HUMANOID "00" [YoonKook]

-03-

Eran exactamente las 06:00 am del domingo. Yoon Gi había dormido bastante bien, pero en ocasiones se levantaba de su cama porque sentía que aquella cosa se había despertado y que estaba de pie observándolo para esperar a asesinarlo.

Más allá de su pequeña paranoia con el robot, estaba contento y esperanzado porque Nam Joon pudiera arreglarlo. Le serviría muchísimo el dinero para pagarse los estudios ya que no lograba conseguir un trabajo decente.

Al entrar al salón, vio a su gato durmiendo sobre las piernas del robot, parecía estar cómodo ahí, cosa que le pareció extraña porque seguramente estaría duro, era un artefacto de metal lleno de cables al fin y al cabo.

—Ey, ven aquí—agarró al pequeño animal y lo dejó sobre el sillón.

Se acercó para volver a verlo detenidamente. Todo parecía seguir en su lugar, sus ojos cerrados, sus manos sobre sus rodillas, su espalda bien erguida. Suspiró aliviado y miró por su ventana hacia la calle, esperando impaciente a que su amigo llegara.

Nam Joon solía ser puntual con los horarios, pero era un día domingo. ¿Quién se levantaba a las seis de la mañana?

Yoon Gi siguió observando durante unos quince minutos y vio una figura de bastante altura caminando por la calle en dirección hacia su casa. La forma de caminar de su amigo era algo peculiar, por lo que no podía evitar reírse un poco de él.

Se acercó hasta la puerta y antes de que tocara timbre, ya había abierto. El alto lo miró sorprendido y le sonrió.

—Buenos días, Yoon Gi—pasó al interior de la casa, sin llevar nada consigo.

—¿Y tus herramientas?¿No traes nada?

Yoon Gi inspeccionó a su amigo, le revisó descaradamente los bolsillos de su chaqueta de jean y los de sus pantalones. Pero éste ni se inmutó. Alzó sus manos como si fuera un delincuente y Yoon Gi un policía.

—Tranquilízate un poco. Tengo motivos para no traer nada, ¿sabes?

—¿Y cuáles son?

El más alto suspiró y rascó su nuca. Había estado toda la noche leyendo sobre esas cosas, de las cuales no encontró mucha información porque la empresa había borrado casi todo, de todos los lados posibles en internet. Así que lo único que encontró fue una página "clandestina" sobre tecnología.

Dio unos pasos hasta el sillón, acomodándose cerca del humanoide y esperó a que Yoon Gi también se sentara para poder hablar.