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Frío, frío y más frío. Seguramente agarraré un resfriado durante esta temporada pero mientras no sea una gripe podré asistir tranquilamente al trabajo aunque espero que los proximos días no sean tan fríos como este. 

Bajo del autobús y me escondo en mi abrigo cuando un viento gélido despeina mi cabello y traspasa todo mi cuerpo. Mis tacones resuenan en el suelo cuando empiezo a caminar hacia la empresa.

Lo único que espero es tener un día normal sin tanto movimiento pero sé que es inevitable eso, sin embargo ruego que los pasantes de este mes no hayan cometido demasiados errores con respecto al orden de las cosas. Nuestros superiores realmente detestan el desorden de su empresa. 

Llegó al edificio y suspiro antes de entrar.

- Eso es de la temporada pasada, Lucy ¿Qué haces juntando esto con lo de esta temporada?

Ella me mira cuando me estoy acercando, Lucy es una de nuestras nuevas pasantes y ha cometido demasiados errores que no puedo permitir también me hice cargo de alguno de ellos para que no la regañara alguno de nuestros superiores.

- Lo... lo siento señorita, Walk.

- Es la cuarta vez que te disculpas conmigo, Lucy, necesito que comprendas que aunque sos nueva y que no conozcas cómo trabajamos aquí, debes prestar mucha atención porque la próxima deberás responder ante el señor Tomlinson - digo dándole una palmada en el hombro luego de indicarle el sector de telas.

 Tomlinson me tiene encargada de ver el desempeño de empleados, mejor dicho el de los pasantes, además de ser la encargada del departamento de diseños. 

La familia Tomlinson es una de las más conocidas gracias a su gran crecimiento en los últimos tiempos, la incorporación del hijo mayor del señor Tomlinson ha permitido incrementar en los últimos años, cuando llegué a este lugar. 

La empresa se divide en plantas y dentro de ellas se encuentran los distintos departamentos. Están los departamentos de contabilidad, el de diseños, el de textil, entre otros. Aunque si bien la empresa se encarga principalmente en la producción textil, Louis Tomlinson nos ha incorporado la idea de que la empresa se convierta también en una indumentaria de ropa. 

He escuchado que Louis, el hijo de nuestro director, ha estado entrevistando nuevas chicas pero no tengo el conocimiento completo de tal información ya que el mismo es muy reservado con todos sus movimientos dentro de nuestra empresa. Solamente nos enteramos de los detalles finales, como siempre. 

Voy hacia la recepcionista. Anne no levanta la cabeza cuando estoy frente a ella.

- Hola - la llamó con voz seca. 

- ¿Qué quieres? - contesta de mala gana.

Realmente no se como esta persona puede atender y recibir a todas las personas que trabajan este lugar, ni siquiera se molesta en fijarse quien le habla. Que fastidio. 

- Buenos días para ti también, mi  día bien si te preguntas - digo sarcásticamente llevando mi mano al pecho.

Anne me queda mirando unos segundos y rueda los ojos mirándome con asco. Río. 

Sí, me encanta fastidiarla porque ella ha sido una de las primeras personas en decirme que no llegaría nada más que solo una costurera principiante y que ahora sea una encargada sé que le molesta.

Resopla. Se levanta de su asiento y recoge unos papeles. 

- El señor Tomlinson hijo, solicita tu presencia en la sala de conferencia, ahora - dice rápido y desaparece por un pasillo.

Subo al ascensor, apretó el botón para subir al último piso, y las puertas se cierran al igual que mis ojos.

Suspiro profundo. 

I'm not your stereotypeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora