- ¿Qué... Ha pasado aquí?, preguntó temeroso Nathan al entrar en la habitación del pequeño, lágrimas caían en mi rostro mientras recorría la habitación con mi mirada, -¡¿Qué mierda es todo esto!?, gritó furioso mientras recorría cada rincón de la habitación, en los muebles se observaban arañazos, sus juguetes estaban regados por roda la habitación... Ahogue un chillido al imaginarme lo que había pasado, entonces algo llamó mi atención cerca de la ventana, me acerqué y encontré girones de lo que parecía una camisa manchada de un líquido rojo carmesí, con cuidado lo acerqué a mi nariz y la desesperación me invadió al confirmar que era sangre, la sangre de Erick, mil lágrimas se acumularon en mis ojos, miré a Nathan asustada y él se acercó con el seño fruncido, agarró la tela y lo apretó bajo su puño, apretó los ojos y salió de la habitación, antes de salir un impulso me hizo agarrar su brazo.
- Te espero en el bosque, lo encontraremos, dije dándole un beso en el cachete, y ahí noté cómo mis huesos crujían y se partían, caí de rodillas al suelo, un fuerte dolor de cabeza me incadió mientras notaba cómo mi mandíbula y mi cabeza cambiaban su forma, mi pelo comenzó a crecer y una sensación de calor invadía mi cuerpo, con un último crujido de mis huesos levanté mi cabeza y miré a Nathan, él me miraba sorprendido, yo me dí la vuelta y salté por la ventana, ¿una lucura verdad? Pero eran dos pisos nada más, caí perfecta y comenzé a correr hacia el bosque, todavía no me creo que saltara por la ventana, en otra ocasión no lo habría hecho ni loca, pero fue un impulso lo que me empujó a hacerlo. Levanté el hocico intentando encontrar su rastro, de repente a mis fosas nasales les invadió un olor muy débil a chocolate y vainilla, es él. "Sí, lo encontré", aullé para avisar a Nathan enseguida llegaron hasta mí un grupo de lobos encabezados por un gran lobo blanco, mi corazón se estremeció y gemí de felicidad al verlo, él...era Nathan, increible, su lobo era perfecto al igual que él, fuerte y ágil avanzaba por el bosque hasta llegar a mí.
-"¿Qué encontraste?, preguntó con voz autoritaria, tardé un poco en contestar, todavía estaba flipando con su lobo.
- "Tengo su rastro", me sentía feliz, él asintió y yo comenzé a correr con el grupo de lobos detrás mío. Me sorprendida la agilidad que tenían mis patas, recorrían el bosque y esquivaban los obstáculos con gran facilidad, como si conociera el bosque de toda la vida. Seguimos corriendo durante kilómetros hasta llegar al descampado donde anteriormente había estado con Aisha, intenté encontrar su rastro, pero lo había perdido gruñí enfadada.
- "Lo he perdido, sepárence, vayan en grupos de dos y busquen su rastro o cualquier señal que nos pueda dar su paradero", dije en un gruñido, no sé de dónde saqué el valor para decir eso y sonar autoritaria, pero lo hice, Nathan me miraba sorprendido, sonreí por dentro. Los lobos me hicieron caso y comenzaron a irse en pareja recorriendo todo el descampado, de repente un lobo aulló, Nathan y yo nos miramos y comenzamos a correr en su dirección. Al llegar un lobo enorme gris con una gran cicatriz que recorría su ojo nos miraba preocupado.
-" Tengo su rastro...", su voz grave me daba escalofríos, no entendía por qué sonaba tan preocupado, eran buenas noticias. -"Alfa... Su rastro... Nos conduce al otro lado del descampado... ", miré a Nathan y este había sacado sus dientes.
- "Pero eso no significa que fueran ellos...", el lobo gris agachó su cabeza y apareció otro lobo detrás de él, este cargaba algo plateado en su boca envuelto con una hoja, lo soltó en el sulo y la hoja se desenvolvió, ante nosotros apareció un cuchillo plateado, todos los lobos nos echamos hacia atrás, era un cuchillo de plata. Oí como Nathan gruñía, - "Retirémonos". Lo miré confusa mientras que él me daba la espalda y comenzaba el camino de regreso. Agarré el cuchillo y lo enrede como pude en la hoja, lo agarré con mi boca y me puse delante de Nathan, él me miró furioso pero me daba igual, estaba loco si pendaba que iba a volver.
- "Kelly aparta, no lo entiendes, debemos volver, estamos en peligro." Lo miré rabiosa no puedo creer que fuera a dejar la persecución ahora.
-"Estás loco si piensas en que me apartaré y dejaré a Erick sólo, ese pequeño tiene que estar muerto de miedo, sólo y herido, no voy a abandonarle." Ahora sí, sus ojos me miraron con furia.
- "Kelly nadie ha dicho nada de abandonarlo, creeme cuando te digo que el que mi hermano esté desaparecido me duele más que a tí, pero por el bien de los demás debemos volver, si quieres volver genial, pero si no tú verás, no pondré en peligro a nadie más de mi manada". Cada palabra suya era como una puñalada en mi corazón, sentía como la angustia invadía mi cuerpo, si fuera humana ya estaría llorando, él lo sabe pero solo agacha la cabeza y comienza a correr con todos los lobos detrás suyo. Comienzo a gemir de dolor, me había dolido mucho sus palabras, miré hacia el descampado y escuché pasos s kilómetros de mí, mi instinto hizo que corriera hacia la mansión, con cuidado de que el cuchillo no rozará mi piel llegué a la mansión, mi angustia no desaparecía, las palabras de Nathan me habían dolido, pero noblo iba a demostrar, un dolor me hizo soltar el cuchillo, miré mi lomo y ví como mis huesos comenzaban a cambiar su forma, un dolor horrible se apoderó de mi cabeza mientras notaba cómo la forma de mi cabeza y mandíbula volvían a cambiar, noté cosquillas en mi piel al notar cómo mis pelos desaparecían poco a poco, con un último crujido mi cuerpo se sumió bajo una sensación de frío y calor, bajé mi mirada y me dí cuenta de que...¡de nuevo estaba desnuda!, ¡ay la mierda!, golpeó con mi mano mi frente y me tapo como puedo mientras corro hacia la parte de atrás, agradezco al cielo por no encontarme a nadie en mi camino, me pareció raro pero decidí que así sería mejor, no me quiero imaginar si alguien me hubiera visto en este estado. Al llegar a la habitación no pierdo tiempo y agarro un short, una camisa de asillas azul y unos tenis negros, no me esforzé mucho ya que acabaría rota si volvía a convertirme. Agarré mi pelo en una coleta de caballo y salí corriendo hacia el comedor, donde miles de olores se mezclaban en mis fosas nasales, al llegar todo el mundo guardó silencio y dirigieron su mirada hacia mí, me sentía incómoda pero no lo dí a demostrar, con mi cabeza bien alta me dirigí al lado del hombre que había dañado mi corazón minutos antes, él me dedicó una mirada seria y comenzó a hablar.
- Bien, ahora que Kelly ha llegado... Dijo haciendo un ademán hacia mí, - como bien saben mi..., paró y tragó saliva, esto se le hacia difícil, -hermano Erick fue secuestrado..., apretó sus puños en sus costados y apretó su mandíbulas, -Su rastro nos conduce fuera de nuestra frontera... Lo que significa que..., no pudo seguir, se volvió hacia mí y me envolvió en sus brazos, me cogió totalmente por sorpresa pero le corresponde al abrazo, sabía que estaba a punto de romperse, escondió su cara en mi cuello y comenzó a llorar en silencio, lo apreté más hacia mí y sobe su espalda, a pesar de todo me dolía verlo así. Entonces uno d elos generales que se encontraban frente a nosotros me miró pidiéndome permiso para hablar, asentí.
- Eso significa que son los cazadores los que están detrás de todo esto, reconocí su voz enseguida, era aquel lobo gris que encontró el cuchillo de plata que ahora yo guardaba en uno de mis bolsillos, noté como el cuerpo de Nathan se tensaba y supe que era el momento de hablar, era el momento de asumir el papel que me tocaba.
- Esto no significa que lo demos por perdido, debemos ser fuertes, vamos a demostrar a esos malnacidos que no se pueden meter con notros e irse de rositas, un sollozo se escuchó al final de la habitación y encontré Aisha llorando en los brazos de su marido, mi corazón se partió al oirla así, tragué un nudo d emi garganta y seguí mi discurso. - Demostremos que nosotros somos la raza fuerte, yo os dirigiré si vosotros me lo permitís, iré al frente y lucharé hasta al final, daré mi vida con tal de traer de vuelta al pequeño Erick a casa sano y salvo, y me encargaré personalmente de que esto no vuelva a pasar, ¿quién está conmigo?. Dije elevando mi voz, enseguida las miradas confusas se convirtieron en miradas de rabia y dolor, sus gritos de guerra llenaron el lugar y sus manos se alzaban hacia el cielo, sonreí orgullosa, noté como Nathan levantaba un poco su cabeza y depositó un beso en mi hombro desnudo, un escalofrio recorrió mi piel, miré en dirección a los señores Hunter que me observaban con los ojos llorosos, les sonreí en señal de que todo saldría bien y ellos me sonrieron de vuelta, orgullosa y sin soltar a Nathan, salí de la habitación rumbo a nuestro cuarto. Al llegar lo obligué a sentarse en la cama, este me miró con los ojos hinchados de tanto llorar, se me partió el alma al verle así, me acerqué y lo rodeé con mis brazos mientras él me sentaba en su regazo, ahora me daba igual lo que me dijo en el bosque, sé que lo dijo por el dolor y los nervios del momento, no niego que me doliera, pero me duele más verlo así. Acercó su boca a mi oreja y susurró en el.
- Gracias... Por todo y... Siento lo de antes yo... Yo..., no hacia falta que siguiera hablando lo abrazé más fuerte y besé sus labios con ternura para que entendiera que lo comprendía, el beso se volvió más agresivo y cargado de desesperación sobé su pecho mientras él lo hacia con mis espalda, se acostó y me dejó encima, nos separamos para coger aire y me aferré a su cuerpo como si fuera un koala, él sonrió y me apretó más hacia él, besé su nariz y me acosté en su pecho escuchando el sonido de su corazón, esta noche saldríamos a por los cazadores, no quiero pensar que esta será la última vez que lo sienta si algo salía mal, levanté mi vista y me encontré con su penetrante mirada verde, él notó mi preocupación y me acercó más a él (si eso es posible porque más pegados no podiamos estar...), depositó un tierno beso en mi cabeza y una sensación de paz me invadió, aunque este fuera posiblemente mi último día de vida me llevaría estos preciosos recuerdos conmigo, pasé mi mano por mi trasero para asegurarme de que el cuchillo seguía allí, lo clavaría en el corazón de aquel que tuvo la idea de llevarse a Erick, me tranquilizé al notar que seguía allí, al final nuestras respiraciones se complementaron y caimos rendidos en los brazos de Morfeo, "-te amo" dije con un hilito de voz en mi cabeza antes de caer dormida, esta noche... Todo se decidiría, esta noche traeriamos a Erick a casa, costara lo que costara.
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Hooola, no me maten pliiis, siento no haber subido cap ayer... Pero tuve un día muuuy liado, espero que el capítulo os haya gustado.
- Punto uno... Pobre Erick qwq.
- Punto dos... ¿Qué os pareció ls actitud de Nathan?, ¿y la de Kelly? Vosotros cómo habríais reaccionado, to creo aue lo haría como Kelly...al fin y al cabo ver al sexy dios griego llorando me partiria el alma qwq.
- ¿Cuál es vuestra serie favorita? Las mías son las policiacas, y dentro de ellas mi favorita es "Mentes criminales".
Espero vuestros comentarios y vuestros votos como siempre con los brazos buen abiertos😘😝.
Muuchísiiimos kisses de vuestra escritora Haridian 😜😄, os dejo en multimedia el cuchillo de plata.
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Bajo la luz de nuestra Luna #SinsajoAwards #EditoriaalAwards(Sin Corregir)
Loup-garouKelly es una chica de 15 años que sueña con ser libre, a los 10 años de edad es obligada a convertirse en la sirvienta de su propia familia tras la muerte de su abuela, la única que la protegía y amaba sin condición. Sus padres se niegan a reconocer...