Las chicas no dejaban de hablar sobre su viaje y como habían saltado de alegría cuando supieron que iban a venir aquí. Me contaron que en su hotel se hospedaban chicos y muy guapos y ya le habían echado el ojo a un par. Ellas querían divertirse, y por un momento las envidié.
Que sencillo parece todo cuando uno no está con el corazón roto. Extrañaba mi estado antes de todo esto. Todo se había vuelto un lío.
Les conté que nuestro compañero Gustavo también estaba aquí. Y no tardaron en interrogarme.
-¿Saliste con el? -gritó Carla y rápidamente le pedí que baje la voz, ya que los chicos se encontraban a pocos metros de nosotras.
-Lo vi el otro día en un encuentro de bandas, yo había bebido y mientras bailabamos me besó y me confesó que yo le gustaba.
-¿Y te gustó?-preguntaron mis amigas al unísono, sorprendidas.
-No, el beso fué torpe, además este verano las cosas han cambiado y todo se ha vuelto un lío. Lo que menos me interesa en este momento es Gustavo-respondí y ellas abrieron los ojos-¡Suéltalo Mel!-suplicó Vicky.
Les conté todo lo que había pasado. Desde que llegamos hasta ahora, conté todos y cada uno de los detalles. No pude obviar decirles como me había sentido respecto a los mellizos a lo largo de mi vida. Y que ahora realmente me encontraba muy confundida y no sabía que hacer. Ellas me miraban boquiabiertas, no podían creer lo que les decía.
-¿Qué rayos Mel? Esto es un completo desastre. Siempre lo sospeché, pero debiste contarnos que te sentías así con ellos. Y ahora que todo esto está pasando, no se que decirte. Estas jodida amiga-dijo Carla haciendo una mueca triste. Victoria para mi sorpresa no dijo ni una palabra. Se veía preocupada y estaba sumida en sus pensamientos hasta que Carla le dió un codazo.
-¿Qué harás ahora?-rompió el silencio. Lo dijo nerviosa y no entendí que podía estar pasando su cabeza.
-¡No lo sé, maldición! Mi cabeza es un lío. No quiero lastimar a más nadie. Ojalá pudiera olvidarme de ellos. No merezco que me amen.
Carla me abrazó y no tardé en devolvérselo.-Tranquila, ahora nos tienes a nosotras para subirte el ánimo y estar contigo. Te haremos olvidar de los problemas por unos días. Vamos a divertirnos. La vida no se trata sólo de chicos. Haremos que estas vacaciones sean inolvidables.
Ya eran inolvidables para mi.
Le sonreí con ternura, lo que dijo me hizo sentir optimista. No podía seguir así, iba a divertirme con ellas y olvidarme un poco de toda esta situación.
-¡Las he extrañado!
Si les gusta la historia no duden en votar y/o comentar. Estaría muy agradecida. Gracias por leer ❤
ESTÁS LEYENDO
MI VERANO CON ELLOS © [Terminada, En Edición]
Short StoryMel, de 17 años. Es extrovertida, aventurera y muy alegre. Toda su vida ha estado enamorada de sus dos amigos de la infancia, los mellizos Benjamín y Pablo. Son casi familia, pero las cosas cambiarán este verano, cuando ella descubra que no es la ún...