habitación de Kyle, hago una última mirada antes de girarme en dirección al comedor cuando me viene un gran dolor de cabeza; fue tan sorpresivo y fuerte que por unos cuantos segundos se me nubló la visión, intente agarrarme de la manilla de la puerta para evitar la caída pero en un error de cálculo fui a golpear mi mano directamente en el centro de ésta, terminando estrepitosamente en los azulejos del pequeño cuarto. A dolorida por el golpe y sobrepasada con todas las situaciones vividas recientemente, me quedé recostada en el lugar mientras las lágrimas brotaban sin darme tregua alguna. Me sentía tan inútil e indispuesta al empezar a reconocer los efectos secundarios de las píldoras que solo quería estar en mi cama tapada hasta la cabeza, con una gran caja de helado y con la puerta en pestillo para así evitar cualquier pregunta curiosa o indiscreta.
Pero fue en el momento en el que estaba terminando de serenarme que la puerta de la habitación de abrió, pasé mi brazo derecho por sobre mi frente y evite mirar a Kyle. Rápidamente se pudo escuchar las aceleradas pisadas en mi dirección, sentí sus manos en mi costado antes de siquiera haber escuchado su voz.
-pero que mierda? - preguntó mientras pasaba sus manos por mi cuerpo tanteando algún daño - nena? - dijo mientras intentaba sacar el brazo de mi cara, pero se lo negué presionando más en mi frente; escuche como respiraba tratando de serenarse para poder dirigirse a mí sin alterar más las cosas.
-Kathia como terminaste en el suelo? - habló en lo que tomaba mi mano izquierda y la dejaba sobre mi vientre junto a la suya.
-no lo sé - susurre, en lo que comenzaban nuevamente las lágrimas.
-demonios algodón de azúcar - se resignó - déjame ver tu cara, te golpeaste en la cabeza? - volvió a preguntar en lo que volvía a intentar sacar mi brazo. Negué con la cabeza.
-no que? - dijo sin soltar mi brazo.
-no quiero que me veas así - susurré.
-así como? - gruñó - vamos Kathia, necesito más información antes de empezar a volverme loco aquí mismo. Como no quieres que te vea nena?
-así - respondí en lo que sacaba mi brazo para poder verlo.
No supe interpretar su comportamiento, sus gestos faciales se endurecieron, sus manos se volvieron puños y su respiración se aceleró, pero sus ojos solo mostraban preocupación; y aún así ... tan rígido como se encontraba, seco con suavidad cada una de mis lagrimas, me tomó en sus brazos y me llevó hasta dejarme recostada sobre "nuestra" cama. Colocó sus manos al rededor de mis piernas.
-como quieres que llevemos esta conversación? - lo miré sin comprender a lo que se estaba refiriendo - nena, vamos a hablar de esto te guste o no, la única opción que te daré para escoger es como quieres que estemos para hacerlo, puedo quedarme aquí mirándote, puedo recostarme a tu lado y dejarte sobre mi pecho o puedo ponerme detrás tuyo y abrazarte, no me importa la forma ya que lo haremos como más te acomode, pero hablaremos.
Y ahí estaba él con cortes, moretones en todo su rostro, piercings y tatuajes preocupándose por mí, siempre atento a mí.
No me di cuenta de que lloraba hasta que lo vi alargar su mano para pasarla a través de mi mejilla detrás de una lagrima, giré mi rostro hacia su contacto y besé la palma de su mano, deseosa de no encontrarme en la situación en la que estaba, resignada hablé.
-puedo apoyarme en tu pecho y abrazarme? - susurre, sintiendo ya el gran peso de mi enfermedad.
El asintió y se acomodó llevándome con él.
-estoy contigo ... Cariño - besó mi frente - dime que está pasando.
--------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Bueno ... Que tal chic@s? .... después de tanto tanto tiempo sin estar por estos lados! .... No voy a comentar mucho porque he estado desconectada, pero si les voy a decir que como personas nos encontramos en constantes cambios intentando averiguar quiénes y que somos, es durante este proceso en el que estaré intentando nuevamente descubrir el gusto por la escritura y como muestra de ello es que les he traído un pequeño capítulo de "Me perteneces" sin ninguna otra cosa que agregar es que espero les guste y lo disfruten.
Saludos, gracias por leer, por los destacados, por agregar la historia a su lista de lecturas y por sus comentarios 😉
